Migraña, la 'madre' de las 200 cefaleas existentes que se enfrenta al infradiagnóstico y el estigma
- Es una enfermedad "imprevisible, repetitiva e incapacitante" que afecta a cinco millones de personas en España
- Un porcentaje importante de los que la padecen sufren estrés, insomnio, depresión y ansiedad
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Náuseas, hipersensibilidad a la luz y al sonido, dificultad de concentración, áureas, vómitos, pérdidas de visión, niebla mental, falta de estabilidad y de concentración, malestar general y pérdida de fuerza. Todo esto y más sufren los cinco millones de personas que padecen migrañas en España, principalmente de entre los 20 y 50 años.
La migraña es la cefalea más frecuente- aunque no la única ya que existen 200 tipos- y causa estragos en quien la padece: el 51 % de los pacientes tiene estrés, un 37 % sufre de insomnio, el 30 %, depresión y el 22 %, ansiedad y si no se detecta a tiempo puede complicarse y generar un grado importante de discapacidad, según la Sociedad Española de Neurología (SEN). De hecho, es la primera causa de discapacidad en mujeres menores de 50 años.
Isabel Colomina sufre migraña desde los 13 años y ahora preside la Asociación Española de Migraña y Cefalea. Describe la dolencia como "completamente incapacitante" con un malestar que puede ser incluso "paralizante" y relata cómo se ha perdido citas importantes en su vida como la boda de una amiga, encuentros importantes familiares o momentos de vacaciones por culpa de esta dolencia: "Tienes tales dolores que te encierras y no puedes salir de la habitación".
Cree que en torno a esta enfermedad existen dos problemas claves- el infradiagnóstico y el estigma- que complican dar con un diagnóstico certero y, por tanto, aplicar el tratamiento adecuado desde el principio de la dolencia. Según explica Colomina a RTVE.es, el 75% de las personas que la padecen tarda en torno a dos años en tener un diagnóstico correcto y esto lleva a la automedicación sin control, que a su vez implica la cronificación de la migraña.
Añade que muchos enfermos no van al médico por el estigma- normalizan los dolores de cabeza y creen que es una enfermedad menor- y eso lleva a convertirlo en una dolencia crónica con síntomas más graves. "Tener un dolor de cabeza recurrente no es normal y hay que acudir a un especialista", apunta.
El infradiagnóstico ronda el 40%
El infradiagnóstico se sitúa en torno al 40%, según la Sociedad Española de Neurología, que ha impulsado este mismo año la creación de la Fundación Española de Cefaleas (Fecef) para visibilizar el impacto de los 200 tipos de dolores de cabeza existentes, liderados por la migraña, que afecta al 12 % de la población de nuestro país. Consideran que es una enfermedad que no tiene el reconocimiento político ni social que merece.
El director de esta fundación, el investigador y neurólogo José Miguel Laínez, asegura, en una entrevista a RTVE.es, que "es una enfermedad imprevisible, repetitiva y terriblemente incapacitante" y que "en el momento en el que viene, tienes que dejar de hacer lo que estés haciendo". "Si es la graduación de tu hijo, sencillamente te la pierdes", lamenta.
Pone el foco, además, en que se trata de un problema de salud que no solo ataca físicamente, sino que también puede afectar a su bienestar social y emocional.
Además de concienciar sobre esta patología y luchar para que los pacientes reciban los cuidados necesarios en igualdad de condiciones, uno de los objetivos principales de la Fundación Española de Cefaleas es la de impulsar la investigación.
Todo se complica si hablamos de migraña crónica, que se define como el dolor de cabeza que ocurre durante 15 o más días al mes en un tiempo superior a tres meses.
Carmen tiene 40 años y sufre migrañas desde hace cinco años. Su caso es el ejemplo de un diagnóstico erróneo. Además del dolor de cabeza y malestar general, a ella la migraña le provocaba vómitos y cuando acudió a Urgencias le diagnosticaron una gastroenteritis. Tras un periplo de consultas, resonancias magnéticas y varias visitas a Urgencias, finalmente le diagnosticaron migrañas y todo mejoró tras iniciar el tratamiento adecuado.
Los desencadenantes de los ataques de migraña son múltiples y varían en cada caso: cambios meteorológicos, muchas horas delante de la pantalla, ingesta de algunos alimentos y de alcohol, estrés y mala higiene del sueño están entre los más comunes. En el caso de Carmen, una de las causas claras era beber alcohol, aunque solo fuese una cerveza: "Deje radicalmente de tomar alcohol y prácticamente desaparecieron los dolores".
Javier, de 32 años, también vivió un periplo médico con varios tratamientos de pastillas e incluso infiltraciones en la cabeza hasta que dieron con el tratamiento adecuado, una vez le derivaron a la unidad de cefaleas de su hospital de referencia. En su caso el patrón de la migraña aparece principalmente por la noche. "Me empiezan a llorar los ojos y me da un dolor que me incapacita. Son muchos los días que me he ido a trabajar sin dormir y con dolor", apunta.
Actualmente existen nueve tratamientos -siete de ellos comercializados en España- que son mejor tolerados y más eficaces que los anteriores y que llegan a controlar el dolor en el 90 % de los casos.
"La migraña es incurable, pero con un tratamiento adecuado en la mayoría de los casos se tiene bajo control" apunta la la presidenta de la Asociación Española de Migraña y Cefalea.
Los expertos consultados coinciden en que afecta más a las mujeres que a los hombres y especialmente entre los 20 y 45 años, periodo de mayor actividad laboral y mayor responsabilidad familiar. Varios estudios establecen, además, una relación directa entre las migrañas y el ciclo menstrual de la mujer. La fluctuación de las hormonas sexuales femeninas, los estrógenos y la progesterona, están directamente relacionadas con estas cefaleas.
Banalización a pesar de ser la sexta enfermedad más prevalente
Los enfermos consultados coinciden en que esta es una dolencia que en ocasiones se banaliza y normaliza- a pesar de ser la sexta más prevalente en el mundo- y que socialmente no se percibe como algo grave. En este sentido, Colomina explica que la migraña supone tener "un dolor físico insoportable" y otro adicional: el emocional producido por "la incomprensión de esta enfermedad y por tener que justificar todo el rato como te sientes".
Tener unas rutinas muy establecidas es un buen método de prevención. "Al cerebro le gusta la rutina, cualquier cambio es malo", afirma Colomina, que se pregunta por qué nadie discute que si te da un ataque de epilepsia te paraliza y debes coger una baja, pero no ocurre lo mismo con un ataque de migraña.
En la misma línea, el presidente de la Fundación Española de Cefaleas asegura que si "una menstruación está reconocida como causa de baja, por qué una migraña no si es paralizante".
El neurólogo insiste en que cada caso de migraña y cefalea es diferente en cuanto a causas, síntomas y consecuencias, de ahí la importancia del diagnóstico certero, pero hay algunos patrones comunes y uno de ellos es, desde luego, una buena higiene del sueño. "Que la persona migrañosa duerma bien es clave. El sueño funciona como una limpieza de cerebro más que importante para prevenir los ataques", afirma.
