La diputada de Compromís, Àgueda Micó, denuncia "conflictos" para ejercer su "plena autonomía" en Sumar
- Detalla que la salida del grupo plurinacional se basa en las discrepancias por la dana y la corrupción del PSOE
- Desde Sumar apuestan por una "unidad fuerte" en la izquierda con "proyectos que superen los ombligos"
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La diputada de Compromís en el Congreso de los Diputados, Àgueda Micó, ha reconocido "conflictos" a la hora de ejercer su "plena autonomía" dentro del grupo parlamentario de Sumar. Frente a esta situación, y tras el aval de las bases de su partido, pasará Grupo Mixto para "representar los intereses de los valencianos" con todos los instrumentos de control al Gobierno a su disposición.
Así se ha expresado Micó este martes desde el Congreso en la primera rueda de prensa después de conocer la decisión de Més-Compromís, partido mayoritario de la formación valencianista, de abandonar el grupo plurinacional. Esta posición es el resultado de una consulta a la militancia, que respaldó en un 92% la salida de Sumar para entrar en el Grupo Mixto.
Esta nueva fuga en Sumar no se hará efectiva hasta que la formación valencianista celebre su próxima Ejecutiva Nacional, para la que todavía no hay fecha programada. "Estamos a la espera de esta Eixecutiva y luego haré efectivo este paso. De momento continuo en el grupo plurinacional", ha aclarado Micó.
La corrupción y la dana provocan esta escisión
La decisión de Compromís es el resultado de una serie de desacuerdos en la coalición parlamentaria que han ido incrementando la tensión interna. El punto de inflexión fue el veto de Sumar a la comparecencia del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en la comisión de investigación de la dana. La formación valenciana solicitó que tanto Mazón como Sánchez declaren en el Congreso, pero su grupo tumbó esta propuesta. En consecuencia, a comienzos de junio la dirección de Compromís abrió un debate para valorar su permanencia en el grupo parlamentario de Sumar.
Esta división interna se ha hecho más patente tras las nuevas informaciones sobre la presunta corrupción en el PSOE y la implicación de Santos Cerdán, ex secretario de Organización, en el caso Koldo. "Seguimos combatiendo la corrupción del Partido Popular y también la del Partido Socialista. Se debe combatir siempre y caiga quien caiga. Por todo esto, la decisión de pasar al Grupo Mixto ha recibido un apoyo tan amplio en mi formación" ha expuesto la diputada valenciana.
En esta línea, ha detallado que ha sido "determinante" en la toma de esta decisión que el "PSOE tenga casos de corrupción" y se ha mostrado como una alternativa al bipartidismo para defender los intereses de los valencianos: "Porque la alternativa en Valencia al PP no es el PSOE, es Compromís".
Respuesta a los "intereses de los valencianos"
Àgueda Micó ha presentado esta decisión como una herramienta para reforzar la representación de la Comunidad Valenciana en las Cortes Generales. En una legislatura que, aventura, tiene dos años por delante, necesitan "las manos libres" para ejercer control al PSOE y que "se cumplan todos los intereses de los valencianos y las valencianas".
A su juicio, Sánchez no ha sido capaz de dar solución "a los intereses de los valencianos" durante el tiempo que lleva en el Gobierno. "La gente que nos vota necesita tener respuestas, una opción política honesta que sea una alternativa. Todavía más después de la dana y de la corrupción del PSOE", ha reiterado.
Cuando Podemos abandonó Sumar, Micó reprochó que sus diputados no entregasen el acta por "coherencia". No obstante, ha considerado que esta situación es diferente porque se presentaron a las elecciones generales de julio de 2023 bajo la denominación de "Compromís-Sumar" en las tres circunscripciones de la Comunidad Valenciana. En sus palabras, "tiene todo el sentido" que ambas formaciones deben permanecer con representación en el Congreso.
Sumar apuesta por "proyectos que superen los ombligos"
Con este movimiento, Yolanda Díaz ha sufrido una segunda división en el seno de su formación. La primera llegó en diciembre de 2023, cuando los cinco diputados de Podemos rompieron con la coalición, que pasó a tener 27 escaños de los 31 que había conseguido en las elecciones. Ahora, esta maniobra de Compromís supone la pérdida de otra diputada, debilitando más la fuerza parlamentaria de Sumar y, por tanto, del Gobierno en el Congreso.
La formación de Yolanda Díaz tenía el objetivo fundacional de agrupar a las distintas formaciones progresistas del país para concurrir a las elecciones en una única lista electoral, aglutinando el mayor número de escaños posible. Esta idea original, que se fraguó en los comicios de julio, se ha ido resquebrajando con el tiempo. Menos de dos años después, la coalición ya ha perdido dos de las formaciones que tenían en el Congreso.
La portavoz de Sumar en el Congreso, Verónica Martínez Barbero, ha apostado desde su posición de "gallega nacionalista" por construir "proyectos que superen los ombligos", mirando más allá de aspiraciones territoriales. Por eso mismo, ha tendido la mano a todas las fuerzas de izquierdas del Congreso para negociar y se ha mostrado optimista con la futura relación con Compromís: "Creo que contaremos con Micó para llevar al BOE medidas progresistas, que es lo que importa".
En este sentido, ha pedido "unidad" para construir "un país más justo desde la izquierda" y ha hecho autocrítica sobre las fricciones internas que se han generado: "Somos un grupo plurinacional en un gobierno de coalición, es una situación compleja y trabajamos para que todas las organizaciones se sientan confortables".
