La mujer de un directivo de Quirón niega que la venta de su empresa a González Amador fuese una comisión encubierta
- Asegura ante la jueza que aceptó la compraventa porque le pareció una oferta razonable
- La magistrada investiga los delitos de corrupción en los negocios y administración desleal
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La mujer del presidente de Quirón Prevención, Gloria Carrasco, ha declarado en calidad de investigada en el caso que investiga a Alberto González Amador, pareja de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso. Según fuentes presentes en su declaración, Carrasco ha negado que la venta de una sociedad al empresario fuese una comisión y ha asegurado que aceptó la transacción porque le pareció una oferta razonable.
Así ha defendido la legalidad de esta operación ante la magistrada Inmaculada Iglesias, titular del Juzgado de Instrucción número 19 de Madrid, quien le citó a declarar para determinar si González Amador pagó una comisión encubierta de medio millón de euros a través de la compra de una sociedad. Según los informes de la Agencia Tributaria, esta empresa carecía de "actividad y patrimonio".
Aunque ella no se encargaba de los contratos y tampoco hablaba con su marido, Fernando Camino, de este tipo de asuntos, ha dado extensos detalles sobre esta transacción en una declaración que ha durado más de una hora.
Se investigan los delitos de corrupción en los negocios y administración desleal
La jueza investiga la comisión de dos delitos en la compraventa de Círculo de Belleza S.A., uno de corrupción en los negocios y otro de administración desleal, por los que abrió una pieza separada. González Amador adquirió esta empresa por un valor de medio millón de euros, un monto que levantó las sospechas de la AEAT por estar por encima de su valor real de mercado. Adquirida en 2020, la empresa había facturado el año anterior unos 30.000 euros y solo contaba con dos aparatos de depilación y un ordenador portátil.
Iglesias busca determinar si este pago de 500.000 euros encubre una comisión para el presidente de Quirón Prevención, Fernando Camino, para entregarle una parte de los dos millones de euros que habría recibido la pareja de Ayuso por la intermediación en un contrato de mascarillas durante la pandemia. Carrasco, además de ser la esposa de Camino, formaba parte del consejo de administración de la empresa que adquirió este material sanitario y que facilitó el cobro de la comisión.
González Amador alegó que la empresa incluía una buena red de contactos
González Amador ya declaró como investigado en esta pieza y su defensa aportó documentación para justificar la compraventa de esta empresa. El empresario afirmó ante la jueza que la sociedad tenía una interesante red de contratos de distribución y por eso hizo ese desembolso. No obstante, sus explicaciones no convencieron a las acusaciones populares que ejercen el PSOE y Más Madrid, motivo por el que solicitaron a la jueza la declaración de Carrasco.
Esta pieza separada deriva de la causa principal que investiga a la pareja de Ayuso por fraude fiscal. En total, el empresario está acusado de cinco delitos que tienen su origen en la compraventa de mascarillas por dos millones de euros que luego trató de canalizar, según indican las pesquisas judiciales.
