Operación Telaraña: cómo drones ucranianos de 500 euros destruyeron bombarderos rusos de más de 100 millones
Diario de Ucrania
- Ucrania ejecuta con éxito la acción más espectacular y contundente desde que comenzó la invasión rusa
- Guerra Rusia-Ucrania, en directo
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El pasado domingo 1 de junio, más de 100 drones ucranianos, durmientes y escondidos en el interior de camiones aparcados cerca de cuatro bases aéreas rusas, se activaron y, dirigidos desde Ucrania, destruyeron varios bombarderos estratégicos rusos. 41, según Ucrania; menos de 10, según Rusia. Un destrozo de miles de millones de euros provocado por aparatos de entre 500 y 1.000 euros que muchas veces se usan como un juguete. Es el resumen de la Operación Telaraña, la acción más espectacular y contundente que Ucrania ha realizado desde que comenzó la invasión rusa.
¿Cómo ha conseguido Ucrania llevar a cabo con éxito esta operación pionera que puede cambiar la forma de entender la guerra en el siglo XXI? ¿Qué impacto puede tener la Operación Telaraña en la guerra de Ucrania? Lo analizamos en este nuevo capítulo del podcast 'Diario de Ucrania' con Guillermo Pulido, analista de Defensa de la Revista Ejércitos, y con Yuri Felstinsky, historiador estadounidense de origen ruso, con el que hablamos también sobre las negociaciones infructuosas entre Rusia y Ucrania para alcanzar la paz.
Un golpe a la capacidad de combate rusa
No es la primera vez que Ucrania golpea a Rusia dentro de su territorio, pero la Operación Telaraña llama la atención por los lejos que ha conseguido llegar, una de las bases atacadas estaba a 4.000 kilómetros de la frontera ucraniana, y por el daño infligido, al destruir varios de los aviones estratégicos que Moscú utiliza para bombardear las ciudades ucranianas. "Son los aviones que Rusia emplea para lanzar misiles de crucero contra objetivos ucranianos. Además, forman parte de la tríada nuclear rusa, junto a los submarinos y los misiles balísticos avanzados en tierra y, por tanto, es un factor bastante importante en la disuasión estratégica rusa", explica Guillermo Pulido.
Ucrania afirma haber dañado 41 de estos aviones. "Si esa cifra es real, estaríamos hablando del 35% de la aviación estratégica rusa. Desde luego es un golpe muy importante, pero en una guerra tan grande como la de Ucrania no es definitivo, no va a decidir por sí solo el devenir del conflicto", añade Pulido.
El historiador Yuri Felstinsky cree que se trata de una operación "absolutamente brillante que quedará grabada en los libros" y que pone de manifiesto "el gran fracaso de los servicios de seguridad rusos". "En parte es comprensible porque los rusos creen que son muy superiores a los ucranianos y no son capaces de ver que estos están llevando a cabo la guerra de una forma más inteligente que ellos", dice Felstinsky, que cree Ucrania debe dar un paso más si quiere hacer tambalear a Rusia. "La clave es que empiecen a atacar Moscú. Rusia es un país enorme, pero es un país de una sola ciudad. Si los ucranianos logran llegar a Moscú, y después de lo del domingo está claro que pueden hacerlo, serán capaces de forzar a Putin a detener la guerra".
Drones de 500 euros contra bombarderos de más de 100 millones
Zelenski asegura que han estado un año y medio planificando la Operación Telaraña, una acción audaz, sorprendente y novedosa en las formas. "No tiene precedentes en la historia de la guerra", afirma Pulido. "La novedad no es solamente la magnitud de la destrucción que parece que han conseguido causar, sino que ha empleado drones comerciales que se usan como juguetes y que cuestan entre 500 y 1.000 dólares, incluyendo el dron y el arma".
Esos pequeños drones han conseguido destruir aviones carísimos. "Un caza de última generación te puede costar 100 millones de euros aproximadamente. Y en este caso estamos hablando de bombarderos cuatrimotor, mucho más grandes. Si Rusia quiere reemplazarlos con una capacidad parecida, le costará 200 o 300 millones", calcula el experto de la Revista Ejércitos. "Aun así, el valor militar es muy superior al económico porque estas capacidades son difíciles de reproducir y de mantener en el tiempo".
Un cambio de paradigma en la guerra
El exitoso ataque de los drones ucranianos obliga a revisar los manuales militares que han guiado las guerras hasta ahora. "Nos lleva a un cambio de paradigma revolucionario. Desde el siglo XX, la guerra estuvo basada en las grandes máquinas: bombarderos, fragatas, portaaviones, carros de combate, helicópteros de ataque que se iban disparando entre ellos. Ahora las municiones de precisión, los enjambres de drones, cambian completamente el paradigma militar, porque cosas que eran muy caras son fácilmente destruirles por cosas que son muy baratas", recalca Pulido.
"Lo que hemos visto con la Operación Telaraña es la plasmación irrefutable e indiscutible de este cambio de paradigma, que ya aparecía en muchos análisis teóricos, pero que, hasta ahora, los decisores burocráticos militares no se habían decidido a aplicar", concluye el experto.
