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La Facultad de Bellas Artes de Valencia exhibe un lienzo que pide prisión para Mazón: "La obra habla por sí misma"

  • El estudiante de máster, Adrián Larok, es el autor del polémico grafiti sobre tela
  • La comisaria de la muestra y vicedecana defiende la libertad total de los artistas
La Facultad de Bellas Artes de Valencia exhibe un lienzo que pide prisión para Mazón
Obra expuesta en la Facultad de Bellas Artes de Valencia con Mazón vestido de presidiario. EFE/Ana Escobar
RTVE.es

La Facultad de Bellas Artes de la Universitat Politècnica de València (UPV) exhibe un grafiti sobre tela de un alumno que muestra al president de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón, vestido con un mono naranja de presidiario y sosteniendo un cartel con la cifra de 228 -en alusión al número de fallecidos en la dana-, bajo el lema A presó (A prisión).

El lienzo es una de las cien obras presentadas a la PAM!25 XIII Muestra de Producciones Artísticas y Multimedia, una iniciativa organizada desde el Vicedecanato de Cultura de la Facultad de Bellas Artes destinada a los 90 alumnos de los cuatro másteres oficiales que se imparten en este centro.

La comisaria y vicedecana, Laura Silvestre, ha explicado a TVE que este proyecto cultural pretende que los estudiantes de los másteres puedan presentar sus proyectos artísticos y un jurado de expertos elige diez para exhibirlos en la Muestra PAMPAM! en la ciudad, una exposición que lleva celebrándose 13 años.

Libertad de creación

Silvestre indica que en esta apuesta por el arte joven el único requisito es "tener una creación madura para poder presentarla, de manera libre, no hay criba ni preselección", de hecho en el conjunto de obras presentadas se aprecian diferentes "intereses, preocupaciones y propuestas de resolución formal".

"Los artistas se expresan con la libertad de creación que deben tener desde una universidad pública", afirma la comisaria de la muestra. Silvestre muestra "cierta decepción" por que los medios se centren en "el tema sensacionalista", cuando la muestra tiene entidad propia para ser noticia. Añade que la polémica "ni se pretende, ni lo pretendemos esquivar" porque "el arte es un cauce para expresarse".

El grafiti sobre tela no suscitó ninguna controversia entre el jurado, del que forman parte, la directora del IVAM, Blanca de la Torre, el director del Museo de Bellas Artes de València, Pablo González Tornel y Javier Molins, de la Fundación Hortensia Herrero, entre otros. Silvestre apunta que las obras transmiten "crítica política y social, propaganda, desmontan las lógicas descoloniales cada uno a su manera, con escultura, pintura, videoarte, obra gráfica o performance".

Obra que habla por si sola

Los trabajos se exponen en todos los lugares de tránsito de la facultad -desde pasillos, a accesos o ascensores- que se conceden previamente a cada participante por sorteo. Entre las diez obras ganadoras no se encuentra la tela dedicada a Mazón, realizada por Adrián Larok, natural de Linares, que cursa el máster de producción artística y llegó a Valencia en septiembre para iniciar al curso.

En el trabajo de Larok siempre hay un "trasfondo de crítica territorial y social, de barrio. Ahora pasa a una crítica más política", con Mazón vestido de presidiario, pero la vicedecana insiste en que los artistas presentan "propuestas muy diversas" y pone como ejemplo que en otras obras aparece la virgen del Carmen.

El joven artista jienense asegura a TVE que "la obra habla por si sola" en su línea habitual de abordar temas sociales y políticos. Explica que su idea era "elegir un espacio de tránsito y convertirlo en algo político y reivindicativo" porque "hace falta un poco de justicia".

Larok asegura que su trabajo "no es provocador, es más reivindicativo y hacer una crítica". Sobre la técnica utilizada de grafiti sobre lienzo, describe que "primero realizo un trabajo digital, un collage mediante un fotomontaje y luego hago la ilustración y lo materializo en estencil".

Este alumno del máster asegura:" Me molesta bastante por mis compañeros que han ganado, que los medios se hagan eco por esto y no por la decisión del jurado". Con respecto a su popularidad sobrevenida, dice que "tras cinco años con obra política quizas ha sido el momento justo y la obra concreta". Cuando termina de hablar en los pasillos de la facultad, los presentes rompen a aplaudir.