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TVE repasa la vida del papa Francisco en un Telediario 2 especial

TVE repasa la vida del papa Francisco en un Telediario 2 especial
RTVE.es

El papa Francisco ha fallecido este lunes en la Casa Santa Marta, su residencia dentro del Vaticano, a los 88 años. Su fallecimiento se ha producido solo un día después de su última aparición pública, durante la bendición urbi et orbi del Domingo de Resurrección, desde el balcón principal de la basílica de San Pedro.

Por ese motivo, TVE ha emitido este lunes un Telediario 2 especial acercándose a la figura del pontífice y repasando los momentos clave de su vida y pontificado.

La noticia ha sido confirmada a primera hora de este lunes por el cardenal camarlengo Kevin Joseph Farrell, quien ha comunicado: “Con profundo dolor tengo que anunciar que el papa Francisco ha muerto a las 7.35 horas de hoy”. Poco después, las campanas de San Pedro comenzaron a repicar para anunciar su muerte al mundo.

De Buenos Aires al Vaticano

Nacido como Jorge Mario Bergoglio en Buenos Aires en 1936, fue hijo de inmigrantes italianos y se unió a la Compañía de Jesús en su juventud. Ordenado sacerdote en 1969, dedicó gran parte de su vida al trabajo pastoral en su país, especialmente entre los más desfavorecidos.

En marzo de 2013, tras la renuncia de Benedicto XVI, fue elegido papa, convirtiéndose en el primer latinoamericano y el primer jesuita en asumir el cargo. Eligió el nombre de Francisco en referencia a san Francisco de Asís, como símbolo de humildad y compromiso con los pobres.

Miles de fieles rezan por el papa Francisco en la Plaza de San Pedro

Durante sus 12 años al frente de la Iglesia Católica, impulsó un enfoque más abierto y comprometido con los grandes desafíos sociales: el cambio climático, la migración, la pobreza o la necesidad de justicia dentro de la propia Iglesia. También se enfrentó a uno de los mayores desafíos dentro de la Iglesia: los abusos sexuales, y organizó una cumbre proponiendo normas para acabar con ellos. Su estilo directo y su cercanía lo convirtieron en una figura respetada, incluso más allá del ámbito religioso.

Durante su pontificado, recorrió más de 60 países, convirtiéndose en una voz influyente en el escenario internacional. Sus declaraciones resonaron entre líderes globales, aunque no siempre fueron bien recibidas por todos. Se esforzó por tender puentes con el islam, fortaleciendo el diálogo interreligioso, y no dejó de alzar la voz por la paz en conflictos como los de Ucrania y Gaza, gestos que fueron reconocidos incluso por autoridades de ambas regiones.

Su relación con España

El papa Francisco nunca realizó una visita oficial a España. Su agenda se centró en países con presencia católica más reducida o donde la figura del papa aún no había tenido presencia. Aun así, España no le fue ajena. En su juventud, pasó un tiempo en una residencia en Alcalá de Henares entre 1970 y 1971, antes de ingresar formalmente en la Compañía de Jesús.

Aunque declinó visitar el país incluso en momentos críticos como la crisis migratoria en Canarias, mostró una constante atención a los desafíos sociales que afectaban al país. Desde el Vaticano, impulsó una renovación dentro de la Iglesia española, promoviendo el nombramiento de obispos más comprometidos con una Iglesia más abierta y participativa. También forzó una respuesta institucional ante los abusos sexuales, exigiendo investigaciones internas y la apertura de oficinas para atender a las víctimas.

En el ámbito político, el papa recibió en dos ocasiones al presidente del Gobierno español en 2020 y 2024. Entre ambas visitas, se llevaron a cabo reformas que afectaron directamente a las relaciones entre España y la Santa Sede, incluyendo la revisión de los pactos firmados durante la Transición y cambios en la legislación de memoria democrática. La exhumación de Francisco Franco del Valle de Cuelgamuros fue un asunto sobre el que el Vaticano se mantuvo neutral, aunque permitió la transformación simbólica del espacio y la salida del prior benedictino, sin eliminar la presencia de la Orden.

También se modificaron aspectos fiscales que afectaban a la Iglesia, eliminando privilegios impositivos. Tras su fallecimiento, el Gobierno español ha decretado tres días de luto oficial y el ministro de Presidencia, Félix Bolaños, ha instado a la institución eclesiástica a continuar el rumbo de apertura iniciado por Francisco.

Reacciones políticas y eclesiásticas

La noticia de su muerte ha generado una reacción generalizada entre las fuerzas políticas, aunque cada una ha subrayado aspectos distintos de su legado. El líder del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, lo ha recordado como un pontífice cercano al mundo hispanohablante que estuvo a punto de visitar Santiago de Compostela. Vox ha expresado su pésame desde una óptica más religiosa, uniendo su voz a la de millones de católicos en el mundo.

Desde la izquierda, el reconocimiento se ha centrado en su perfil reformista y su lucha por la justicia social. La vicepresidenta Yolanda Díaz lo ha destacado como un líder que usó su influencia para promover un mundo más justo. La portavoz socialista Esther Peña ha subrayado la importancia de que su compromiso con la paz y los más vulnerables no quede en el pasado.

Los obispos españoles han reaccionado con tristeza a la noticia. A pesar de su estado de salud delicado, su muerte ha tomado por sorpresa a muchos. Su legado, según han señalado, quedará marcado por la cercanía y sensibilidad hacia los más desfavorecidos. El presidente de la Conferencia Episcopal, Luis Argüello, ha expresado su esperanza en la continuidad del espíritu renovador del pontífice en el próximo papado. El arzobispo de Barcelona, Juan José Omella, será uno de los representantes españoles en el cónclave. Mientras tanto, la nunciatura abrirá sus puertas para quienes deseen despedirse firmando en el libro de condolencias, y en varias diócesis ya se celebran misas en su honor.

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Argentina despide a su papa

En Argentina, su país natal, la tristeza fue especialmente profunda. Jorge Bergoglio fue el primer papa latinoamericano y también el primer jesuita en asumir el cargo. En Buenos Aires, donde fue arzobispo durante años, se celebraron misas para recordarlo. Fieles y religiosos destacaron su profunda preocupación por la pobreza y su cercanía con los sectores más olvidados.

A pesar de no haber vuelto físicamente a su país tras ser elegido, mantuvo el contacto constante con su gente. Llamaba a sacerdotes de barrios vulnerables, conocía la realidad de las villas y nunca dejó de defender a los excluidos. De joven, en uno de sus paseos al campo, se acercó a una parroquia y ahí, con solo 17 años, sintió el llamado que lo llevaría al sacerdocio, aunque su madre soñaba con verlo convertido en médico.

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Un adiós austero

Fiel a su estilo sencillo, Francisco había solicitado que su funeral no siguiera el protocolo tradicional. Será enterrado en la basílica de Santa María la Mayor, en lugar de las grutas vaticanas, y su féretro será único: de madera, con revestimiento interior de zinc, eliminando los habituales tres ataúdes de ciprés, plomo y roble. No habrá catafalco ni báculo papal en exposición; su cuerpo será velado de forma sencilla, en un ataúd abierto, permitiendo que los fieles le rindan homenaje de manera directa.

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El proceso de sucesión

La elección de su sucesor se iniciará en los próximos días, dentro del marco tradicional del cónclave. Entre 15 y 20 días después del fallecimiento, los cardenales menores de 80 años —135 en total— se reunirán en la Capilla Sixtina para iniciar las votaciones.

Habrá sesiones dobles cada jornada, mañana y tarde, hasta que uno de los candidatos logre una mayoría de dos tercios. Si no se alcanza consenso tras 34 votaciones, se limitará la elección a los dos aspirantes más votados. La fumata blanca anunciará el nuevo pontífice, acompañado del repique de las campanas en la plaza de San Pedro.

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