Un cambio administrativo mantiene a 14 solicitantes de asilo acampados a la puerta del CETI de Melilla
- Se ha modificado un trámite que era presencial y algunos tienen no tienen cita hasta el mes de abril
- Las ONG hablan de "deshumanización de la atención" y acuden al Defensor del Pueblo
Un grupo de 14 personas solicitantes de asilo permanecen acampadas a las puertas del Centro Temporal para Inmigrantes (CETI) de Melilla desde hace una semana. Están varados en sus tiendas de campaña en un limbo burocrático: un cambio en la forma de solicitar la cita para ser atendidos les ha dejado en la calle. El trámite, que hasta ahora podía resolverse por completo de forma presencial, ha pasado a ser telemático e implica una extensión de la espera. En concreto, se trata de la llamada "manifestación de voluntad", un documento que antes se podía resolver al tiempo que la cita previa pero ya no.
Estrella, por ejemplo, tiene cita para el mes de abril. Ella es una ciudadana peruana de 62 años. Precisamente fue a Melilla con la intención de agilizar los trámites de solicitud de asilo al encontrarse colapsado el sistema de atención en la península. Una vez allí, también se digitalizó el sistema en la ciudad autónoma para igualarlo al resto del país. Ocurrió sin previo aviso y Estrella se quedó en la calle: "ahora no sabemos adónde ir", dice a TVE.
A las puertas del CETI estos migrantes han instalado un campamento en el que llevan ya una semana. Allí les sorprendieron las fuertes lluvias de este jueves y fueron trasladados y hospedados por parte de la ciudad autónoma. Sin embargo, este viernes han vuelto a sus refugios improvisados por temor a que los desmantelen y ellos acaben definitivamente expulsados.
La ministra de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones de España, Elma Saiz, asegura que se están ocupando de ellos: "me consta que en este momento, en una conjunción de colaboración entre las distintas administraciones se ha dado respuesta a esta situación."
Las ONG no creen que se esté haciendo lo suficiente, piden una solución habitacional definitiva para estas personas hasta que se resuelva su situación administrativa. "No se puede deshumanizar la atención y que sean problemas burocráticos los que hagan más indefensos a personas que vienen ya de una situación de indefensión", afirma Fernando Moreno, de la ONG Geum Dodou. Varias organizaciones están auxiliando a los solicitantes de asilo y ya han elevado una queja al Defensor del Pueblo.
