La fiscal superior de Madrid declara ante el Supremo que la filtración sobre el novio de Ayuso solo pudo salir de la Fiscalía
- Lastra ha asegurado que le dijo a Ortiz que él había filtrado los correos y que este respondió: "Eso no importa ahora"
- También ha declarado el fiscal del caso del novio de Ayuso, quien ha negado que exista un protocolo de borrado


La fiscal superior de Madrid, Almudena Lastra, ha declarado este jueves en el Tribunal Supremo que, a su juicio, la filtración a los medios de comunicación de los correos de la defensa de la pareja de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Alberto González Amador, solo pudo haber salido de la Fiscalía porque a los datos en cuestión no tenían acceso otras partes.
Además, Lastra ha asegurado ante el magistrado que le dijo al fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, la mañana del 14 de marzo que él había filtrado a la prensa el correo relativo al novio de Ayuso: "Álvaro, has filtrado tú". Según ha relatado al juez, el jefe del Ministerio Público le contestó: "Eso no importa ahora".
Fuentes jurídicas han confirmado que Lastra se ha pronunciado así en su declaración como testigo en el marco de la investigación que se dirige contra el fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, y la fiscal jefa provincial de Madrid, Pilar Rodríguez, por un presunto delito de revelación de secretos por la supuesta filtración que denunció Alberto González Amador.
Según consta en el sumario de la causa, la sucesión cronológica arranca a las 21:29 horas del 13 de marzo, cuando 'El Mundo' publicó que la Fiscalía ofrecía un pacto al novio de Díaz Ayuso. A las 22:10, La Sexta publicó una información en sentido contrario, aclarando que fue la defensa la que manifestó su voluntad de llegar a un acuerdo, reconociendo a cambio dos delitos fiscales. Desde ese momento se sucedieron las informaciones periodísticas.
De acuerdo a la información que obra en el sumario del caso, el 7 de marzo la Fiscalía de Madrid puso en conocimiento de la FGE tanto la investigación contra González Amador como la judicialización de la misma. No obstante, a raíz de la publicación de 'El Mundo', esa misma noche del 13 de marzo se puso en marcha la maquinaria de Fiscalía General para conseguir la cadena completa de 'emails' y aclarar así de quién había partido la iniciativa de pactar.
Salto niega que exista un protocolo de borrado
Este jueves también ha comparecido como testigo el fiscal de delitos económicos que investigó a González Amador por presuntos delitos fiscales, Julián Salto. Es la segunda vez que tanto él como Lastra declaran en sede judicial, toda vez que ambos testificaron cuando el caso estaba en manos del Tribunal Superior de Justicia de Madrid.
El interrogatorio de Salto ha empezado sobre las 12.00, tras un breve receso después de la declaración de Lastra. El fiscal ha negado que exista un protocolo de borrado, según las fuentes consultadas.
El instructor del caso les citó a ambos para que explicaran las comunicaciones que mantuvieron la noche del 13 de marzo, antes de que a las 10:20 horas del día 14 la Fiscalía publicara la nota de prensa donde daba cuenta del cruce de correos electrónicos entre la defensa de González Amador y Salto, y por la que comenzó la investigación judicial a raíz de la denuncia de González Amador.
El magistrado del Supremo acordó ambas citaciones después de recibir los informes de la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil con el análisis de la información incautada en los registros practicados el pasado 30 de octubre en el despacho de García Ortiz y en el de Rodríguez.
De esos informes y de la investigación llevada a cabo por el TSJM, se sabe que Salto y Lastra mantuvieron una serie de conversaciones -con llamadas telefónicas y mensajes de WhatsApp- durante la noche del 13 de marzo por dos asuntos relacionados: enviar a la Fiscalía General del Estado la cadena de 'emails' y la publicación de la nota de prensa.
Aunque esa nota de prensa fue el punto de partida, cuando el Supremo abrió causa el pasado 16 de octubre descartó delito en el comunicado porque la información que ofrecía ya se había publicado horas antes en los medios de comunicación. Así, puso el foco en la filtración de los 'emails' a la prensa a lo largo de la noche del 13 de marzo.