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Riesgos en los disfraces de Halloween: cordones largos, piezas pequeñas o bolsas de embalar finas

  • Un reciente estudio de la OCU detecta una amplia lista de riesgos en muchos disfraces analizados
  • El organismo recomienda revisar siempre el etiquetado, prestando especial atención a la edad recomendada

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Un reciente estudio de la OCU detecta una amplia lista de riesgos en disfraces de Halloween

El último informe de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) revela algunos de los riesgos que se pueden encontrar en los disfraces y accesorios de Halloween. En total, se han analizado 15 disfraces, cinco complementos y cinco pinturas de cara de venta online.

Entre los principales peligros aparecen los cordones demasiado largos, las piezas pequeñas o las bolsas de embalaje muy finas por riesgo de asfixia. La organización desaconseja el uso de capuchas y caretas completas, tanto por su mala ventilación como por el riesgo de inflamabilidad.

El principal problema a la hora de estudiar estos artículos es la dificultad a la hora de comprobar estos peligros, ya que hasta que no llega a casa el disfraz y se abre, el cliente no puede comprobar que cumple con los requisitos de seguridad. Algo, de especial importancia, sobre todo entre los artículos destinados a los más pequeños de la casa.

¿En qué hay que fijarse a la hora de comprar un disfraz?

Una vez llega el disfraz a casa es importante revisarlo, especialmente, si se adquiere por internet. Además, hay que prestar especial atención al marcado CE, el marcado europeo, o sin mención de edad: "Hemos comprado de manera anónima todos los disfraces y nos hemos encontrado con que las tres cuartas partes tienen riesgos", explica leana Izverniceanu, directora de Comunicación de la OCU.

Cuando son para niños menores de siete años, la presencia de cuerdas y lazos de más de siete centímetros y medio en la zona del cuello de los disfraces está prohibida: "En algunos disfraces hemos visto que el cordón que llevan es más largo de lo permitido", explica Izverniceanu, en 'La Hora de la 1'.

Lo mismo sucede con las piezas sueltas pequeñas o que se pueden desprender o romper en trozos fácilmente. Están prohibidas en disfraces para menores de tres años, pero también son peligrosas cuando están en el disfraz de un hermano mayor: "Otro de los problemas que encontramos con las piezas que se desprenden con mucha facilidad y los más pequeños se pueden tragar esas piezas".

Y por último, también están prohibidas las bolsas de embalaje de plástico demasiado finas, de menos de 38 micras. Cuanto más delgadas, más fácilmente se adhieren al rostro: "Las bolsas en las que vienen los disfraces están legisladas. Si son muy pequeñas se las pueden tragar o colocar sobre la cabeza. Algo que es más habitual de lo que pensamos".

Mejora la calidad en los maquillajes y baja el riesgo de inflamabilidad

En el caso de los maquillajes, dice Ileana, los problemas se encuentran en el etiquetado, sin embargo, mejora la composición. No se han encontrado metales pesados, colorantes azoicos ni ftalatos, salvo en el adorno de un disfraz: "No hay tóxicos como otros años ni problemas de alergias. En el laboratorio tienen buenos resultados, pero la madre o el padre deben saber qué le pone en la cara del niño".

Menos frecuente es el riesgo de inflamabilidad: se ha detectado en tres de los 15 disfraces analizados, ya sea por la velocidad de propagación de la llama como por su persistencia. Por último, la OCU desaconseja el uso de disfraces con capuchas cerradas y de caretas completas, tanto por su mala ventilación como por su posible inflamabilidad. En este caso es preferible pintar la cara con maquillajes al agua que, además, son fáciles de quitar. Tampoco es recomendable el empleo de lentillas de fantasía, salvo que se compren en una óptica y se limite su uso a unas pocas horas.

La OCU solicita un mayor control

Ante los riesgos detectados desde la OCU solicitan mayor control, además, ha avisado de los productos peligrosos a la Red de Alerta Europea (Safety Gate), al Ministerio de Consumo y a los comercios afectados para que se retiren cuanto antes: "Hemos alertado a estas páginas de comercio electrónico de estos riesgos. Por su parte, se han comprometido a retirar estos productos a las 48 horas. Además, hemos advertido al Ministerio de Consumo para que tomen las medidas que consideren oportunas".

Para finalizar, desde la OCU recuerdan la importancia de guardar los resguardos de la compra por si fuera necesario reclamar después: "El consumidor puede pedir que se le devuelva el dinero íntegramente si su disfraz no cumple con estos requisitos de seguridad", concluye Izverniceanu.