El 11 de febrero se celebra el Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia. La Asamblea General de Naciones Unidas decidió recordar esta jornada el 22 de diciembre de 2015 y, cinco años después, continúa siendo muy oportuna su existencia porque, a día de hoy, siguen existiendo claras diferencias entre hombres y mujeres en esta materia.
Para la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), “la ciencia y la igualdad de género son fundamentales para el desarrollo sostenible”. Sin embargo, menos del 30% de la investigación científica en todo el mundo lleva nombre de mujer.
257 años para tener derecho a lo mismo
¿De dónde parte esta gran diferencia entre sexos? El Foro Económico Mundial (FEM) reflejó en su último Informe Anual de Brecha Global de Género que aún tendrán que pasar 257 años para que hombres y mujeres tengan las mismas oportunidades económicas. Además de este factor -el monetario-, otros como la educación, la salud y el poder político en los distintos países también se han tenido en cuenta a la hora de hacer este documento.
Por mucho que pueda parecer una cifra desorbitada, lo cierto es que los datos hablan por sí solos. Por ejemplo, hay 85 naciones que en los últimos 50 años no han contado con una jefa de Estado. O donde solo el 55% de las mujeres de entre 15 y 64 años están en el mercado laboral, mientras que los hombres lo están en un 20% más (78%).
Una tarea tan común en España como es abrir una cuenta bancaria está completamente prohibida en 72 países. Si bien es cierto que en países como Arabia Saudí se permite a las mujeres desde 2019 viajar de forma autónoma o realizar algunas tareas familiares que antes les estaban vetadas, la realidad es que no en todas partes pueden hacer lo mismo que los hombres. O, en todo caso, se quedan con las tareas “de siempre”, como son las labores del hogar, a las que dedican también un mayor esfuerzo (lo que se traduce en más horas).
Las naciones más igualitarias, teniendo en cuenta todos estos factores, son, por este orden: Islanda, Noruega, Suecia, Finlandia, Nicaragua, Nueva Zelanda, Irlanda, España, Ruanda y Alemania.
“Para construir economías más justas e inclusivas debemos inculcar la paridad de género en la educación, la salud, la política y la participación económica. El @wef presenta hoy el Índice Global de Brecha de Género de 2020 ➡️ https://t.co/0RLzDrLyKL #gendergap20 pic.twitter.com/SUrnF8Dopk“
— WEF en Español (@wef_es) December 17, 2019
La educación, también señalada
Aunque ya son más niñas que niños las que asisten a la escuela, por lo general no son las más numerosas en disciplinas vinculadas con la ciencia, la tecnología, la ingeniería y las matemáticas (STEM, por sus siglas en inglés). Para la UNESCO, "los prejuicios, las normas sociales y las expectativas limitan la calidad de la educación y de las asignaturas que estudian muchas niñas y mujeres".
En 2019, este organismo publicó el informe Descifrar las claves: la educación de las mujeres y las niñas en materia de STEM, que recogía que únicamente el 35% de los estudiantes matriculados en las carreras vinculadas a las STEM en la educación superior son mujeres, y se han señalado diferencias en estas especialidades. Por ejemplo: solo el 3% de las estudiantes de la educación superior, por ejemplo, escogen realizar estudios en el ámbito de las tecnologías de la información y la comunicación (TIC).
Estas disparidades preocupan especialmente cuando estas carreras están intrínsicamente relacionados con "los empleos del futuro, la fuerza motriz de la innovación, del bienestar social, del crecimiento inclusivo y del desarrollo sostenible". De ahí nació SAGA, otro proyecto de la ONU que busca "ofrecer a gobiernos y legisladores una variedad de herramientas para reducir la brecha de género global" en estos campos.
En Lab24 han querido destacar el trabajo de 100tíficas, donde cientos de investigadoras participan para romper con los estereotipos de género "que todavía siguen marcando la elección de una carrera univesitaria".



(Música)
"100tíficas es una iniciativa
que quiere acercar la ciencia a las escuelas.
Participan centenares de investigadoras
que luchan contra los estereotipos de género
que todavía siguen marcando
la elección de una carrera universitaria.
Han aprendido técnicas de profesionales de la educación
para motivar a las niñas escolares
y despertarles el interés por la ciencia y la tecnología
que busca inspirar su vocación para que se conviertan en líderes
dentro de un mundo históricamente masculino.
El Barcelona Institute of Science and Technology
es una fundación científica cuya misión es ayudar
a los siete centros de investigación de excelencia que lo forman
para que se articulen en una plataforma
que facilite la colaboración, proyección internacional
y cree sinergias entre sus grupos investigadores.
Sus proyectos estratégicos
buscan producir un impacto en la sociedad
con iniciativas en la frontera del conocimiento.
Se distribuye en cuatro localidades
y conecta cinco campus universitarios."
(Música)
(Música)
"Desde pequeñas, una gran mayoría de mujeres
se autoexcluye para hacer física o matemática.
Ni siquiera sueñan con ser ingenieras o tecnólogas.
Solo el 28% de las investigaciones del mundo tienen nombre de mujer,
lo que obliga todavía hoy
a organizar debates solo con científicas.
En ese encuentro multitudinario de mujeres investigadoras
y emprendedoras en Barcelona llamado 100tíficas,
participan varios centenares de mujeres
con perfil científico-tecnológico.
Debaten sobre su papel como modelos a seguir de cara a fomentar
el impulso de vocaciones científicas entre las niñas.
Y lo hacen con mensajes como este."
El médico, sin la ciencia detrás, no puede seguir adelantando.
Esto es lo que hay que transmitir a las niñas.
"Neus Domingo,
exjefa del Laboratorio de Microscopía de Fuerzas Atómicas
del Instituto Catalán de Nanociencia y Nanotecnología,
se centra en el estudio de materiales termoeléctricos,
materiales especiales que, en la superficie,
pueden ayudar a dividir moléculas como las del agua
y producir gases como el hidrógeno.
Este campo de investigación es muy prometedor,
dado que el hidrógeno no se encuentra
en estado libre en la naturaleza.
Si se sabe generar aprovechando su campo eléctrico,
podría ser una de las energías del futuro.
Domingo se apasiona con su trabajo
y es un claro ejemplo de liderazgo femenino.
Participa junto con sus compañeras de laboratorio
en el programa 100tíficas.
Cree que desde el punto de vista sociocultural
la ciencia se percibe como algo difícil
y esto hay que revertirlo."
El objetivo del programa 100tíficas
es llegar a las chicas en la entrada de la adolescencia,
esto es, a los 12 años,
que coincide un poco con la entrada en la ESO.
Acceder a ellas y ayudar a crear nuevos estereotipos
y a romper un poco la visión que hay de la ciencia
y la tecnología desde un punto de vista
de costo o de prejuicios psicológico y prejuicios también sociales.
"La brecha de género es histórica dentro de las carreras científicas,
las tecnológicas, las ingenierías
y en todas aquellas llamadas de CTIM.
La raíz del problema no empieza, sin embargo, en la universidad,
sino mucho antes.
Nos lo cuenta Blanca Amengual,
ponente del VIZ y profesora de ciencia de Secundaria.
Ha trabajado en el Instituto Pasteur de París
y combina la investigación con la docencia.
Sabe de primera mano
cuándo las chicas se descuelgan de la ciencia."
Se interesan por igual
a lo largo de la educación secundaria obligatoria.
Primero, Segundo y Tercero no hay optatividad.
En Cuarto empieza a haber optatividad,
entre las que tienen que escoger
o biología o química, o tecnología o informática,
mientras hay otras como latín, filosofía, plástica, idiomas.
Y sí es verdad que en este momento las chicas
tienden a dejar de interesarse por la tecnología y la informática.
Proporcionalmente, hay más chicos que chicas
en esas dos optativas y no sabemos por qué.
"Para evitarlo, reducen cuanto pueden
las horas de trabajo disciplinar
e incrementan la dedicación al trabajo por proyectos.
Responden a preguntas que se formulan los mismos alumnos
a partir de una noticia de prensa.
Este trimestre han elegido los exoplanetas.
Forman grupos mixtos
y aprenden a tener iniciativa y responsabilidad,
ya que al final del proyecto organizan un congreso científico
y deben mostrar los conocimientos adquiridos a sus familias.
De esta manera, trabajan en la raíz del problema."
Parece que uno de los factores determinantes
es la percepción que hay de estas áreas
desde un punto de vista cultural
y desde un punto de vista del entorno.
Esto hace que la ciencia sea percibida
como algo para mentes privilegiadas,
como un área que pretende descubrir verdades indiscutibles,
no como una aproximación que nos ayuda a crear modelos
del mundo que nos envuelve,
a construir modelos a partir de la experiencia
para ayudar a entenderlo y para ayudar
a solucionar problemas de este mundo donde vivimos.
"Si la transmisión de conocimientos en la escuela se da por igual
y se huye del sexismo que pueda haber entre el alumnado,
la otra razón del sesgo de género existente
en el mundo de las ciencias pudiera ser,
pues, la falta de ejemplos femeninos.
Por ello, es importante dar visibilidad
a la comunidad de mujeres científicas.
Es básico explicar que son personas que tienen una vida normal,
como la de la investigadora Silvia Pujals.
Se dedica a la nanomedicina
y también ha tratado con adolescentes en las aulas.
Trabaja con partículas nanosusceptibles
de contener fármacos para actuar sobre células cancerosas
y evitar los efectos secundarios de tratamientos invasivos
como la quimioterapia."
Siempre salen las mismas científicas.
Marie Curie, Rosalind Franklin.
Yo creo que tienen referentes,
necesitan referentes del día a día,
que vean que es una cosa normal aquí en Catalunya.
En Barcelona hay muchas mujeres trabajando.
"Pujals también forma parte del programa 100tíficas,
en el que, precisamente, se hace mucho hincapié
en la falta de referentes femeninos.
Aquí se enseña cómo romper los estereotipos sociales creados
que apartan a las chicas de los ámbitos científicos."
El hecho de crear nuevos referentes,
de acercar la actividad de personas
que no cumplimos los estereotipos clásicos,
de científicos locos a las aulas pueden ayudar a romper
esta barrera psicológica, este miedo.
Esta falta de sentirse identificada.
Muchas chicas nos deben permitir crear nuevas vocaciones
o simplemente ayudar a que las que ya existen
se puedan materializar y no desviarse pensando
que es una idea que no les es propia.
"Con un microscopio especial de superresolución,
Pujals puede ver hasta cinco nanómetros.
En su grupo de trabajo la mayoría son mujeres,
pero esto no es lo habitual,
como tampoco es habitual que una mujer
llegue a liderar grupos de investigación."
Llegamos a un estadio aún más competitivo.
El posdoctorado buscará una posición más estable,
que coincide con un momento
en que el reloj biológico marca
que las mujeres deberían tener los hijos.
Estos dos momentos coinciden
y es difícil compaginar las dos cosas
porque la carrera científica es muy exigente,
tienes que estar siempre al 100%,
lleva mucho trabajo y entonces compaginarlo
con el hecho de ser madre es complicado.
-La investigación es muy exigente,
no tiene horarios ni calendarios y más creo que en biología,
y más trabajando con fauna salvaje,
que te tienes que adaptar a los horarios de la fauna salvaje.
Y después el tema de los laboratorios, claro.
Crecimiento celular.
La infección vírica implica unos horarios
que no siempre son compatibles
con el resto de los miembros de la familia.
Entonces es verdad que es muy sacrificado.
También muy interesante, tiene las dos vertientes.
Es muy interesante.
Es un reto personal muy interesante,
pero hay mucha competencia y es muy riguroso.
"Si bien la voluntad de conciliar la vida familiar y la laboral
ralentiza la carrera
de muchas científicas con proyección,
el hecho es que se puede retomar el camino.
Eso sí, la posmaternidad o el posdoctorado
requieren de un esfuerzo extra."
Por ejemplo, en mi caso,
pasé unos años más yendo a otro ritmo,
porque tenía un niño pequeño
y, entonces, eso al final repercute en tu carrera.
No he sido tan competitiva como otras personas
que no han tenido hijos.
He conseguido reengancharme y volver a la ciencia
después de un parón por maternidad,
pero es complicado llegar a posiciones más elevadas
de jefe de grupo o profesor de universidad.
"La proporción de doctoras en ámbitos de CTIM
en la Unión Europea es del 37%.
Y si hablamos de posiciones de liderazgo
en el sistema de investigación español,
la proporción es de una mujer por cada tres hombres.
Una brecha de género que no distingue
entre la empresa pública y la privada.
Gemma Bolu Mar cuando era niña nunca soñó con ser científica
y mucho menos con ser una tecnóloga reconocida en el sistema privado.
Tampoco sintió ninguna llamada vocacional,
sino que eligió el Bachillerato Científico Tecnológico por descarte.
Hoy es ingeniera mecánica de I+D a la empresa HP.
Está especializada en termoenergía
y lleva cuatro años desarrollando
nuevos productos relacionados con las impresoras 3D."
Yo no me hubiera imaginado que mi día a día hubiera sido así.
Entonces, poco a poco, a medida que me fui haciendo mayor,
vi que la tecnología estaba en todas partes.
Entonces decidí que estudiar una ingeniería
me podía dar una visión muy concreta en estas áreas tan técnicas,
pero a la vez también desarrollar otro tipo de habilidades
que en el mundo profesional son muy valoradas,
como la comunicación o el trabajo en equipo.
"Aboga por la paridad en las empresas
para conseguir una sociedad más igualitaria
y cree que los estereotipos se pueden romper a temprana edad.
Será junto con Blanca Amengual,
Silvia Pujals y Neus Domingo,
una de las centenares de investigadoras
que darán charlas divulgativas a miles de alumnos
de sexto de Primaria y primero de la ESO.
Una iniciativa
de la Fundació Catalana per a la Recerca i la Innovació
y el Barcelona Institute of Science and Technology,
más conocido como BIST."
Es una gran oportunidad para dar visibilidad
a las mujeres que están en ciencia y que las niñas tengan referentes,
que sean mujeres que están luchando y trabajando en ciencia,
en posiciones de más responsabilidad.
-Igual que esto lo hemos normalizado,
que la mujer trabaje fuera de casa
o que la mujer estudia o mujer hace un doctorado
o es jefe de estudios o directora.
Podemos normalizar que esto ya no sea una rareza.
-Son roles que, a lo mejor, no les quedan muy cerca
y les cuesta mucho imaginar cómo son esas personas
que se dedican a eso y qué hacen en su día a día.
No es como un médico que lo pueden ver más cerca,
un profesor o un veterinario.
No, creen que somos personas muy inteligentes
o muy, muy buenas en todo lo que hacemos
y para nada es así.
"Cada 11 de febrero se celebra
el Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia.
En el universo hay talento femenino
y convertirse en científica requiere esfuerzo,
pero vale la pena.
(Música)
Un placer.
Uno de los objetivos principales es aumentar el impacto
que la mejoría en la investigación de Cataluña
ha tenido durante los últimos 15, 20 años.
Por necesidad,
los centros que llevan a la vanguardia
el tema de investigación, junto con las universidades,
son pequeños, excelentes, pero pequeños.
Uno de los propósitos es crear un poco de masa crítica
para darle visibilidad a esta excelencia.
Si lo miramos en grande, tenemos seis áreas,
dos de ciencia muy básica y cuatro de ciencia más aplicada.
Las áreas de ciencia básica son los principios de la vida
y los principios del universo.
Como te puedes dar cuenta, abarca muchísimo.
Las áreas aplicadas....
Tenemos salud y, en particular, la medicina de precisión,
o lo que nosotros llamamos la preparación
para la medicina personalizada.
Un área de materiales avanzados,
otra de energías y procesos sostenibles
y, finalmente, una de tecnologías de información y cuántica.
Tenemos mucha ilusión,
estar en este recinto con una historia,
con un recorrido tan amplio y largo.
La Diputación, que es la dueña de este espacio,
ha decidido acoger labores de investigación,
de cultura dentro de este recinto,
que está situado en una zona muy céntrica de Barcelona,
y muy cercano al Hospital Clínico,
un referente en materia de medicina
y encaja muy bien con nuestras áreas de enfoque
y el deseo de desarrollar,
desarrollar no solo el ámbito de la salud,
pero también todas las tecnologías y materiales
y otras labores que pueden avanzar en el tratamiento al paciente,
Una de las razones por las que son estos siete centros y no otros,
por una parte es masa crítica.
Por otra parte,
la posibilidad de gestionar competencias señaladas
es un conjunto bastante complejo de coordinar,
pero ya existían nexos,
ya existían colaboraciones dentro de estos centros.
Cada centro es muy multidisciplinar.
Hay gente de varios ámbitos de la ciencia:
físicos, químicos, biólogos
que ya colaboran en diversas perspectivas
y ya existían colaboraciones con otros de los centros
que pasaron a integrar el BIST.
Solo nos quedó alinearlo un poco,
añadir un poco de aceite, sal y pimienta
y facilitar espacios donde se pudiesen encontrar.
Fomentar colaboración
a través de nuevos proyectos de investigación
y, sencillamente,
premiar lo que es la excelencia en ciencia.
El programa BIST Ignite es, precisamente
para fomentar nuevas colaboraciones entre los centros,
motivar especialmente a los investigadores jóvenes
que abran un poco su horizonte,
que busquen problemas que son más difíciles
de lo que podrían hacer dentro de su propia disciplina,
trayendo una perspectiva de otro centro,
aunque sea de la misma disciplina.
Te permite imaginarte mejores soluciones
y atacar problemas más complejos.
Uno de los proyectos que se han desarrollado
bajo este programa es lo que mencionabas.
Es una prótesis retinal que permitiría recobrar la vista
a aquellos que la han perdido por algún tipo de enfermedad
que afecta la captación de la luz
y no la parte del nervio óptico,
y es un programa conjunto de tres de nuestros centros
que permite hacer un implante muy fino dentro del ojo.
En una resolución que hasta ahora no era posible
y pasar de unas prótesis que te permiten
ver un poco del contorno en blanco y negro
a un detalle y el color,
que permitiría recuperar un porcentaje muy alto de la visión.
Para desarrollar capacidad científica de excelencia
se necesita estabilidad,
se necesita un compromiso a lo largo de varios años
y la conciencia de que no basta invertir hoy,
es una inversión continua,
porque los equipamientos hoy en día van cambiando
y la forma de atraer al talento más alto del mundo
es darles las facilidades y mantenerlas
para que, una vez que estén aquí, no quieran marcharse.
Y es facilitar un entorno en que se reconoce el talento,
se aprecia el talento,
pero también se le ayuda a formarse para tener mayor impacto
dentro de varios sectores de la sociedad,
no solamente en la ciencia de excelencia.
Sí, dentro de este espacio
tenemos un programa que llamamos "To the Mothers of Science",
las madres de la ciencia,
en que reconocemos la dificultad
en cierta etapa de la carrera científica
para personas que están creando una familia, digamos.
Es un programa competitivo, no basta tener solo hijos,
sino que es para la gente,
para las mujeres que tienen el potencial
de avanzar en su carrera científica,
que es donde nos caemos un poco.
Si uno mira en la carrera científica,
cuando estás haciendo el grado, el balance no está mal.
Pero a medida que vas avanzando en la carrera
a nivel ya de postdoctor
o líder de grupo o de investigador principal,
es allí donde vemos más diferencias de género.
Y es esta transición, esta etapa
que lo hace un poco difícil y tratamos de mejorarla.
Sí, dentro de nuestros centros,
tenemos hoy en día 27 empresas pymes activas.
Crean sitios de trabajo de muy alta calidad
y agregando a eso, tenemos...
La mayoría son en el ámbito de la salud,
pero hay otras en el ámbito de la energía,
de procesos sostenibles
y también en la parte cuántica.
Curiosamente, es un ámbito que se ha hecho muy popular.
Es algo que tengo más familiaridad
porque vengo del ámbito de la informática
y que en los últimos 103 años ha acelerado muchísimo.
Si miramos lo que es hoy en día la comunidad BIST,
está constituida por unas 2.500 personas
entre los siete centros.
De ellas, 1.500 son investigadores,
pero las otras 1.000 son un andamiaje de soporte.
Una comunidad que incluye también científicos y científicas
que facilitan la operación de la investigación a un alto nivel.
Si no tuviésemos esa estructura de soporte,
sería muy difícil gestionar el día a día
y hasta las complejidades involucradas
en hacer investigación puntera.
Dentro de estos 1.500 investigadores,
1.300 son aproximadamente estudiantes de doctorado
o postdoctorados.
Y hoy en día el número de plazas
para investigación académica son muy acotados
y, por lo tanto, tenemos que facilitarles
la posibilidad de imaginarse otras salidas,
otras posibilidades
y, por lo tanto, les proveemos formaciones
e información sobre cómo aplicar el conocimiento
y la formación científica dentro de otros ámbitos
más allá de la investigación, como decías.
Educación de ciencia, políticas públicas,
comunicación de la ciencia,
como también participación en el sector empresarial
y dentro de empresas de emprendeduría.
Más allá de la ciencia de excelencia,
el foco estará en talento,
en la atracción de talento tanto nacional como internacional
y su formación,
con el objetivo de aumentar el impacto
de los individuos formados
en la ciencia en toda la sociedad,
ya sea en educación, ya sea en el ámbito productivo,
ya sea en el ámbito político.
Además, tenemos la voluntad
de abrirnos más hacia la comunidad.
Nos facilita mucho el hecho de que estamos acá
en forma tan central dentro de Barcelona,
poder atraer el interés de la juventud hacia la ciencia,
porque creemos que una juventud,
aunque no sigan carreras científicas
que tengan un conocimiento y la apreciación de la ciencia,
podrá tomar decisiones mejores durante toda su vida.
Gracias a ti.
(Música)
(Música)
Mujeres en el sector, en porcentajes
En primera instancia, el factor económico limita enormemente la participación en el ámbito científico. De lo general a lo concreto, dentro de estos países, el porcentaje de mujeres que están inmersas en el mundo de la ciencia es de apenas un 29%.
Para el Instituto de Estadísticas de la UNESCO (UIS), aunque este día sea de celebración, “debemos continuar enfocándonos en los avances hacia la igualdad de género en Ciencia y Tecnología mientras las mujeres sigan infrarrepresentadas en todas las áreas, desde la Investigación y la Ingeniería, pasando por las start-ups”.
Si bien había países del norte de Europa que destacaban por sus esfuerzos a la hora de conseguir la igualdad entre hombres y mujeres, lo cierto es que si se estudian detenidamente los datos no sobresalen especialmente en la materia educativa.
Proyectos que buscan marcar la diferencia
En días como estos es también importante informar de las reivindicaciones que se han conseguido a lo largo de este tiempo. Por ejemplo, la herramienta YouCheck pone en contacto a periodistas con distintas fuentes, con el objetivo de no recurrir siempre a los mismos expertos.
En el mismo sentido, la organización 500 Women Scientists está más enfocada a dar visibilidad a las mujeres y también a sus trabajos. "El propósito de la plataforma es aumentar la representación de las mujeres en los distintos campos científicos, así como servir como herramienta para que periodistas y organizadores de conferencias contacten con científicas”, señaló Elizabeth A. McCullagh, una de las impulsoras del proyecto, que en 2019 contaba con más de 8.500 interesadas.
En España, la Iniciativa 11 de Febrero nació en 2016 y, en su cuarta edición, tiene programadas más de 1.7000 actividades en todo el país desde el 1 al 15 de este mes. Desde 2019 se han planificado y decidido qué ideas, ponencias o charlas pondrán en marcha el grupo de personas del ámbito científico que, año tras año, busca promover "prácticas que favorezcan la igualdad de género en el ámbito científico-tecnológico".
También este martes el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) ha organizado cerca de 150 actividades en todo el país para "visibilizar el trabajo de las científicas y mostrar referentes femeninos en ciencia".