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Dilma Rousseff: "El encarcelamiento de Lula es el tercer acto del golpe de Estado que empezó conmigo"

  • Entrevistada en RTVE, la expresidenta brasileña defiende la inocencia de Lula
  • Asegura que Lula es el único candidato del partido a las elecciones de octubre
  • Advierte sobre un repunte de la violencia: "Brasil atraviesa una situación límite"

Entrevista íntegra este viernes en Conversatorios en el canal 24H

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Conversatorios en Casa de América - Dilma Rousseff

Dilma Rousseff (Belo Horizonte, 1947) confiesa que en los últimos días ha dormido muy poco. La expresidenta brasileña ha permanecido al lado de Lula da Silva hasta el final, hasta su ingreso en prisión este domingo tras 48 horas de resistencia en el sindicato metalúrgico de San Bernardo de Campo, donde el líder más popular de América Latina forjó su carisma. Con el rostro cansado, pero el ánimo enérgico, Rousseff ha defendido la “inocencia” de su mentor y padre político en una entrevista en RTVE en la que ha denunciado “un nuevo golpe de Estado” para apartar del poder al Partido de los Trabajadores.

“Brasil está atravesando una situación límite. Los golpes de Estado ya no son militares, han cambiado sus características, ahora son golpes parlamentarios o jurídicos con un gran componente mediático”, asegura Rousseff. “Actualmente estamos en la tercera etapa del golpe: la primera fue mi impeachment (juicio político); la segunda fue el intento de adoptar medidas económicas y sociales que nosotros derrotamos cuando ganamos en las urnas; y la tercera etapa del golpe es precisamente el encarcelamiento del presidente Lula da Silva para impedir que se presente como candidato en las próximas elecciones de 2018".

Dilma Rousseff, en TVE: "Lo de Lula es el tercer acto del golpe que empezó conmigo"

Escudera de Lula hasta el final

Lula da Silva fue condenado en enero a 12 años de prisión por un delito de corrupción y lavado de dinero en una causa relacionada con la trama destapada en la petrolera estatal brasileña Petrobras. El juez Sergio Moro consideró probado que el exmandatario recibió un apartamento de lujo en la localidad de Guarujá, en el litoral de Sao Paulo, a cambio de beneficiar a la constructora OAS en la adjudicación de obras públicas ligadas a Petrobras, y ha impedido en su auto que Lula espere en libertad a agotar todos los recursos posibles en el tribunal de segunda instancia, una decisión que ha llevado a sus abogados a recurrir la sentencia no solo ante la jusiticia brasileña, si no también ante la ONU.

“El apartamento ni está a su nombre, ni es de su propiedad, pertenece a un banco porque la empresa se lo dio como garantía. Una jueza incluso ha colocado este apartamento en subasta pública porque la empresa está teniendo problemas. No hay pruebas de en qué se ha beneficiado Lula de ese apartamento”, asegura la primera mujer presidenta de Brasil de visita en Madrid, donde ha participado en un foro en la Casa de América, en una gira que la llevará a Barcelona y después a EE.UU.

Lula ingresa en la prisión de Curitiba

"El partido jamás va a retirar su apoyo a Lula"

Incluso preso, Lula podría registrar su candidatura a las elecciones del próximo octubre. El plazo final es el 15 de agosto. La candidatura tendría que ser analizada hasta el 16 de septiembre, aunque existe la posibilidad de que sea anulada por la Justicia antes o después de las elecciones. Además, según la Ley Ficha Limpia, que el propio Lula aprobó en 2010 para combatir la corrupción, un condenado en dos instancias no puede postularse a unas elecciones, aunque la Justicia Electoral será quién tenga la última palabra. Desde el Partido de los Trabajadores insisten en que él es el único candidato.

Creo que Lula va a salir libre

“Yo creo que Lula va a salir libre. El partido jamás va a retirar su apoyo a Lula. Él es el candidato. Si lo retiran de la carrera ya veremos lo que hacemos. Los golpistas saben que Lula está en cabeza en intención de voto, pero las encuestas muestran también que quién él indique seguirá líder”, afirma la expresidenta brasileña sin anticipar nombres de posibles sustitutos. Sin embargo, algunos apuntan al exalcalde de Sao Paulo, Fernando Haddad, o al exgobernador Jaques Wagner, como plan B.

Según todas las encuestas, Lula es el líder indiscutible con una intención de voto superior al 30%, un crédito político que no ha agotado en los últimos meses pese a las condenas por corrupción, pero difícil de trasladar a otro candidato designado por él: alguien sin manchas en su expediente.

La corrupción sistémica en Brasil y América Latina

La Operación Lava Jato, la mayor investigación contra la corrupción en la historia de Brasil ha destapado un gigantesco escándalo de desvíos en la petrolera Petrobras que afecta a todos los partidos. En los últimos cuatro años 123 políticos y empresarios han sido condenados. La constructora Odebrecht, la más grande de América Latina, es una de las principales empresas implicadas en esta trama con ramificaciones en una docena de países latinoamericanos y que ya se ha cobrado su primera víctima política: el presidente peruano Pedro Pablo Kuczynski.

Tres de cada cuatro ciudadanos de Latinoamérica no confían en su gobierno y cerca del 80 % asegura que la corrupción en el continente es generalizada, según un estudio que acaban de publicar la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) y el Banco de Desarrollo de América Latina (CAF).

“Nosotros creamos las condiciones para reprimir la corrupción pero lo que se necesita para luchar contra ella son instituciones virtuosas. No se destruye una empresa como Petrobras por tener que pagar 10.000 millones dólares. La forma de destruirlo es condenar a los ejecutivos, a los criminales, sin comprometer a la empresa. Yo creo que lo que se está intentando es privatizar Petrobras”, explica Rousseff, reticente a hacer autocrítica sobre su gestión en el gobierno.

"La extrema derecha ha salido del armario"

Aupado por esa desconfianza de la sociedad hacia sus instituciones, el segundo candidato en las encuestas es el ultraderechista Jair Bolsonaro, un ex policía militar defensor de la última dictadura, homófobo y machista, que busca sacar partido de la rabia contra la corrupción, la violencia y la crisis económica prometiendo mano dura. Un discurso de ruptura que, ante la crisis de credibilidad de los partidos tradicionales, ya hemos visto triunfar en Europa y en Estados Unidos.

“Bolsonaro es un candidato que defiende la prisión, la tortura, la pena de muerte, una persona que es antidemocrática”, lamenta la expresidenta. “La extrema derecha estaba escondida y ha salido del armario porque existe un clima para la radicalización. La política en Brasil ya no es de debate, ya no se discute, lo que se hace es reprimir, pegar tiros y poner bombas. La política es esa violencia por la que se asesinó a Marielle Franco. Se ha matado a una concejala durante el ejercicio de su mandato”, señala, en alusión a la política y activista de derechos humanos asesinada a balazos el pasado 15 de marzo en Río de Janeiro.

Fotografía de archivo realizada durante el pasado mes de noviembre de 2017 de Marielle Franco

Fotografía de archivo realizada durante el pasado mes de noviembre de 2017 de Marielle Franco EFE/Mário Vasconcellos

La ola de violencia que desangra el estado carioca llevó en febrero al presidente de Brasil, Michel Temer, a firmar un decreto de intervención federal que pone la seguridad en manos de las Fuerzas Armadas, una medida inédita en el país desde el regreso de la democracia hace tres décadas. La población de Río de Janeiro es víctima desde hace más de un año de una creciente e indiscriminada violencia urbana que el año pasado causó 6.731 muertes, entre las que se cuentan las de más de cien policías y diez niños, muchos alcanzados por las llamadas "balas perdidas". El año pasado, las muertes violentas aumentaron un 8 % respecto a 2016 y un 26 % respecto a 2015, según las estadísticas oficiales. Cada año en todo el país se registran 60.000 muertes violentas.

Escalada de violencia en plena campaña

Sacar el Ejército a las calles es una equivocación, eso no va a resolver el problema. La violencia va a aumentar cada vez más porque las personas son cada vez más pobres en Brasil”, afirma la exmandataria”. “No es posible pensar que la venta de droga y su distribución se hace en pocas cantidades y en las favelas. Este menudeo no se hace así como así, está basado en un gran tráfico de drogas relacionado con las redes de producción y distribución internacionales de cocaína o con grandes redes de distribución de otro tipo de drogas y armas. En todo esto se basa la violencia en Brasil y en América Latina. Creo que siempre se ha luchado contra esta violencia de forma distorsionada porque la clave es quién lava el dinero de la droga en Brasil: el sistema bancario”.

La violencia va a aumentar cada vez más porque las personas son cada vez más pobres en Brasil

Rousseff, apartada del poder (pero no inhabilitada) en agosto de 2016 en un controvertido juicio político por maquillar las cuentas públicas asegura que “nunca ha abandonado la política” y previsiblemente se presentará como candidata al Senado por el estado de Minas Gerais.

Sobre Michel Temer, quien fuera su vicepresidente y conspirador para arrebatarle el mando de la República asegura que seguirá en el poder pese a haberse visto implicado en varios casos de corrupción. “Mientras continúe la compra de votos en el Congreso, él seguirá en su puesto. Pero es un personaje incómodo para sus aliados, y con un bajísimo nivel de aceptación. No puede participar en las próximas elecciones”, asegura la exmandataria. “Con toda esta contaminación en las instituciones judiciales, sólo un proceso electoral limpio puede ayudar a reestablecer la situación”.

Por delante quedan seis meses de campaña imprevisibles en los que Rousseff seguirá siendo la voz de Lula dentro y fuera de Brasil.