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Abaten en Bruselas a un hombre que ha atacado a dos soldados con un cuchillo

  • Es un somalí de 30 años que gritó "Alá es grande"
  • El grupo terrorista Estado Islámico se atribuye la autoría del ataque
  • El país mantiene el nivel de alerta terrorista en cuatro

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La Policía belga abate a un hombre que atacó a dos militares

Las fuerzas de seguridad belgas han abatido este viernes a un hombre que ha atacado a una patrulla de soldados armado con un cuchillo.

"Ha habido un ataque contra una patrulla militar en Bruselas", ha informado la Policía federal, precisando que "los militares presentes en el lugar han respondido" y que el individuo ha sido "neutralizado". Dos soldados han resultado heridos leves en el suceso, uno en la cara y otro en el rostro.

El ataque ha ocurrido en el bulevar Emile-Jacqmain, en el centro de la capital de Bélgica, alrededor de las 21:00 horas.

Según fuentes de la Fiscalía, el atacante ha gritado "Alá es grande" y están investigando el incidente como una "tentativa de asesinato terrorista". El autor es un somalí de 30 años sin antecedentes por terrorismo aunque, según la televisión pública RTBF, sí que tenía antecedentes por delitos comunes.

No ha sido hasta este sábado cuando el Estado Islámico se ha atribuido la autoría del ataque, tal como ha anunciado el órgano de propaganda del grupo terrorista.

El atacante portaba un arma falsa

La Fiscalía belga ha informado a través de un comunicado este sábado de que el atacante portaba un arma de fuego falsa y dos ejemplares del Corán.

La Policía ha registrado durante la madrugada la casa del hombre y ha desplegado un amplio perímetro de seguridad en torno al lugar de los hechos y ha informado de que la situación está "bajo control".

"Todo nuestro apoyo a los militares", ha tuiteado el primer ministro belga, Charles Michel, que ha señalado que el dispositivo se mantiene: "Nuestros servicios de seguridad permanecen atentos, Seguimos la situación de cerca", ha recalcado.

El país ha decidido mantener el nivel de alerta terrorista en tres, que se traduce en "amenaza seria" después del incidente.

Desde los atentados del 22 de marzo de 2016 en Bruselas, parejas y grupos de militares armados pasean por toda la ciudad para repeler ataques, con especial atención a los puntos de interés turístico y las instituciones comunitarias con sede en la capital belga.