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Francia

Marine Le Pen anuncia que no acudirá a ninguna citación policial hasta que terminen las elecciones

  • La líder del Frente Nacional es investigada por presuntos contratos fraudulentos
  • El miércoles no acudió a declarar ante la Policía
  • "Este periodo no permite ni la neutralidad ni la serenidad necesarias", asegura

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Marine Le Pen, líder y candidata del FN, en una conferencia en París
Marine Le Pen, líder y candidata del FN, en una conferencia en París

Marine Le Pen, líder del Frente Nacional francés y candidata a la presidencia, ha anunciado que no acudirá a ninguna citación policial para declarar mientras dure la campaña electoral de las presidenciales y legislativas.

"Este periodo no permite ni la neutralidad ni la serenidad necesarias para el funcionamiento correcto de la Justicia", ha explicado Le Pen a la agencia AFP.

Este periodo no permite ni la neutralidad ni la serenidad necesarias para el funcionamiento correcto de la Justicia

Le Pen debe prestar declaración por los contratos a colaboradores del Frente Nacional pagados con fondos del Europarlamento.

El pasado miércoles, la Policía convocó a la líder ultraderechista a las 14:00 en los locales de la oficina anti-corrupción de Nanterre, localidad cercana a París. Pero Le Pen no acudió, según han revelado este viernes medios franceses.

Las elecciones presidenciales se celebrarán el 23 de abril, dos semanas antes de la segunda y definitiva vuelta del 7 de mayo. Las legislativas se celebrarán en junio.

Aunque negarse a una comparecencia policial o judicial puede suponer un delito, Le Pen está blindada por la inmunidad parlamentaria de la que goza como eurodiputada.

Empleos ficticios pagados por la Eurocámara

La Justicia francesa investiga desde hace dos años si la secretaria personal de Le Pen, Catherine Griset, y el guardaespaldas Thierry Légier, contratados ambos como asistentes parlamentarios en la Eurocámara, efectuaron realmente las funciones para las que fueron remunerados con dinero público.

Griset fue imputada esta semana, tras ser interrogada, por supuesta ocultación de abuso de confianza, mientras que a Légier no se le acusó de ningún cargo después de su declaración.

El Parlamento Europeo pide a Le Pen que devuelva la totalidad de las retribuciones recibidas por sus asistentes parlamentarios, casi 330.000 euros, y le ha retenido parte de su asignación como eurodiputada.

El partido ultraderechista, por su parte, niega las acusaciones y asegura que se trata de una operación política contra Le Pen, que como candidata a las presidenciales francesas encabeza las intenciones de voto en las encuestas para la primera vuelta que tendrá lugar el próximo 23 de abril.