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Forcadell alega ante el TSJC que "no puede existir un debate de ideas ilegal"

  • Recurre la decisión del TSJC de investigarla por desobediencia
  • "No existe ni puede existir un debate de ideas ilegal", señala

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La presidenta del Parlamento catalán, Carmen Forcadell, en una imagen de archivo
La presidenta del Parlamento catalán, Carmen Forcadell, en una imagen de archivo.

La presidenta del Parlament, Carme Forcadell, ha recurrido la decisión del TSJC de investigarla por desobediencia al permitir votar la hoja de ruta soberanista, alegando que no se puede prohibir el debate parlamentario porque "ni existe ni puede existir un debate de ideas ilegal".

En su escrito, Forcadell rechaza la decisión del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña de investigarla, a instancias de la Fiscalía, por los delitos de prevaricación y desobediencia al Tribunal Constitucional, al remarcar que éste "no puede obligar a nadie a controlar las opiniones y la actividad política".

En su querella, admitida a trámite por el alto tribunal catalán, la Fiscalía acusa a Forcadell de los delitos de desobediencia al TC y prevaricación, al permitir que el Parlament votara el pasado 27 de julio la hoja de ruta independentista, que "dinamita" el modelo de Estado, para impulsar por la vía de los "hechos consumados" su proyecto político "con total desprecio" a la Constitución.

Según sostiene Forcadell en su recurso, la decisión del TSJC de admitir a trámite la querella de la Fiscalía es de una "inusitada trascendencia", ya que supone "un punto de inflexión en la voluntad de control de un poder del Estado".

Forcadell apunta a que ha habido "mandatos de interpretación incierta"

La investigación por este caso, según Forcadell, es el "primer ejercicio conocido en la trayectoria del sistema penal español de someter a análisis en la jurisdicción penal la prohibición (y sanción) del debate de ideas".

El escrito apunta que el Tribunal Constitucional "no puede obligar a nadie (en el sentido de obligarlo con consecuencias jurídico-penales por desobediencia) a controlar las opiniones y la actividad política con un filtro tal como el Ministerio Fiscal aplica".

"No puede existir ninguna resolución judicial que genere un espacio de prohibición del debate parlamentario, ni ninguna fuerza anulatoria genérica que restrinja el derecho de representación política y de libre expresión de las ideas", expone el recurso, en el que se advierte de que en este caso ha habido "mandatos de interpretación incierta".

Lamenta que la Fiscalía "ha tergiversado parte de los hechos"

La presidenta del Parlament también apela al Tribunal Europeo de Derechos Humanos, que ha remarcado que la libertad de expresión es un "derecho fundamental en la elaboración de políticas y estrategias gubernamentales nacionales y constituye uno de los pilares básicos de una sociedad democrática y de su progreso y desarrollo".

Forcadell también lamenta en su recurso que la Fiscalía o bien ha tergiversado "parte de los hechos" o bien admite algunos que "no están contrastados", con la voluntad de "generar una realidad que permita articular una querella que no tendría futuro si se respetara lo que realmente ocurrió".

La Fiscalía acusa en su querella de Forcadell de haber utilizado "torticeramente" el reglamento del Parlament para poner en marcha por la "vía de hecho" su "designio soberanista", pese a las "claras advertencias" del TC, que la había instado a impedir o paralizar cualquier iniciativa que ignorase la suspensión de las resoluciones soberanistas que habían dado pie a la comisión de estudio del proceso constituyente.