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Sánchez insiste en que tratará de formar un gobierno con Podemos y Ciudadanos tras las elecciones

  • Reitera que no investirá presidente ni a Rajoy ni a Iglesias
  • No se fia de Iglesias y dice que nadie apoyará a Rajoy
  • Critica que se hable tanto de encuestas electorales

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Pedro Sánchez, en un mitin de campaña.
Pedro Sánchez, en un mitin de campaña.

El secretario general y candidato del PSOE a las elecciones generales, Pedro Sánchez, ha vuelto a insistir en la misma fórmula de gobierno que trató de alcanzar tras los comicios del 20D y que resultó fallida en su sesión de investidura y ha señalado que, tras el 26J, va a tratar de pactar con Podemos y Ciudadanos porque junto con el PSOE son "las fuerzas del cambio".

Ha reiterado en que no apoyará como presidente de gobierno ni al candidato del PP, Mariano Rajoy, ni al de Podemos, Pablo Iglesias, en una entrevista en Antena 3.

"No voy a apoyar a Mariano Rajoy y no voy a apoyar a ningún candidato que apoye la fragmentación de la soberanía nacional con la celebración de un referéndum en España", ha aseverado, para decir después que está convencido de no habrá terceras elecciones en España.

Ante la tesitura de tener que optar por un gobierno del PP y uno de Podemos se ha negado a elegir, tal y como viene haciendo en toda la campaña electoral.

"La alternativa es el PSOE", ha remarcado Sánchez, que ha incidido en que "España no es Grecia y no hay que pasar de lo malo a lo peor".

No se fía de Pablo Iglesias y dice que nadie quiere a Rajoy

"Good bye señor Rajoy, nadie va a pactar con él", ha afirmado Sánchez, que ante la pregunta de si aceptaría una vicepresidencia con el PP ha dicho: "Eso ya lo rechacé".

"¿Te fías de Pablo Iglesias?", le han preguntado, a lo que él ha afirmado: "Uno no se puede fiar de aquel que reniega de sus raíces y de una persona que cambia tanto de opinión y de chaqueta".

Ha afeado al líder de Podemos que "cuando va con Garzón, es comunista; cuando va con Errejón, peronista; y cuando habla con el PSOE, socialista de toda la vida". Posteriormente y con un tono de humor, ha elegido a Iglesias como el líder político al que no le dejaría las llaves de su casa.

Se ha quejado de lo mucho que se habla de las encuestas y del posible 'sorpasso' de Podemos al PSOE y ha asegurado que los sondeos internos del PSOE les dan "mucho mejor resultado en las elecciones".

Ha revelado que solo el candidato de Ciudadanos, Albert Rivera, le ha llamado para solidarizarse con él después de que dirigentes del PP como Cristina Cifuentes o Xavier García Albiol hayan insinuado que es racista por un vídeo en el que se puede ver a Sánchez sacudirse la mano tras saludar a un niño negro.

Ha abogado por jugar limpio en campaña y "no meterse en estos rollos" y también ha culpado al entorno de Podemos a fomentar esas críticas en las redes sociales.

El candidato del PSOE a La Moncloa ha entrado además en temas de contenido social como la legalización de la marihuana o el tema de la prostitución y, aunque ha declinado pronunciarse en profundidad sobre los mismos, sí ha abogado por abrir el debate.

"Son debates que hay que poner encima de la mesa, aunque es mucho mejor no hacerlo en campaña", ha admitido.