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Jameneí pide el voto masivo en Irán, donde los reformistas parten como favoritos

  • El líder supremo iraní llama a la participación para "decepcionar al enemigo"
  • Casi 55 millones de iraníes eligen su Parlamento y la Asamblea de Expertos
  • Los colegios han cerrado tras cinco ampliaciones del horario para votar

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Irán vota en unas elecciones clave que dirimen la disputa entre reformistas y conservadores

Irán vota este viernes en unas elecciones parlamentarias y para la Asamblea de Expertos claves para el futuro del país, tras la firma del acuerdo nuclear con las potencias occidentales, que van a dirimir la disputa entre conservadores y reformistas. Así, el líder supremo iraní, Alí Jameneí, ha pedido a los ciudadanos que acudan a votar de forma masiva en las elecciones parlamentarias y para la Asamblea de Expertos para "decepcionar al enemigo" y defender "la dignidad y la independencia nacional".

El líder se ha expresado así al emitir su propio voto a primera hora de este viernes, en un encuentro con la prensa en el que ha insistido en la importancia de la participación ciudadana en los comicios y que los electores "voten con los ojos abiertos y con perspicacia".

"Las elecciones tienen que ser de tal modo que decepcionen y desilusionen al enemigo. El resultado de la participación ciudadana es dignidad e independencia nacional. Tenemos enemigos que miran esta votación con ojos codiciosos", añadió Jameneí, la máxima figura política y religiosa del país.

Así, la recomendación de Jameneí a su "querido pueblo" fue que "en primer lugar todos participen en las elecciones, todos los que quieren a Irán, a la República Islámica, y la gloria, el honor y la grandeza nacional".

El líder supremo iraní, Alí Jameneí, deposita su voto en Teherán

El líder supremo iraní, Alí Jameneí, deposita su voto en Teherán AFP

Los reformistas, favoritos

Las elecciones al Parlamento y a la Asamblea de Expertos de Irán han arrancado este viernes a primera hora de la mañana y el plazo para depositar el voto se ha ampliado hasta en cinco ocasiones por la alfuencia de electores, en unos comicios marcados por la previsible victoria de los grupos moderados y reformistas en detrimento de los conservadores.

Casi 55 millones de iraníes (54.915.024) están convocados a renovar los 290 escaños de la Asamblea Consultiva Islámica, el Poder Legislativo del país, y los 88 de la Asamblea de Expertos, el cuerpo formado por clérigos chiíes cuya misión principal es la de elegir a un nuevo líder supremo en caso de vacante y controlar su gestión.

Según informó anoche el ministro del Interior, Abdolreza Rahmaní Fazlí, en total hay 4.979 candidatos para diputados y 159 para la Asamblea de Expertos, después de que en las últimas horas renunciaran a participar unas 1.400 personas que también habían sido autorizadas a concurrir por el Consejo de Guardianes, el organismo encargado de permitir o vetar a cualquiera que desee ocupar un cargo público en el país.

La campaña electoral, de tan solo una semana, se centró en temas económicos, en los llamamientos al voto útil y en los intentos conservadores de desprestigiar a los aliados del presidente Hasán Rohaní, favoritos para reafirmar en el Parlamento la progresiva apertura del país.