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Kerry espera que Rusia e Irán atraigan a Al Asad hacia un proceso de transición en Siria

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El secretario de Estado de EE.UU., John Kerry, llega a Londres para hablar de la guerra en Siria
El secretario de Estado de EE.UU., John Kerry, llega a Londres para hablar de la guerra en Siria REUTERS/Evan Vucci/Pool

El secretario de Estado de Estados Unidos (EE.UU.), John Kerry, ha asegurado que Rusia e Irán pueden ayudar a que el presidente sirio, Bachar al Asad, se siente a una mesa para negociar el fin de la guerra civil.

"Necesitamos llegar a la negociación. Eso es lo que buscamos y esperamos que Rusia e Irán, y cualquier otro país con influencia, ayudará a hacerlo posible, porque eso es lo que impide que la crisis termine", ha declarado Kerry.

Kerry, de visita en Londres para discutir sobre el conflicto sirio, ha reiteado que Asad tiene que irse, pero ha matizado que no tiene por qué ser "en el primer día".

"Estamos preparados para negociar. ¿Está preparado Asad para negociar de verdad? ¿Está Rusia preparada para traerle a la mesa?", ha insistido.

Las declaraciones del secretario de Estado se producen un día después de iniciarse conversaciones tácticas entre Washington y Moscú.

Tanto estas palabras como el diálogo militar suponen un cambio en el discurso de EE.UU. sobre Siria. Hasta ahora, la administración Obama se había negado a colaborar con Rusia y exigía la salida inmediata del presidente sirio. En esta nueva posición influyen varios factores: el alargamiento del conflicto (dura ya cuatro años) y la consecuente oleada de refugiados que llegan a Europa; la creciente implicación de Rusia para apoyar a su aliado en Oriente Medio; y el acuerdo nuclear con Irán.

"Buscamos la manera de encontrar un terreno común", ha dicho Kerry sobre Rusia. "Todos hemos llegado a la conclusión de que esto ha durado demasiado. Por lo tanto, necesitamos recalibrar y es exactamente lo que vamos a hacer. Es una de las razones por las que estoy en Europa", ha añadido.

Conversaciones entre Rusia y EE.UU.

El viernes, el secretario de Defensa, Ash Carter, llamó a su homólogo ruso, Sergei Shoigu, en unas conversaciones calificadas como "tácticas".

Ambos responsables exploraron mecanismos para evitar que los aviones rusos y los estadounidenses tengan un encuentro accidental en el espacio aéreo sirio.

Shoigu describió las actividades de Rusia en Siria, donde ha enviado asesores y armas, como meramente defensivas y destinadas a "cumplir los compromisos con el Gobierno sirio", según ha relatado a Reuters un alto funcionario del Pentágono.

Se trata del primer diálogo militar entre los antiguos rivales de la Guerra Fría desde agosto de 2014, cuando los contactos se interrumpieron por la intervención rusa en Ucrania.

La aviación siria bombardea al EI en Palmira mientras Rusia y EE.UU. inician conversaciones

Bombardeos intensos en Palmira

Mientras las potencias discuten sobre qué hacer en Siria, la guerra continúa. La aviación siria bombardeó este viernes posiciones del Estado Islámico (EI) en la ciudad de Palmira, matando a 26 personas, según el Observatorio Sirio de los Derechos Humanos (OSDH, con sede en Londres).

En un comunicado, esta ONG ha asegurado que entre las víctimas hay 14 civiles, además de decenas de heridos.

Se trata de la segunda jornada de intensos ataques aéreos sobre el EI. El jueves, los aviones sirios bombardearon Raqqa, que los yihadistas usan como su capital.

Según la agencia Reuters, que cita una fuente anónima, las fuerzas armadas sirias están usando ya nuevo armamento, más preciso, facilitado por Rusia.

El OSDH ha informado también de que los yihadistas del Frente al Nusra (filial de Al Qaeda en Siria) y del Partido Islámico de Turkmenistán han matado a al menos 56 soldados capturados el pasado 9 de septiembre en Idleb, en la batalla por el control de la base militar de Abu al Duhur.

Con estas muertes se eleva a 71 el número de uniformados leales al régimen del presidente sirio Bashar al Asad, que han sido asesinados por los yihadistas.