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Femen, el activismo feminista que da la vuelta al mundo se hace visible en España

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Femen, el activismo feminista que da la vuelta al mundo se hace visible en España

Protestan con el torso desnudo y pintado con lemas reivindicativos contra el machismo y la discriminación de las mujeres.

Algunas de las señas de identidad del grupo feminista internacional Femen, que concibe el desnudo como un arma para crear debate, son claramente reconocibles y sus "vistosas" manifestaciones han dado la vuelta al mundo captando la atención de los medios de comunicación.

Este miércoles en el Parlamento español lo han vuelto a hacer. Tres mujeres han clamado a pecho descubierto al grito de "aborto es sagrado" contra la reforma de la ley del aborto del ministro Gallardón, ante unos atónitos diputados.

Esta protesta se ha convertido hasta el momento en la acción más visible de las activistas en nuestro país donde actúan desde mayo de este año, pero su modus operandi se expande de forma imparable. 

La universitaria ucraniana Anna Hutsol fundó la organización en Kiev en 2008 bajo la premisa de combatir contra "tres enemigos mayores": la  explotación sexual, las instituciones religiosas y las  dictaduras,  según detallan en su página de Facebook.

Dos de sus marcas de imagen son realizar sus protestas con el pecho desnudo y llevar  en la cabeza una corona de flores y entre las metas que persigue el grupo, hacen alusión a denunciar y  protestar frente a "todo tipo de violencia" contra la mujer;  informar  a la opinión publica sobre las prácticas y situaciones que  amenazan  al futuro, la prosperidad y los derechos de la mujer; o  demandar "una  verdadera igualdad de género" en todos los ámbitos de la  sociedad.

También promueven "el mutuo respeto" entre hombres y mujeres  como  medio por el cual se puede "optar a un mundo más prospero y   equitativo".

El caso de Amina Tyler

La forma de reivindicar de las Femen, calificada de "radical", "fanática" o "vacía de contenido" por sus detractores, es habitual en Europa, sobre todo en Ucrania, pero ha provocado fuertes encontronazos con la Justicia en su desembarco en los países árabes.

Uno de los casos más graves fue el caso de la bloguera tunecina Amina Tyler, también conocida como Amina Esbui,  encarcelada en mayo de 2013 acusada de "profanar" un espacio sagrado por haber pintado en un muro exterior de un cementerio de Túnez la palabra "Femen".

La joven activista saltó a la fama a principios de año tras mostrar sus pechos  desnudos en internet para denunciar la moral conservadora de su país, lo  que desató una gran polémica entre asociaciones civiles que la  defendieron y grupos radicales islámicos que mostraron su firme condena  por ese comportamiento e incluso pidieron su lapidación.

La polémica se intensificó aún más cuando tres activistas europeas   protestaron semidesnudas el 29 de mayo frente al Palacio de Justicia de   la capital tunecina para denunciar el proceso abierto contra Tyler.

Las   tres feministas fueron condenadas a dos meses de prisión aunque sin   cumplimiento de condena, por lo que fueron puestas en libertad el 26 de   junio.

Finalmente, Amina Tyler fue puesta en libertad con cargos el pasado mes de agosto aunque poco después anunció que abandonaba Femen acusando a la organización de "islamofobia" y financiación opaca.

Femen llega a España

En 2011, Femen se expandió y creó delegaciones en  Varsovia  (Polonia), Zurich (Suiza), Roma (Italia), Tel Aviv (Israel)  y Río de  Janeiro (Brasil) aunque también cuentan con sedes en Francia, Alemania  y México.

Los miembros de esta organización no gubernamental habitualmente se comunican y difunden su activismo a través de las redes sociales y entre los requisitos para pertenecer al grupo se encuentran ser fuerte y estar bien entrenada para aguantar "el frío, el calor y las detenciones". 

Una de las últimas ocasiones en las que pudo verse a las feministas en acción fue durante la  visita del primer ministro ruso, Vladimir Putin, a Alemania, donde protestaron semidesnudas al grito de "fuck dictator" (jodeté, dictador) y también  se las pudo ver en Roma durante la elección del nuevo papa.

La protesta que las Femen han llevado a cabo este  miércoles en el Congreso de los Diputados reivindicando el aborto es  una de las más visibles realizadas en España, desde que en mayo de  2013 este grupo iniciara sus actividades, después de cinco  años de protesta por todo el mundo.

En nuestro país, el grupo está encabezado por la estudiante Lara Alcázar, que ha sido detenida por las protestas en el Congreso. La marca de Femen en España cuenta con web en  Facebook y en Twitter, con el objetivo de "seguir y ser la voz en la  red y en España" de Femen Internacional.

En el caso de Facebook,  Femen España añade que sus actuaciones también giran en torno a temas  actuales en el país como el acoso (sexual, psicológico o de cualquier  otra índole) que miles de españolas sufren a manos de sus parejas o  de miembros del sexo opuesto; o el maltrato, la violencia machista y  las decenas de victimas mortales que cada año dejan en España.

También piden igualdad de oportunidades y de educación, al tiempo  que cuestionan "la parafernalia de la paridad empresarial y  política", y el veto de la Iglesia y otras religiones emergentes en  la comunidad.

Por todo ello, abogan por intentar "despertar la conciencia de un  alto porcentaje de españolas" para sentirse identificadas con la  causa y hacen una defensa de la autodeterminación de la mujer "para  hacer con su cuerpo lo que desee", lo que, según puntualizan,  defiende el derecho al aborto. En cualquier caso, muestran su "más  firme apoyo y admiración del laborioso esmero de las madres  solteras".

Precisamente, en esta red social Femen ha colgado un mensaje  en el que "llama al Parlamento español a desechar inmediatamente este  proyecto de ley aterrador -en alusión a la Ley del Aborto-, y a  pronunciarse en las cuestiones políticas y sociales que están  haciendo que España vuelva a épocas pasadas dignas de una  dictadura".