Enlaces accesibilidad

La Cámara baja de Uruguay da luz verde a la Ley de Matrimonio Homosexual

  • El gobernante Frente Amplio suma votos de los partidos de la oposición
  • La norma pasa al Senado y deberá ser promulgada por el Ejecutivo
  • Los oficialistas enfatizan que ahora se logra "una verdadera igualdad"

Por
La Cámara de Diputados uruguaya aprueba la Ley de Matrimonio Homosexual
Un activista gay juega con una bandera arcoíris delante de la Cámara baja de Uruguay antes del debate parlamentario en el que se ha aprobado la Ley de Matrimonio Igualitario.

Uruguay está cada vez más cerca de equiparar en nombre, derechos y obligaciones los enlaces de parejas homosexuales con los celebrados entre heterosexuales después de que la Cámara de Diputados –la Cámara baja– aprobara este miércoles la Ley del Matrimonio Igualitario.

Tras un intenso debate de siete horas que comenzó el martes por la tarde y terminó después de la medianoche, 81 de los 87 diputados presentes en el Legislativo apoyaron el proyecto del oficialista Frente Amplio, respaldado además por varios legisladores de los opositores Partido Nacional y Partido Colorado. La iniciativa será enviada ahora al Senado y, de progresar también allí, donde el FA tiene mayoría al igual que en la Cámara baja, deberá ser promulgada por el presidente José Mujica para convertirse en ley, algo que podría suceder a principios del próximo año. Durante la gestión de Mujica (2010-2015), que lidera el segundo gobierno del FA de la historia del país, tras el de Tabaré Vázquez (2005-2010), se ha despenalizado el aborto y se debate otra propuesta para legalizar la marihuana.

La Ley de Matrimonio Igualitario consta de 29 artículos y señala expresamente que el Código Civil considerará como matrimonio "la unión permanente entre dos personas de igual o distinto sexo".

El diputado del Frente Amplio Julio Bango fue el encargado de presentarla y justificó la propuesta porque la Constitución uruguaya "no admite ninguna discriminación entre personas". "Esta ley logra una verdadera igualdad de todos los ciudadanos ante la ley. Y afirma esa igualdad, ya que todos somos diversos y todos somos iguales ante ella", indicó el legislador. Además, apuntó que la medida no pretende "ir contra nadie" y que simplemente apuesta por "dar un mayor grado de libertad" a los ciudadanos. "El amor no es homo, ni hetero ni bi. Es amor y nadie le puede poner límites", dijo por su lado el diputado del Partido Nacional Jorge Gandini.

Entre los detractores está la Iglesia católica

En el otro extremo, su correligionario Gerardo Amarilla consideró que la norma "apunta a la desnaturalización de la familia". Entre los detractores de la iniciativa está la Iglesia católica uruguaya, según la cual la palabra "matrimonio" solo puede referirse a la "unión estable de varón y mujer, capaces de acto conyugal con trasmisión de la vida, basado en el contrato de mutua pertenencia". Alberto Sanguinetti, obispo de Canelones, departamento vecino de Montevideo, afirmó en un reciente comunicado difundido por internet que "hablar de matrimonio igualitario –aplicado a algún tipo de unión o pacto de varón con varón o mujer con mujer– es una mentira, y una imposibilidad real".

Un "momento histórico"

El debate parlamentario fue seguido con intensidad desde los palcos del Congreso y a través de las redes sociales por miembros de la comunidad homosexual local, que lo calificaron de "momento histórico" y de fin de "una etapa de conquistas". Según dijo a Efe Diego Sempol, uno de los portavoces del colectivo defensor de los derechos de los homosexuales Ovejas Negras, la votación "es un primer paso significativo para lograr la igualdad jurídica" de las personas con una orientación sexual diferente.

Entre los asistentes a la sesión legislativa estuvo la pareja de homosexuales uruguayos formada por Federico Maserattin y Omar Salsamendi, que recientemente se casaron en Buenos Aires con el objetivo de que la justicia de Uruguay reconociese esa boda al regresar a su país. La pareja intentaba emular lo sucedido con otro matrimonio celebrado en 2010 en España entre un uruguayo y un español que fue validado a mediados de este año por la Justicia uruguaya aunque luego la fiscalía apeló el fallo.

La regulación del orden de los apellidos ha generado controversia

Uno de los aspectos más llamativos de la norma aprobada este miércoles será la reglamentación sobre el orden de los apellidos que deberán llevar los hijos y que afectará también a las parejas heterosexuales. Así, en lugar de la pauta actual en la que el apellido paterno es el que se coloca primero a los hijos, la norma incluye la posibilidad de que las parejas heterosexuales puedan optar por cualquiera de los apellidos para que vaya en primer lugar, tal y como harán los homosexuales. También generó controversia el derecho de los hijos a reconocer a su padre biológico en el caso de que la madre, casada con otra mujer, lo tenga en un embarazo por la relación con otro hombre, no así en el caso de se use el método de fecundación in vitro, por la reserva de la identidad que se concede a los donantes de esperma.

Las bodas gays son legales ya en once países del mundo

En la actualidad, las bodas gays son legales en once países –España, Argentina, Holanda, Bélgica, Canadá, Sudáfrica, Noruega, Suecia, Portugal, Islandia y Dinamarca–, así como en seis Estados de EE.UU, la capital de México, el Estado mexicano de Quintana Roo y en el estado brasileño de Alagoas.