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Rubalcaba respalda al Gobierno y desea su acierto para bajar la prima de riesgo

  • "Lo úlimo que va a hacer el PSOE es sembrar dudas", asegura
  • Está convencido de que el Gobierno "está haciendo todo lo posible"

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Gobierno y oposición continúan con reproches pero defienden los intereses de España

El secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, se ha negado este miércoles a sembrar dudas sobre la confianza en España y ha mostrado su respaldo a las actuaciones del Gobierno, con la confianza en que "está haciendo todo lo posible" para que mejore la situación "tan delicada" y baje la prima de riesgo.

Rubalcaba se ha expresado en estos términos en rueda de prensa, tras reunirse con el presidente de Asturias y secretario general del PSOE en el Principado, Javier Fernández, dentro de la ronda de contactos con los líderes regionales de su partido que comenzó la semana pasada con el andaluz José Antonio Griñán.

A preguntas de los periodistas, Rubalcaba no ha querido pronunciarse sobre las palabras del ministro de Economía, Luis de Guindos, que ha achacado a la inestabilidad en Grecia la subida de la prima de riesgo en España.

"Hoy la prima de riesgo está donde está, la situación es muy difícil y lo último que va a hacer el PSOE es sembrar dudas, hacer interpretaciones que pudieran ser malinterpretadas", ha señalado, para agregar: "Si el Gobierno ha dicho que la prima de riesgo puede mejorar, lo único que deseo es que el Gobierno acierte y que las cosas vayan por ahí".

Así, ha reiterado que en esta coyuntura quería ser "cauteloso y respetuoso" y colocarse "detrás del Gobierno" con la confianza en que está haciendo todo lo que puede por que mejoren las cosas.

El PSOE quiere "echar una mano"

El líder socialista ha hecho hincapié en que el PSOE "quiere echar una mano" y para ello ha apuntado que hay una línea de trabajo conjunto con el Gobierno en la política europea, persuadido de que buena parte de los problemas de España "tienen que resolverse en Europa".

Si se pusieran en marcha algunas de las medidas sugeridas por los socialistas, como los eurobonos, se recorrería "una buena parte del camino", junto con políticas de estímulo al crecimiento.

Precisamente la ausencia de esas políticas es, a su juicio, el problema más importante del país, al que le faltan perspectivas de crecimiento. "Un país que no crece es un país cuyos activos bancarios se deterioran", ha advertido.