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La Fiscalía investiga a dos grupos: el que agredió a los diputados y el que se enfrentó a los mossos

  • Dará una "respuesta contundente" a los actos violentos de Barcelona
  • La fiscal superior de Cataluña: A la investigación se le ha dado "máxima prioridad"

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La fiscal superior de Cataluña, Teresa Compte, ha advertido este viernes que el Ministerio Público dará una "respuesta contundente" a los responsables de los actos violentos ocurridos el pasado miércoles en las inmediaciones del Parlament, investigación a la que se ha dado "máxima prioridad".

Según ha explicado en rueda de prensa tras una junta de fiscales superiores celebrada en Valencia, la Fiscalía está investigando a "dos grupos de personas": las que "lanzaron los ataques contra los parlamentarios y obstaculizaron el funcionamiento del parlamento", y los que mantuvieron enfrentamientos con la Policía tras el inicio de la sesión.

Esta segunda fase se cerró con seis detenidos que han quedado en libertad provisional imputados por los delitos de desobediencia y resistencia a la autoridad tras prestar declaración judicial.

Defiende que la actuación de los agentes no fue delictiva

Respecto al primer grupo, la Fiscalía de Barcelona, en colaboración con la policía judicial, está recabando vídeos sobre los sucesos y recopilando mensajes difundidos a través de internet en la fase inicial de las diligencias.

Preguntada por un supuesto abuso en la intervención de los Mossos d'Esquadra, la fiscal superior asegura que no se ha detectado una actuación delictiva de los agentes.

Respecto a la infiltración de policías entre los manifestantes, Compte ha recordado que en estas situaciones siempre hay agentes entre los ciudadanos para "aportar pruebas" y "poder separar a los violentos de los que no lo son", algo que se hace en "cualquier país democrático".

Por su parte, el fiscal general del Estado, Cándido Conde-Pumpido, cree que es necesario hacer una "clara distinción" entre el "respetable" movimiento del 15-M que actúa pacíficamente y los "ataques directos" a las instituciones democráticas, frente a los que hay que mantener una "tolerancia cero".