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Encuentran fósiles de 35 marsupiales en Bolivia

  • Los esqueletos se han encontrado en un área de un metro cuadrado
  • El descubrimiento replantea las costumbres de las zarigüeyas

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Investigadores del Instituto de Ciencias Naturales Real de Bélgica  en Bruselas han descubierto los restos de 35 ejemplares de una  especie de marsupial primitivo de inicios del Paleoceno de Bolivia.  Las características del hallazgo, que los caracterizan como animales  gregarios, se publican en la edición digital de la revista Nature.

Según señalan los autores, los descubrimientos desafían las  percepciones de ciertas características que poseen los marsupiales  que se consideraban primitivas y que podrían haber surgido más tarde  durante su evolución.

Los oposum son el orden más amplio de marsupiales se caracterizan  por su conducta solitaria y esta característica se cree ancestral  para los marsupiales en general.

Entre los restos hay 35 individuos de la especie Pucadelphys adinus

Los científicos, dirigidos por Sandrine Ladevze, informan del  descubrimiento en Bolivia de restos de esqueleto de un gran conjunto  de animales con 64 millones de años de antigüedad.  Entre los fósiles  se conservan 35 individuos de la especie 'Pucadelphys andinus', un  animal del tamaño del ratón similar al oposum, entre los que se  incluyen machos y hembras, adultos y jóvenes.

Los restos están bien conservados pero entremezclados y como  fueron descubiertos dentro de un área pequeña, dentro de un metro  cuadrado, probablemente resultaron enterrados en un único episodio  catastrófico.

Los esqueletos muestran evidencias de conducta gregaria y un  fuerte dimorfismo sexual, lo que sugiere la competición entre machos  por las parejas y la existencia de poliginia.

El descubrimiento replantea las costumbres de las zarigüeyas

Este descubrimiento significa que existen ahora más especímenes  del extinguido 'P. Andinus' que de algunos marsupiales que viven en  la actualidad.

La zarigüeya común, un marsupial didélfido, se caracteriza por su comportamiento solitario, y los científicos consideraban que esta particularidad provenía de épocas primitivas.

Este descubrimiento replantea las costumbres de las zarigüeyas contemporáneas, solitarias por naturaleza y de mayor dimensión que sus ancestros, que eran del tamaño de ratones.