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El rescate obligará a Portugal a pagar la mitad de paro y a bajar las pensiones

  • Las prestaciones por desempleo se reducen a un máximo de 18 meses
  • El plan amplía la congelación del sueldo de los funcionarios hasta 2013
  • Las indemnizaciones por despido pasan a 10 días por año trabajado

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El primer ministro luso, José Sócrates anuncia un "buen acuerdo" con la troika
El primer ministro de Portugal, José Sócrates, y el ministro de Finanzas, Teixeira dos Santos, anuncian "un buen acuerdo" para el rescate financiero de su país.

El plan de medidas acordadas por el Gobierno luso con la troika, representantes del Fondo Monetario Internacional y la Unión Europea, para acceder al rescate de 78.000 millones de euros, prevé drásticos recortes como la reducción de las pensiones de más de  1.500 euros y la rebaja a un máximo de 18 meses del período para recibir la prestación por desempleo. Además, a lo largo del próximo año y en 2013, se congelarán todas las pensiones, excepto las más bajas.

De acuerdo con el memorándum del acuerdo, divulgado por diversos medios digitales lusos, el Gobierno prevé una reducción del gasto en personal de la administración central de un 1% anual entre 2012 y 2014 y de un 2% anual para los trabajadores de las administraciones local y regional. Esta contención se lograría mediante la congelación de los salarios en 2012 y 2013 y la admisión limitada de personal.

Precisamente este miércoles, el país luso ha conseguido colocar 1.117 millones de euros en deuda a tres meses, aunque tendrá que pagar un interés del 4,652%, por encima del 4,046% de la anterior.

Recortes en la prestación por desempleo

El principal objetivo del plan acordado por el Gobierno luso con los representantes del Fondo Monetario Internacional y la Unión Europea es reducir a una tercera parte el déficit luso, hasta el 5,9% del PIB este año, a un 4,5% en 2012 y un 3% en 2013.

El gobierno luso prevé ahorrar 150 millones de euros mediante la reforma de las prestaciones por desempleo, mediante la reducción de las ayudas a un período máximo de 18 meses, en lugar de los 3 años actuales.

En este sentido, también se reducirán las prestaciones por desempleo de forma progresiva apartir de los seis meses en el paro, hasta un mínimo del 10% de la prestación.

También las condiciones de despido de los trabajadores se ven afectadas por los recortes, ya que la indemnización quedará reducida a 10 días, tanto en los contratos indefinidos como los temporales. Además se permitirán los despidos cuando el trabajador no reúna las condiciones actuales que requiere su puesto o no cumpla los objetivos bajo su responsabilidad.

Más impuestos y recortes en sanidad y educación

El plan para acceder al rescate financiero fija en el  15% de las ayudas, es decir, 12.000 millones de euros, el montante que  se destinará a los bancos portugueses, ya que las entidades financieras estarán obligadas a disponer de un 9% de capital de calidad o capital básico.

También contempla aumentar los ingresos del Estado en 250 millones de euros en 2012 gracias al aumento del IVA, el impuesto de valor añadido en la compra de vehículos y tabaco. Los impuestos especiales en estos productos se incrementarán en función del aumento de los precios.

El plan insta a Portugal a rebajar los costes operativos de los hospitales, fomentando, por ejemplo, la utilización de genéricos, "racionalizando" los servicios de especialidades y de urgencias reforzando la atención primaria y rebajando sustancialmente, en un 66% de media, las deducciones fiscales para gastos relacionados con la salud.

En el ámbito de la educación, el plan exhorta a reducir los costes en 195 millones de euros a través de la reestructuración de la red de colegios.

Programa de privatizaciones

El Gobierno luso se ha comprometido a llevar adelante un amplio programa de privatizaciones, que incluye a la aerolínea TAP, las firmas energéticas Galp, EDP y REN, durante 2011 y a presentar otras dos empresas para su privatización en 2012.

El conjunto de las reformas es resultado del análisis realizado por la representación del FMI, la UE y el Banco Central Europeo enviada a Lisboa hace tres semanas.