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Google cambia su algoritmo para que bajen puestos las webs de menos calidad

  • Introduce los cambios tras meses de críticas por sus resultados
  • Los contenidos basura habían ganado posiciones

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Spam y páginas de contenidos basura dañan la imagen de Google
Spam y páginas de contenidos basura dañan la imagen de Google

Google ha anunciado que ha realizado un cambio importante en su algoritmo para mejorar sus resultados y reducir la visibilidad de webs de baja calidad.

El cambio se lleva a cabo tras meses de críticas por la perdida de calidad de sus contenidos. El empeoramiento de sus resultados se produjo por los sitios que realizan spam contra el buscador, intentando acaparar los primeros puestos: a través de ellos consiguen 'atraer a la gente' y ganar dinero o comisiones con la venta de productos o publicidad.

Estas 'páginas basura' utilizan muchas veces técnicas y trucos que van contra las recomendaciones que el buscador hace a los webmasters de sitios web.

A todo este lío se han sumado en los últimos tiempos los denominados 'sitios web de baja calidad': páginas web que sin estar específicamente diseñadas para engañar a Google ofrecen únicamente contenido vacío y falto del más mínimo criterio.

Según recoge su blog oficial, "esta actualización está diseñada para reducir el ranking de los sitios de baja calidad como aquellos que copian contenidos de otras webs", y al mismo tiempo "proporcionará una mejor clasificación de los sitios de alta calidad, como los sitios con contenido e información original, reportajes en profundidad, el análisis reflexivo, etc".

El buscador señala que el cambio afectará al 11,8% de las consultas, pero Google se enfrenta a un problema adicional.

Dado que en muchos lugares su posición es excesivamente dominante -con una cuota de más del 90% de las búsquedas en algunos países- y que forma parte integral del negocio de muchas empresas, eliminar de un plumazo ciertos resultados del buscador podría acarrearles problemas.

Google ha sido denunciado en algunas ocasiones por empresas que se han sentido perjudicadas por los cambios en los algoritmos, y una acción contra las grandes granjas de contenidos o empresas particulares podría suponerle nuevos litigios.

Tendrá que hilar muy fino para conseguir separar el grano de la paja sin que esto suponga problemas adicionales para la compañía.