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El escudo de las células sanas contra el cáncer

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Entre probetas

¿Quién dice que la Ciencia y, sobre todo, su Divulgación (ambas conmayúsculas) tienen que ser aburridas?¿Se puede divulgar e informar de los principales logros e hitos científicos sin dejar el humor, motor de vida, en el intento? Entre Probetas nació para informar. Entre Probetas surge para divertir. Mi labor como Profesor, Investigador y Director de Cultura Científica de una de las mejores universidades y centro de investigación del país -Universidad Autónoma de Madrid y Centro de Biología Molecular Severo Ochoa, respectivamente- me permiten estar en primera línea informativa en áreas afines, o no tan afines, a mi propio desarrollo como científico; como biólogo molecular y microbiólogo. Emisión: Lunes a Jueves 15.36; Sábado 14.52; Domingo 09.52 y 14.52

El pasado mes de junio, la prestigiosa revista Developmental Cell publicaba el descubrimiento  de que las células conversan entre sí -mediante un código denominado Flower- y se informan unas a otras sobre su estado de salud con el fin de que las débiles sean eliminadas y prevalezcan las más fuertes.

Cuatro meses más tarde, el Grupo de Competición Celular del Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas (CNIO), dirigido por Eduardo Moreno, aporta, en el mismo Journal nuevos datos acerca de cómo las células normales luchan por sobrevivir ante el ataque de las células tumorales.

Las células sanas forman un escudo defensivo con una proteína

Concretamente, lo que se ha descubierto es que las células secretan una proteína llamada SPARC que se sitúa en el exterior de la pared celular formando un escudo defensivo. Por ello, este nuevo trabajo amplía un poco más el conocimiento sobre esta lucha entre células tumorales y células sanas.

Según Eduardo Moreno, las implicaciones del descubrimiento pueden ser varias. “En primer lugar plantea un posible mecanismo de terapia antitumoral,  ya que cabe pensar que aportando más proteína SPARC se podría contener la expansión del tumor.

Otra posible aplicación sería en cirugía, ya que la visualización mediante tinción de esta proteína marcaría claramente el contorno del tumor y facilitaría la labor de los cirujanos a la hora de extirparlo en su totalidad”.

Finalmente, otra hipótesis que se baraja y que ya investiga el Grupo de Competición Celular del CNIO es la posibilidad de que la proteína SPARC sirva como marcador de la agresividad del tumor: cuanto mayor sea la presencia de SPARC, mayor será la agresividad del tumor.

Por ello, nuevas formas de terapia anticancerosa podrían depender del mejor conocimiento molecular de esta nueva proteína analizada.

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