Enlaces accesibilidad

La crisis griega perjudica la posición del partido de Merkel ante las elecciones en Westfalia

  • Los sondeos señalan el fin de su coalición con los liberales en ese estado
  • Es su primer test antes las urnas desde su reelección como canciller

Por
La canciller alemana, Angela Merkel, se enfrenta al primer test electoral desde su reelección.
La canciller alemana, Angela Merkel, se enfrenta al primer test electoral desde su reelección.

La gestión de la canciller alemana, Angela Merkel, ante la crisis griega ha empeorado la posición de su formación, CDU, ante las elecciones del domingo en Renania del Norte-Westfalia, en las que se perfila el fin de su coalición de gobierno en ese estado con el Partido Liberal (FDP).

Los últimos sondeos, a cuatro días de los comicios -el primer test ante las urnas desde su reelección como canciller-, apuntan a que la (Unión Cristianodemócrata) CDU se mantendrá como primera fuerza, con un 37%, pero no estará en disposición de gobernar con el FDP, al que se pronostica un 7%.

De acuerdo con la encuesta difundida este miércoles por la cadena de televisión privada Sat-1, una coalición entre el Partido Socialdemócrata (SPD) y los Verdes alcanzaría un 45% de votos, un punto por encima de la alianza entre la CDU y el FDP que lidera el primer ministro regional, Jürgen Rüttgers.

De ser así, ninguna de las dos constelaciones de gobierno tradicionales logrará la mayoría necesaria, de manera que se abriría un abanico de posibilidades alternativas, desde un gobierno entre la CDU y los Verdes, a un bloque entre el SPD, Verdes y La Izquierda, o una gran coalición.

Cualquiera de estas alternativas a la coalición de centro-derecha actual significaría, para el gobierno de Merkel, la pérdida de la mayoría en la cámara de representación territorial (Bundesrat), a cuya ratificación se somete un 70% de las leyes previamente aprobadas por la cámara baja (Bundesrat).

Comicios de gran relevancia

Las elecciones de Renania del Norte-Westfalia son de gran relevancia a escala federal, por tratarse del estado más poblado del país -con 18 millones de habitantes- y ser, además, los primeros comicios en Alemania desde las generales de septiembre de 2009.

Merkel logró la reelección pese a que su CDU obtuvo los peores resultados de su historia, debido a la debilidad aún mayor del SPD, y consiguió asimismo poner fin a su forzada gran coalición con los socialdemócratas de su anterior legislatura en favor de una alianza con sus socios naturales, los liberales.

Sin embargo, el arranque de esta nueva coalición ha sido dificultoso, por las exigencias del líder liberal y ministro de Exteriores, Guido Westerwelle, de unas rebajas fiscales que la CDU considera imprudentes de cara al objetivo de saneamiento presupuestario.

A ello se unió la creciente pérdida de simpatías de Westerwelle, que en apenas seis meses se ha convertido en el ministro de Exteriores más impopular de la historia de la RFA, según los sondeos.

Descontento por las ayudas a Grecia

Finalmente, la actitud titubeante de Merkel ante la crisis griega -que de las reticencias primeras a apoyar un plan de rescate ha pasado a aprobar un paquete de ayudas del que Alemania es el primer contribuyente de la UE- ha minado aún más el apoyo del elector.

El gobierno alemán a las órdenes de Merkel aprobó este lunes la aportación alemana para el paquete de préstamos a Grecia por un montante de 22.400 millones de euros para tres años, que será previsiblemente sancionado este viernes por las dos cámaras parlamentarias.

Según un sondeo del semanario "Stern", de realizarse elecciones generales este domingo, la CDU/FDP obtendría un 42%, dos puntos menos que una semana atrás, mientras que un bloque entre el SPD, los Verdes y La Izquierda se alzaría con un 51%.

Los expertos en demoscopia atribuyen estos pronósticos, a partes iguales, tanto a la insatisfacción por el trabajo de la coalición de Merkel como al descontento por las ayudas a Grecia.