La juez mantiene en prisión a los dos acusados de provocar el incendio de Horta

• Cree que existe riesgo de fuga al no tener trabajo estable ni cargas familiares
• La juez de Gandesa alega sus contradicciones y las fotografías que tomaron

La juez de Gandesa (Tarragona) que investiga el incendio forestal del pasado mes de julio en Horta de Sant Joan (Tarragona), en el que murieron cinco bomberos, ha confirmado la prisión preventiva para los dos jóvenes acusados de haber provocado intencionadamente el fuego, tras concluir que el incendio fue intencionado y posiblemente alimentado con unas bombonas de cámping gas.

En sendos autos, la titular del juzgado de instrucción de Gandesa desestima los recursos presentados por la defensa de ambos acusados, Juan Antonio P.M. y Lorenzo F.M., contra su encarcelamiento provisional, acordado por la propia juez el pasado 9 de enero como presuntos autores de un delito de incendio forestal.

La instructora ha resuelto mantener en prisión a los imputados, al considerar probable el riesgo de que intenten huir, dado que ambos carecen de trabajo estable y de cargas familiares y dada la gravedad de la pena que afrontarían, de entre uno a cinco años de prisión. 

La juez desmonta también los argumentos esgrimidos por los acusados, que mantienen que el incendio forestal se desencadenó accidentalmente, y para ello se basa tanto en las contradicciones en que incurrieron en sus declaraciones como en las fotografías que tomaron del fuego.

Uno de los imputados tiene antecedentes por violencia de género

En el caso de Juan Antonio P.M., la juez arguye también que el imputado cuenta con antecedentes penales por violencia de género, otra circunstancia que podría llevarlo a intentar eludir la acción de la Justicia.

Para la juez, el riesgo de huida existe también en el caso de Lorenzo F.M. porque, aunque el imputado se presentó voluntariamente en el juzgado antes de ser detenido, su entrega fue precipitada por una "exhaustiva investigación policial" que llevaba ya cinco meses en marcha.

Como ya hiciera en el auto en el que ordenó su ingreso en prisión, la juez desmonta la versión esgrimida por los imputados, que mantienen que el incendio forestal se desencadenó accidentalmente por una súbita ráfaga de viento, y para ello se basa tanto en las contradicciones en que incurrieron en sus declaraciones como en las fotografías que tomaron del fuego.

Para la juez, son "especialmente significativas" las fotografías tomadas por los imputados, en las que en ningún momento se observa "una actitud de nervios o de preocupación", sino más bien todo lo contrario.