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La violencia regresa a las calles de Xinjiang con nuevos linchamientos de uigures por parte de 'han'

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La violencia vuelve a las calles de la capital de la región de Xinjiang, al noroeste de China, en el cuarto día de los graves enfrentamientos étnicos entre la minoría musulmana uigur y la etnia 'han', mayoritaria en el conjunto del país, tras una noche de tensa calma.

A pesar del impresionante dispositivo que intenta mantener el orden en la capital con decenas de miles de agentes, se han producido linchamientos, aunque más "esporádicos" de ciudanos uigures por parte de los chinos han, que en la región son minoría pero que en China suponen más del 90% de la población, según informa AFP. Las autoridades aseguran que la "situación está controlada" y que los asesinos serán condenados a muerte.

Los chinos 'han' han vuelto a salir a la calle para clamar venganza contra los uigures. La policía antidisturbios ha intentado dispersar a un millar de ellos que protestaban en Urumqi.

Por su parte, unos 200 musulmanes se han enfrentado este miércoles con armas improvisadas al cordón policial que separa los distintos barrios étnicos en Urumqi, para protestar por la persecución, pero ya han sido disueltos.

Decenas de miles de miembros de las fuerzas de seguridad han reforzado el dispositivo de seguridad para formar un cordón policial que divida los barrios musulmanes de los de mayoría de etnia han en Urumqi, mientras los helicópteros sobrevuelan la ciudad.

Los disturbios de las últimas horas han obligado al presidente chino, Hu Jintao, suspender su participación en el G-8 en Italia y regresar al país.

Los chinos 'hans' linchan a uigures

Un periodista de AFP informa de que ha sido testigo del linchamiento de un musulmán uigur por parte de un grupo de unos 20 chinos de la etnia mayoritaria han. Según su relato, han dado a la víctima patadas y puñetazos. Los militares que estaban a 200 metros formando una barrera para cerrar el acceso al barrio uigur han acudido para disolver al grupo.

Una joven 'han' de unos 20 años ha afirmado que la persona atacada era un uigur.

El periodista de AFP ha sido testigo de otro incidente. Un grupo de chinos 'han' estaban leyendo la prensa cuando se han percatado de que cerca de ellos había tres uigures, tras lo que han salido tras ellos.

Dos han conseguido escapar pero un tercero ha sido abatido y golpeado por seis hombre y mujeres hasta que ha llegado la policia apenas 30 segundos después. El hombre tenía toda la cara llena de sangre.

La líder disidente uigur habla de 400 muertos

Los enfrentamientos que encaran su cuarto día estallaron el pasado domingo, cuando una protesta de la minoría uigur acabó con un baño de sangre que dejó 156 muertos y más de un millar de heridos, en los hechos más graves ocurridos en China desde la matanza de Tiananmen. La disidente uigur en el exilio, Rebiya Kadeer, ha afirmado este miércoles que los muertos superan los 400.

Tras los enfrentamientos, fueron detenidos más de 1.400 uigures. La región de Xinjiang lleva décadas siento una zona de conflicto étnico.

Los musulmanes protagonizaron la manifestación, en principio pacífica, para protestar por el linchamiento que sufrieron el pasado 26 de junio los trabajadores uigures de una fábrica de juguetes después de que se extendiera el rumor de que habían violado a dos jóvenes de etnia han. Dos uigures murieron en este enfrentamiento.

Los uigures desafían a la policía

Unos 200 musulmanes uigures han salido a la calle con armas improvisadas en un barrio musulmán de Urumqi en la mañana del miércoles. Según ha constatado un periodista de la agencia de noticias AFP, este grupo se ha enfrentado al cordón policial que separa esta zona de la ciudad de otros barrios donde la mayor parte de la población es de etnia han, pero han sido disueltos.

Los uigures protestaban por la persecución que han sufrido en las últimas horas por parte de masas de chinos 'han', que este martes salieron a la calle armados con palos y barras de hierro clamando venganza contra la minoría musulmana, mayoritaria en la región de Xinjiang.

"La pasada noche, unos 300 hans atravesaron el cordón de seguridad y atacaron casas y un restaurante", afirma un musulmán, Akbar, de 20 años, que asegura que incluso "golpearon a un hombre de 50 años". AFP no ha podido verificar si estos hechos son ciertos.

Una noche con toque de queda

Esta noche el Ejército comunista ha patrullado por las calles con vehículos blindados. Durante las 11 horas de prohibición de civiles en las calles (de 21.00 a 8.00), se pudo escuchar a las patrullas en formación, corriendo y cantando marchas militares, como pudo comprobar Efe durante toda la noche.

Helicópteros del Ejército de Liberación Popular chino (ELP) sobrevuelan la ciudad asolada por las protestas, que el martes provocaron graves destrozos en el barrio uigur, arrasado por masas enfurecidas de chinos han.

Los negocios de ese barrio, en el centro de la ciudad, han amanecido con cristales rotos, instalaciones destrozadas, y sus habitantes uigures dominados por el pánico, aunque algunos de ellos se han atrevido a salir a la calle y hablar con los periodistas.

"Los disturbios del domingo estaban orquestados", ha asegurado a Efe uno de los vecinos uigures del barrio, quien ha declarado que esta etnia siempre ha vivido "pacíficamente" en Urumqi y "no tiene nada en contra de los chinos han".

Los medios oficiales chinos dejan de informar

Tres días después de los peores disturbios vividos entre musulmanes uigures y chinos de la etnia han en Urumqi (Xinjiang), los medios de comunicación oficiales han dejado de informar de la crisis.

Tanto la agencia de noticias Xinhua -principal mecanismo de comunicación oficial en caso de crisis- como la televisión estatal central CCTV han limitado la cobertura de los distintos sucesos desde el día de ayer.

Xinhua no ha publicado este miércoles ninguna nota desde Xinjiang al respecto, ni menciona novedad alguna, a pesar de que los periodistas extranjeros desplazados a la zona del conflicto aseguran que los enfrentamientos continúan y que la situación es "tensa", con la población armada y el Ejército patrullando.

Del mismo modo, los informativos de la CCTV no ofrecen imágenes de las calles de Urumqi, capital provincial y sede de los disturbios entre uigures y chinos han.

Este "apagón informativo oficial" coincide con los problemas de acceso a teléfono e internet en Xinjiang, que dificulta la comunicación con la zona.

Además, este miércoles también se ha extendido la censura de nuevas páginas web en toda China, que ahora impide el acceso a redes sociales tan populares como Facebook o Twitter y a muchos servidores de blogs.