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La suspensión de un vuelo de bajo coste entre Sofía y Madrid afecta a decenas de viajeros

  • La compañía EasyJet tuvo que cancelar el vuelo a medianoche por una intensa nevada
  • Los pasajeros, entre ellos numerosos españoles, no recibieron atención de la compañía
  • Muchos han pasado la noche en el aeropuerto o han buscado alojamiento por su cuenta
  • En su web, EasyJet afirma que proporcionará hotel y alojamiento en casos similares

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A new EasyJet Airbus A319 is moved out of hall following a ceremony at the Airbus delivery facility in Finkenwerder near Hamburg
EasyJet es una de las compañías de bajo coste más importantes de Europa.

Más de un centenar de pasajeros de un vuelo entre Sofía y Madrid han tenido que pasar la madrugada de este domingo en la capital búlgara, después de que la compañía de bajo coste EasyJet suspendiera un vuelo debido a una fuerte nevada.

Los viajeros, muchos de los cuales son españoles, se han visto obligados a permanecer en el aeropuerto de Sofía en pésimas condiciones debido a que la companía no les ha facilitado hotel ni transporte, según ha relatado a RTVE.es el periodista español Javier Moltó, que se encuentra entre los afectados.

Moltó ha asegurado que el vuelo U2 7822 Sofía-Madrid debía haber despegado a las 20:50 horas de este sábado del aeropuerto de la capital búlgara, pero la intensa de la nieve ocasionó la suspensión del mismo.

Ningún representante de EasyJet

El aviso de la cancelación definitiva no se produjo hasta las 23:30 horas y fue realizado por el personal del aeropuerto, ya que ningún representante de EasyJet se encontraba presente.

Un folio pegado en un cristal mostraba un número de teléfono para recibir información. Al marcalo, los pasajeros sólo pudieron escuchar la voz de un contestador que les emplazaba hasta la mañana siguiente para realizar su reclamación ya que el servicio no se encontraba operativo.

Según cuenta Javier Moltó en su blog, "el personal que atendía a los pasajeros, aparentemente subcontratados por EasyJet, comunicó que la compañía no facilitaba ni hotel ni transporte a los pasajeros afectados", ya que se trataba de una compañía de bajo coste.

Esto ha motivado que más de un centenar de personas -en torno a 150, según el periodista- hayan tenido que buscar por sus propios medios hotel y transporte ante la falta de amparo de la compañía.

Noche en el aeropuerto

"Yo he tenido suerte y he pillado un taxi de casualidad, porque me ayudaron unos amigos que tengo en Sofía pero imagino que muchos pasajeros han tenido que pasar la noche en el aeropuerto", ha manifestado Javier Moltó.

Entre los afectados hay muchas familias con niños y "gran parte de los pasajeros viajaban con mucho equipaje, esquís incluídos, después de pasar unos días de vacaciones en la capital o en las pistas de nieve de Bansko", dice Moltó.

El periodista español ha decidido regresar este lunes en un vuelo de Bulgaria Air que le ha costado 450 euros, 300 más que el importe de su billete de Easy Jet. Respecto al resto de los pasajeros, Moltó desconoce cómo viajarán hasta España aunque asegura que "la solución que les ha dado EasyJet es volver el día 8 de enero, ya que hasta el 7 todos los vuelos están completos".

La empresa garantiza alojamiento y transporte en su web

En la página web de EasyJet se especifica que en el caso de que el vuelo se cancele por circunstancias extraordinarias, imposibles de evitar, y "el pasajero se ve obligado a pernoctar ya que la hora de salida prevista dentro de lo razonable es, como mínimo, al día siguiente de la fecha de salida previamente anunciada, EasyJet le ofrecerá alojamiento en un hotel y transporte entre el aeropuerto y el hotel dentro de lo que sea razonable".

Javier Moltó no ha decidido aún si reclamará a la compañía cuando regrese a España. "Cuando llegue a Madrid veré si lo hago aunque soy periodista y me interesa más informar que reclamar", ha manifestado a RTVE.es.

Moltó ha señalado que a próxima vez se lo pensará dos veces antes de contratar un vuelo de bajo coste, al menos en destinos que no dispongan de garantías suficientes, como le ha sucedido en Bulgaria.