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Amnistía Internacional denuncia que las víctimas del ciclón son obligadas a trabajar a cambio de comida

  • Los militares han ordenado desalojar a las víctimas de los refugios temporales
  • Para AI decenas de miles de birmanos están en peligro por el hambre y la enfermedad
  • 200 especialistas se encuentran en el delta para preparar un plan de acción

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Los supervivientes del ciclón Nargis que arrasó hace un mes el sur de Birmania son obligados por las autoridades a participar en las labores de reconstrucción a cambio de comida, según denuncia Amnistía Internacional (AI).

La organización internacional comprometida con la defensa de los derechos humanos también ha indicado que la Junta Militar birmana ha ordenado desalojar a los damnificados de los refugios temporales para que regresen a las aldeas que abandonaron tras la catástrofe.

Para Amnistía "las acciones de la Junta ponen en peligro las vidas de decenas de miles de personas, que ya son vulnerables a la hambruna y las enfermedades".

En un informe, la organización cita 40 casos en los que soldados o funcionarios han confiscado o desviado hacia otras áreas no afectadas por el ciclón, la ayuda humanitaria destinada a la población de la región arrasada, donde viven 2,5 millones de personas.

Según la Junta Militar, cerca de 78.000 personas murieron y otras 56.000 están desaparecidas a causa del ciclón que atravesó el delta el 2 y 3 del pasado mayo.

La mayoría de las ONGs que trabajan en las zonas afectadas han bajado el tono de sus críticas a la Junta Militar para evitar que les prohíban desarrollar sus tareas. Amnistía Internacional aprecia "el delicado equilibrio entre mantener la ayuda, aumentar el acceso al delta e incluir en su trabajo los principios de los derechos humanos".

El cómico más famoso de Birmania y destacado opositor fue arrestado esta semana por viajar a la zona afectada para distribuir ayuda entre los damnificados. Maung Thura, más conocido por Zaganar, fue detenido el miércoles tras registrar la Policía su domicilio, al que acababa de regresar desde el delta.

Zaganar, de 47 años, ha estado en prisión en varias ocasiones, la primera en 1988, cuando tomó parte en las marchas de Rangún que exigían reformas democráticas al régimen entonces liderado por el general Ne Win.

Plan de acción

Por otro lado, un equipo de 200 especialistas de la ONU, la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN) y de Birmania está en el delta para estudiar la situación y preparar un plan de acción.

El secretario general de la ASEAN, el tailandés Surin Pitsuwan, ha señalado que las próximas dos semanas de trabajos de este equipo serán "cruciales para consolidar la confianza internacional en esta misión mixta".

El resultado del trabajo se presentará a una reunión que la ONU, la ASEAN y el Gobierno de Birmania tienen previsto celebrar en Rangún el 24 de junio.

Las autoridades birmanas, acusadas por Naciones Unidas y la comunidad internacional de ralentizar la distribución de ayuda a las víctimas con las trabas que impone a la libertad de movimiento de los cooperantes en el país, nombraron el mes pasado a la ASEAN coordinadora oficial de las operaciones humanitarias.