Antonio Serradilla, campeón de la Champions League tras vencer al cáncer: "Escuchas la palabra cáncer y te cagas"
- El balonmanista español logra su primer título profesional tras superar un tumor ocular en 2021
- Serradilla ha sido fundamental asentándose como pieza clave del Magdeburgo
Antonio Serradilla es un jugador de balonmano sevillano de 26 años que milita en las filas del SC Magdeburgo, equipo alemán con el que acaba de proclamarse campeón de la EHF Champions League. La historia del andaluz va mucho más allá del balonmano, el especialista defensivo perdió su ojo en 2021 a causa de un tumor ocular.
El domingo pasado se celebró en Colonia (Alemania) la final de la EHF Champions League que enfrentaba al SC Magdeburgo, equipo del que forman parte los españoles Sergey Hernández y Antonio Serradilla, contra el Füchse Berlin. El encuentro acabó con la victoria del conjunto dirigido por Bennet Wiegert (26-32) y Antonio no solo conseguía la Champions League, también lograba así su primer título como profesional.
En el 2021, su vida cambió por completo.
Debido a un tumor ocular tuvo que ser intervenido quirúrgicamente, en una operación donde se le extirpó su ojo derecho y perdió, aproximadamente, la mitad de su visión. Cuatro meses después regresó a las canchas con unas gafas especiales y él mismo reconoció a RTVE en 2021 que "tiene limitaciones, pero que se adaptaría a las situaciones del juego".
El camino no ha sido fácil, Serradilla reconoce que cuando le anunciaron que padecía cáncer tuvo mucho miedo, "escuchas la palabra cáncer y te cagas, impone mucho y lo asocias con la posibilidad de que fallezcas o la quimioterapia". En aquel momento se le plantearon dos opciones, la primera de ellas era extirpar su ojo derecho y cortar el nervio de raíz, lo que supone la pérdida total de la visión, opción que era bastante dura y agresiva según nos cuenta. La otra opción involucraría la quimioterapia, un tratamiento de alrededor 10 o 12 meses en los cuales el resultado le dejaría con aproximadamente un 20% de visión y la posibilidad de que el cáncer no se terminará de ir del todo, el andaluz escogió la primera opción.
Serradilla nos cuenta que la operación fue bastante dura: "Lo pasé bastante mal. Recuerdo los días postoperatorios, tener la cara super inflamada, super mal, muchos mareos y ganas de vomitar. Fue duro pero bueno, a los cuatro meses conseguí recuperarme". Por aquel entonces el Ciudad de Logroño era su equipo, le invitaron a probar con total libertad y las cosas le fueron bien.
La vuelta a las pistas no fue fácil, tuvo que acostumbrarse y adaptarse a girar mucho más el cuello para poder ver todo lo que ocurría en el campo. Serradilla tuvo que trabajar mucho individualmente para sobreponerse a las dificultades, "mucho análisis de vídeo, mucha anticipación sobre qué va a hacer el oponente, tener un contacto físico con los pivotes, mucha comunicación con los defensores. Es un cúmulo de cosas que yo necesito y para mí son súper importantes, cada vez que llego a un equipo nuevo necesito a cada uno que defiende cerca de mí, explicarle cuáles son mis puntos débiles y lo que necesito de ellos".
Antonio Serradilla celebrando un gol en la final de la Champions League frente al Füchse Berlín Getty Images
Otro golpe de la vida
"Es el momento más duro de mi vida" nos comenta Serradilla al hablarnos del atentado que sucedió el 20 de diciembre de 2024 en Magdeburgo. Un vehículo arrolló a una multitud de personas en un mercado navideño en el que se encontraba el especialista defensivo junto a su novia. "Nosotros estábamos en la misma calle donde pasó esto. Pasó el coche a dos metros de nosotros", añade el profesional mientras nos habla de lo difícil que fueron los días posteriores: "comiendo con mi novia no decíamos una palabra, lo pasamos muy mal. Yo le dije al club que necesitaba irme, que no podía estar ahí. Necesitaba estar con mi familia". Asegura que le costó mucho volver a la normalidad después de este duro golpe, pero lo acabó superando con ayuda de sus amigos y familia.
Después de esta mala racha y con la sensación de que todo iba para abajo su vida cambió completamente. Hubo lesiones en el equipo que le dieron la oportunidad de afianzarse con un puesto en el que ha estado jugando prácticamente los 60 minutos de los partidos los últimos tres meses, "esta temporada ha sido superar un altibajo brutal y la verdad acabar ganando la Champions League lo hace aún más especial".
Cambio de aires para la próxima temporada
El internacional español cambiará de equipo pero no de país para la próxima temporada, el Stuttgart será el destino del andaluz para la siguiente campaña. "La verdad es que es un cambio totalmente diferente. Después de haber vivido esa experiencia que viví en Magdeburgo y ganar la Champions, es un reto totalmente diferente", nos asegura que uno de sus principales objetivos es ser importante en ataque y salir un poco más del rol de especialista defensivo.
Al preguntarle por la selección absoluta no se esconde en decir que es un objetivo que tiene, volver a ser convocado con los "Hispanos" está en sus planes. "Cuando me pasó la operación del ojo dejé de ir y ahora mismo es un objetivo que tengo. Me gustaría cumplirlo y ya no solo el ir a la selección, sino ser un jugador importante en la plantilla", afirma con entusiasmo.