El mejor Ruud supera a un exigente Draper y se corona en Madrid

• El tenista noruego conquista su primer Mutua Madrid Open al ganar 7-5, 3-6 y 6-4
• Ruud, el mejor tenista en tierra batida del momento, ascenderá al número 7 del mundo

Resumen de la final del Mutua Madrid Open: Casper Ruud - Jack Draper

El noruego Casper Ruud ha reforzado su reinado en la tierra en 2025 con la conquista del Mutua Madrid Open ante un muy buen Jack Draper en un partido igualadísimo y de alto nivel tenístico, que se decidió en un tercer set fabuloso.

Ruud ha levantado el título más importante de su carrera con una impresionante frialdad en su juego, que le llevó a tumbar al explosivo Draper por 7-5, 3-6 y 6-4. Toda una reválida para el noruego, que cuenta en su carrera con tres finales de Grand Slam y dos de Masters 1.000 perdidas.

Un final de torneo redondo para Ruud, que no había perdido un solo set desde que pisó la Caja Mágica y que se marchará de Madrid con el número 7 del mundo en su bolsillo, dejando en la cuneta a la sensación Draper, una de las sorpresas más agradables de los últimos tiempos en el circuito. Pero su eléctrico juego y su poderoso 'drive' chocó contra la solidez del servicio del noruego, que apenas se salió del guion establecido en su cabeza.

Choque de trenes

Cuando se salió, por primera vez al encajar el primer 'break' de la final en el tercer juego, Ruud no se descompuso. Pese al catálogo de 'winners' desplegado por el británico, Casper siguió a lo suyo, consciente del poder de su tenis en tierra batida. Y cuando el set enfilaba sus momentos decisivos, Ruud rompió el saque a Draper (5-5), justo a tiempo para afianzar su saque (6-5), poner contra las cuerdas a su rival y ganar la primera manga al resto con dos globos que desencajaron al inglés.

Draper, muy enfadado en el descanso, regresó firme, en busca del empate en un set igualadísimo en el que la firmeza de Ruud se desmoronó con 14 errores no forzados, por uno solo de Draper. Eso, unido a los altos porcentajes de éxito en el segundo servicio del británico, llevaron a Draper a igualar la contienda con una rotura en el séptimo juego (3-4), levantando dos bolas de break en el octavo y llevándose el set con un nuevo break que coronó con una dejada fantástica.

Desenlace de alto nivel

La final llegó a su cenit en un tercer set para enmarcar entre dos rivales que nunca se habían visto las caras y en un torneo ansioso por coronar a su nuevo campeón. Pero antes, disfrutaron de una batalla espectacular con juegos largos y 'rallies' espectaculares que Ruud, un tono más firme que Draper, decantó en el quinto juego con una rotura decisiva. Draper aguantó el tipo con su saque, pero ya no pudo superar a un Ruud programado para ganar el título.

Lo hizo con un juego en blanco, a lo grande, elevando el valor de una final alejada de los grandes nombres, pero con un tenis digno de un Masters 1000. Así, Madrid, en el primer año sin el eterno rey Rafa Nadal, ha encumbrado al nuevo monarca de la tierra batida. Nadie tiene mejores números que el noruego en los últimos cinco años en polvo de ladrillo y lo ha demostrado en la Caja Mágica.