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El secretario general de UGT, Pepe Álvarez, sostiene que "un pacto de rentas tiene que ir mucho más allá de lo que se ha ido hasta ahora" y debe limitar los beneficios empresariales. Entrevistado en La Hora de la 1, el líder sindical rechaza que el Gobierno se esté forrando con los impuestos y está en contra de deflactarlos, mientras que acusa a las empresas energéticas de disparar sus beneficios y pide a Competencia que investigue. Álvarez ve con cierto optimismo "el tope al precio del gas va a traer bajada de precios en la energía". Augura que puede haber más huelgas sectoriales para presionar a la patronal e insiste en que los salarios tienen que subir con la inflación.

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Hasta abril, los salarios pactados en convenios colectivos aumentaron un 2,4% respecto al mismo periodo de 2021. La inflación media ha rozado en el cuatrimestre el 8%. Parece que los efectos de segunda ronda están lejos de llegar. Pero, si los salarios no alimentan una espiral inflacionista, entonces, ¿qué puede hacerlo? Un estudio del Banco de Pagos Internacionales señala dónde puede estar el mal. Un reportaje de Daniel Hernández.

El secretario general de CCOO, Unai Sordo, emplaza al Gobierno a ser “más ambicioso” en la protección de quienes más están sufriendo el incremento de los precios. Dice que aquellos trabajadores que cobran en torno a 1.000 euros no pueden hacer frente ahora a la subida de la energía y los alimentos y propone una prestación que cubra sus necesidades más básicas: “Hay gente que para pagar la luz o el gas tiene que gastar menos en el supermercado. Sería bueno una prestación para hacer frente a este incremento de precios”. En ese sentido, propone un cambio en el impuesto de Sociedades para hacerla posible: “Si en el impuesto de sociedades se marcara como tipo mínimo el 15% se podría conseguir que tenga una prestación que cubra a esta gente”. Culpa al Gobierno y a la patronal de la falta de acuerdo en el llamado ‘pacto de rentas’ y reitera que se abre un periodo de conflictividad social: “Hemos decidido emprender un proceso de tensionamiento: los trabajadores no pueden pagar el precio de una crisis de precios que nada tiene que ver con ellos sino con el mercado energético. Las empresas están derivando esos incrementos a los precios al consumo”. Concluye Sordo que “la CEOE quiere que los trabajadores paguen el pato”. Por último, sobre las bajas por reglas muy dolorosas,  dice que “es necesario que cualquier dolor que inhabilite para trabajar tenga una baja”. Cree que es una medida positiva y sobre el debate de la posible estigmatización de las mujeres, concluye: “Creo que no se puede tolerar que situaciones que objetivamente están ahí, que es que las mujeres menstrúan, pueda estigmatizar nadie (…) Hay que proteger la salud de todos los trabajadores sabiendo que no se les puede estigmatizar”.


Continúan esta semana los paros parciales en los autobuses urbanos de la capital después de una nueva reunión sin acuerdo.

Herido grave un hombre en el incendio declarado en la residencia psiquiátrica de Arévalo.

El sindicato CSIF pide en Ávila retomar las negociaciones con el nuevo Gobierno regional para reducir la temporalidad en el sector público.

Mohamed El Ghazouany y Gemma Martín se proclaman ganadores de la Media Maratón Ávila Monumental.
 

Un día después de conocerse el borrador de la ley del aborto y los derechos sexuales, las bajas por reglas dolorosas están generando debate.

Serían de hasta cinco días al mes y con certificado médico. Los sindicatos no tienen una opinión unánime y en el Gobierno dicen que todavía están debatiendo su contenido.

El sector de la construcción ha llegado a un preacuerdo con los sindicatos que está más cerca de las recomendaciones sindicales que de las patronales. Este incluye una cáusula que tendrá en cuenta la inflación y el primer plan de pensiones colectivo sectorial. Esquiva así la conflictividad laboral que anuncian UGT y CC.OO.

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