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Juicio 'procés'

Junqueras defiende que "votar no es delito" y que no hubo rebelión porque no avalaron "ninguna actuación violenta"

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Juicio 'procés': Qué ha pasado en la declaración de Junqueras

El exvicepresidente del Govern, Oriol Junqueras, ha abierto este jueves las declaraciones de los doce acusados en el juicio del 'procés' negando que cometieran rebelión y malversación por la celebración del referéndum ilegal del 1-O y la posterior declaración unilateral de independencia de Cataluña. Junqueras, que ha comenzado asegurando que es un "preso político" sometido a un "juicio político" porque se le acusa por sus ideas y no por sus hechos, ha articulado su defensa principalmente sobre dos ideas: nada de lo que hicieron es delito porque "votar no es un delito" y "nunca" contemplaron o avalaron el uso de la violencia como medio para forzar al Estado a reconocer la independencia de Cataluña, en contra de lo que sostiene la Fiscalía.

En su declaración, el ex número dos de la Generalitat ha aprovechado para hacer un alegato sobre el derecho de autodeterminación, que sostiene que tiene Cataluña; reclamar una "solución política que tiene que ser avalada por el voto de los ciudadanos" -aunque sin aclarar si el de todos los españoles o solo el de los catalanes-; y defender que el independentismo ha apostado y apostará por el "diálogo" a pesar de que "la silla de enfrente siempre está vacía" en alusión al Gobierno central.

Con una convocatoria de elecciones generales en ciernes tras el portazo a los presupuestos por parte de los partidos independentistas, Junqueras ha aprovechado también para poner en valor que él sí asumió el riesgo de ir a prisión por sus "convicciones políticas" cuando fue imputado, en una alusión velada al expresidente Carles Puigdemont, que huyó a Bélgica, y ha insistido en que el problema actual que existe en Cataluña "no se resuelve poniendo a la gente en la cárcel, segurísimo".

Es la primera vez que se ha podido escuchar a Junqueras desde que ingresó en prisión provisional el 2 de noviembre de 2017. El exvicepresidente catalán ha optado por declarar en castellano porque para él es "un placer" poder llegar a todos los españoles y se ha acogido a su derecho de no contestar a las acusaciones respondiendo solo a las preguntas de su abogado en un interrogatorio que ha durado algo menos de dos horas.

Junqueras: "Estoy en un juicio político y no contestaré a las preguntas de las acusaciones"

Junqueras ha llegado a pedir al tribunal que le disculpara la "pasión" que estaba poniendo en su intervención pero la ha justificado por las "ganas" que tenía de poder expresarse tras año y medio de "silencio forzado". Incluso ha lamentado el pequeño receso que ha hecho el tribunal a media mañana porque ya iban "lanzados". Uno de esos momentos 'apasionados' es cuando ha declarado su "amor" por España. "Yo amo a España. Amo a la gente y a la lengua y la cultura española. Lo he dicho mil veces porque es verdad", ha asegurando defendiendo que es compatible con ser independentista.

La Fiscalía pide para él 25 años de prisión como "jefe principal" de la presunta rebelión con distracción ilegal de dinero público, mientras que la Abogacía del Estado reclama 12 años por sedición y malversación. La acusación popular ejercida por Vox eleva la pena a 74 años por dos delitos de rebelión, malversación y organización criminal.

Las tres acusaciones le consideran uno de los promotores del plan soberanista presuntamente diseñado por los acusados para lograr la independencia de Cataluña. Como vicepresidente, asegura la Fiscalía, asumió la planificación y ejecución de la consulta del 1-O e hizo llamamientos a la participación fomentando, propiciando y buscando -sostiene- "el enfrentamiento directo entre multitudes de ciudadanos y las fuerzas de seguridad".

Junqueras: "Nada de lo que hemos hecho es delito"

El exvicepresidente del Govern ha asegurado que la Fiscalía, la Abogacía y Vox "retuercen absolutamente la argumentación" para acusarle de estos delitos y ha sido contundente: "Nada de lo que hemos hecho es delito. Votar en un referéndum no es delito, trabajar por la independencia de forma pacífica no es delito. No hemos hecho ni uno de los delitos que nos atribuyen. Es una argumentación forzada".

Junqueras ha asegurado que el recurso a la violencia como un medio más para conseguir la independencia "nunca, nunca, nunca" fue una opción y ha negado tajantemente que fomentaran el enfrentamiento entre los ciudadanos y las fuerzas y cuerpos de seguridad del estado el 1 de octubre. "Nunca hemos avalado ninguna acción violenta", ha subrayado.

Junqueras, en el juicio del "procés": "Votar no es un delito, impedirlo por la fuerza, sí"

De hecho, el exvicepresidente catalán ha dado la vuelta al argumento y ha atribuido el uso de la violencia a los agentes de la Policía Nacional y la Guardia Civil que cargaron el 1-O contra los ciudadanos que estaban concentrados en los colegios electorales. "Votar no es un delito. En cambio impedirlo por la fuerza, sí", ha destacado el exvicepresidente.

En este sentido, Junqueras ha sostenido que hubo violencia "injustificada e innecesaria" por parte de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado con el objetivo de generar "crispación" ya que aunque consiguieran cerrar algunos centros al haber un censo universal los ciudadanos podían dirigirse a otros. Lo hicieron, sostiene, en contra del mandato judicial que decía que cualquier intervención para impedir la votación debía ser "proporcional".

Junqueras también ha negado que incurrieran en malversación porque no se destinaron fondos públicos a la organización del referéndum. "A los contribuyentes no les costó nada", ha asegurado.

Juicio 'procés': Junqueras niega que se destinaran "fondos públicos" para el 1-O

Junqueras, como ha hecho después el exconseller de Interior Joaquim Forn, se ha desvinculado de una de las principales pruebas que aportan las acusaciones contra ellos, el documento EnfoCATs sobre la supuesta hoja de ruta independentista que encontró la Guardia Civil en el domicilio del entonces número dos del exvicepresidente, Josep Maria Jové. En él se apostaba por desatar "un conflicto de amplio apoyo ciudadano", orientado a "generar inestabilidad política y económica" para forzar al Gobierno a negociar una separación o un referéndum pactado.

En su declaración de este jueves ante el Tribunal Supremo, Junqueras ha calificado el documento de "extravagante y apócrifo" y ha asegurado que ni lo había visto ni había oído hablar de él hasta que fue imputado por la juez de la Audiencia Nacional Carmen Lamela, la primera instructora del 'procés'.

El tribunal permite el catalán por "razones emocionales"

El Tribunal Supremo ha aceptado que los acusados declaren en catalán por "razones emocionales" con traducción consecutiva, es decir, con la presencia de un traductor en la Sala que vaya traduciendo poco a poco la declaración. No ha aceptado, en cambio la traducción simultánea, porque solo sería accesible para las personas que estuvieran físicamente presentes con cascos y eso iría en contra de la "transparencia" del proceso.

El presidente de la Sala, Manuel Marchena, ha subrayado, no obstante, que permitir el uso del catalán no obedece en ningún caso a que declarar en castellano provocara "indefensión" en los acusados.

El tribunal ha rechazo la declaración como testigo del expresidente del Govern Carles Puigdemont porque al estar procesado en la misma causa no puede declarar "como acusado por la mañana y por la tarde de testigo". Sí ha aceptado en cambio la testifical del exministro del Interior Juan Ignacio Zoido.