Enlaces accesibilidad

Israel derriba en lo que va de año casi tantas viviendas palestinas como en todo 2015, según la UNRWA

  • 31 beduinos, entre ellos 16 menores, se quedaron sin vivienda la semana pasada
  • La UNRWA pide a Israel que cese las demoliciones
  • La ONG israelí B'Tselem denuncia una campaña masiva para expulsar a los palestinos

Por
Suleiman, de la comunidad beduina de los Jahalin, ante las ruinas de su vivienda, derribada por Israel, en Um al Jair, al sur de la ciudad de Hebrón,el 6 de abril. AFP PHOTO / AHMAD GHARABLI
Suleiman, de la comunidad beduina de los Jahalin, ante las ruinas de su vivienda, derribada por Israel, en Um al Jair, al sur de la ciudad de Hebrón,el 6 de abril. AFP PHOTO / AHMAD GHARABLI

Israel ha derribado en lo que va de 2016 casi tantas viviendas palestinas como en todo 2015, según denunció la semana pasada la agencia de la ONU para los refugiados palestinos (UNRWA).

Cerca de 700 palestinos se han visto desplazados por los derribos.

"La UNRWA está profundamente preocupada por las demoliciones contrarias al derecho internacional. Según el Cuarto Convenio de Ginebra [sobre la protección de civiles], la destrucción de la propiedad privada está prohibida", explica la nota [EN] del organismo.

La UNRWA recuerda que Israel, "como potencia ocupante, está obligada a gestionar los territorios ocupados para el bienestar de la población".

"Como la ONU ha dicho en repetidas ocasiones, estas demoliciones deben terminar", insiste el documento.

31 beduinos sin casa en Hebrón

El día 6, el Ejército derribó las precarias viviendas de varias familias beduinas en la localidad de Um al Jair, al sur de Hebrón. En total, 31 personas, entre ellas 16 menores, perdieron sus hogares.

Según las autoridades de Israel, las estructuras carecían de permiso de construcción. La localidad se encuentran en el Área C, designada en los Acuerdos de Oslo, y en la que Israel tiene control administrativo total.

La UNRWA asegura que el derribo de las precarias viviendas beduinas se ha convertido en una práctica habitual de los ocupantes, que se suma al acoso que sufren por su cercanía al asentamiento ilegal judío de Karmel.

Al día siguiente, según la ONG israelí B'Tselem, las autoridades ocupantes derribaron viviendas y cobertizos para ganado en seis comunidades.

Cinco de ellas son cercanas al asentamiento ilegal de Maale Adumim, al noreste de Jerusalén, mientras que la sexta, Jirbet Tana, se encuentra en el valle del Jordán. Según la ONG, en esta última localidad no quedó prácticamente ninguna estructura en pie, y perdieron su casa 112 personas, incluyendo 55 menores.

B'Tselem denuncia una "campaña" masiva de demoliciones [EN] que comenzó a principios de año con la intención de expulsar a los palestinos en las áreas citadas del sur de Hebrón, cercanías de Maale Adumim y el valle del Jordán.