Enlaces accesibilidad

Stefan Herheim convierte la ópera "Rusalka" de Dvorak en un filme de Lynch en el Liceu

  • Debuta en el Liceo de Barcelona con esta ópera estrenada en Praga en 1901
  • Herheim actualiza el argumento y refuerza la carga simbólica de los personajes
  • Radio Clásica transmite en directo la función del miércoles 2 de enero a las 20.00 horas

Por

Stefan Herheim, uno de los más reputados directores de escena internacionales, lleva a la actualidad el cuento de hadas de la ópera "Rusalka", de Anton Dvorak, transformada, ha dicho, en una especie de película de David Lynch.

Hernheim, que debuta en el Liceo de Barcelona con esta ópera, ha definido la obra como "una especie de choque psicológico, como una película de David Lynch", algo, añade, que no debe resultar extraño, pues "el cine recoge la inspiración de la ópera; el cine no sería igual hoy sin Wagner".

Recoger ahora la influencia del cine es la forma natural en que se expresa y se mueve el arte, porque "todo está conectado" y, según Herheim, "esas conexiones explican también el resurgimiento que tiene esta ópera en el momento actual".

Las fuentes literarias del libreto de "Rusalka", escrito por Jaroslav Kvapil, se inspiran en dos obras de argumentos diferentes -"La sirenita", de Hans Christian Andersen, y "La campana sumergida", de Hauptmann-, pero que tienen el mismo sentido: en ambas hay dos mundos contrapuestos, el real y el mágico, y un enamorado, la ondina en un caso y el fundidor de campanas en el otro.

Ambos enamorados pretenden cambiar de naturaleza para estar al lado de la persona que quieren, y ambos fracasan cuando quieren vivir su amor en el mundo real.

Así cuenta Ramón Gener en la web del Liceo el argumento y génesis de esta ópera

Ninfa busca príncipe

El argumento de Kvapil explica la historia de una ninfa que vive en las aguas, y que pide a su padre, el genio de las aguas (Vodnik) que la ayude a convertirse en mujer porque quiere a un príncipe. El genio de las aguas la conduce a la bruja Jezibaba, que le promete convertirla en humana si le regala su maravillosa voz, a lo que Rusalka acepta, pero con este trato, privada de la voz, no consigue el amor del príncipe, que opta por una princesa extranjera.

Rusalka vuelve al agua pero sabiendo que para recuperar su voz debe llevar la muerte a los hombres que se le acerquen, y entretanto, el príncipe, arrepentido y melancólico, vuelve a la orilla del lago donde está la ondina para pedirle un beso aún sabiendo que supondrá su muerte.

Hernheim ha explicado que "se trata de una historia muy europea, que habla de la mitología de un cuento de hadas, pero que al mismo tiempo es cruel y violenta".

La historia de la ópera no se presenta en un formato lineal, como se haría en un cuento para niños, sino que tiene un enfoque adulto, "con una perspectiva muy realista y ambientado en un país europeo indeterminado".

La historia adaptada al mundo actual

Hernheim subraya la capacidad que tuvo Dvorak para incorporar el tema del agua a la partitura, "como si fuera un sonido que viniera de las profundidades, del subconsciente del protagonista".

El director de escena ha construido una dramaturgia, ambientada en el mundo actual, en la que todos los personajes tienen un simbolismo. "La bruja del bosque es presentada, por ejemplo, como una sin techo, como una médium sobre la cual todos proyectan sus miedos", añade.

En cierto modo, "Rusalka" es un "psico-thriller", con asesinato incluido, después de que durante la noche en la que transcurre la obra el protagonista acaba perdiendo el control y mata sin darse cuenta a su mujer.Hernheim se atreve a ofrecer la moraleja de la obra: "no se debe confiar en un hombre que no confía en sí mismo, ni tampoco en una mujer que confía en un hombre".

Al situar la acción en el momento actual, Herheim consigue que el resultado sea "una especie de realismo mágico, con un escenario que no es del todo realista, que se mueve entre lo fantástico y lo fantasmagórico al mismo tiempo".