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Cospedal acusa a PSOE de convocar la huelga y Valenciano le replica que es "mentira"

  • Cospedal dice que dirigentes socialistas son convocantes y protagonistas
  • Considera que la huelga es mala para el país y para los desempleados

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La reforma laboral y las movilizaciones provocan un duro cruce de acusaciones entre PP y PSOE

La secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, ha situado este lunes al PSOE entre los "convocantes de huelgas" y "los primeros en las manifestaciones", mientras que el PSOE ha dicho que es "mentira" que su partido haya convocado la huelga general del 29M y cree "intolerable" que el PP mine la credibilidad de los sindicatos.

A Cospedal, la estrategia del PSOE de incitar a las huelgas no le parece "adecuada para un partido serio que quiere ser alternativa de gobierno", toda vez que la huelga convocada para el día 29 es "muy mala para los intereses de España".

En una rueda de prensa en la sede del partido, Cospedal quiso resaltar la diferencia entre la actitud del Gobierno tratando de arreglar, según ella, los problemas de España, y la que atribuye al PSOE, algunos de cuyos responsables "se dedican a ser convocantes de huelgas y a ser los primeros en las manifestaciones".

La dirigente popular, que ve a los socialistas "atrincherados en salir a manifestarse", justificó su acusación argumentando que, si Rubalcaba le da un plazo a Rajoy para que evite el paro del día 29, "se está autoproclamendo como organizador de la huelga" y, si la portavoz socialista en el Congreso de los Diputados, Soraya Rodríguez, acude a las movilizaciones, "el PSOE se convierte en protagonista de primera línea en la convocatoria".

Cospedal, que volvió a llamar la atención sobre la actitud de un PSOE a quien hizo "responsable de los cinco millones de parados", considera que esa estrategia "no es la adecuada para un partido serio que quiere ser alternativa de gobierno", porque, aseguró, la ciudadanía demanda medidas como la que el Ejecutivo está llevando a cabo. "No es la actitud que se espera de una oposición responsable", abundó.

Elección del 11M poco afortunada

La número dos del PP no entró a valorar la afluencia a las concentraciones de ayer contra la reforma laboral, aunque sí dejó caer que la elección del 11 de marzo le parece "poco afortunada" por no tener en cuenta el respeto que merecen las víctimas de los atentados de 2004.

Por lo demás, reconoció el derecho a manifestarse pero señaló que los convocantes de esas movilizaciones y de la huelga deberían pensar en los españoles que no tienen un puesto de trabajo y en que "la situación económica de nuestro país no está para huelgas".

Para Cospedal, con sus protestas "los sindicatos no hacen más que perjudicar la actividad económica", en un momento en que todos los agentes han de trabajar por la recuperación "y no poner piedras en el camino".

De la huelga general convocada para el día 29 dijo específicamente que es "muy mala para los intereses de España", y se mostró convencida de que este Gobierno garantizará que el derecho al trabajo sea respetado con la misma intensidad que el de huelga.

Valenciano: "Intolerable" minar el nombre de los sindicatos

Por su parte, la vicesecretaria general del PSOE, Elena Valenciano, ha negado que su partido haya convocado la huelga general, que es una decisión de las organizaciones sindicales, y ha tachado de "intolerable" que el PP esté tratando de minar la credibilidad y el buen nombre de los sindicatos y ha calificado de "mentira" las acusaciones de Cospedal.

Según la dirigente socialista, la decisión de convocar la manifestación de ayer o la huelga general del día 29 es de los sindicatos, que "tienen toda la razón" cuando se preocupan del "enorme desequilibrio" entre empleados y empleadores que se generará con la reforma laboral.

Valenciano ha subrayado que esta reforma no viene determinada por la necesidad de hacer un ajuste económico, sino que el PP está haciendo un ajuste social, "un ajuste de cuentas con el Estado social", algo que "la derecha siempre quiso hacer" y que ahora intenta llevar a cabo con la excusa de la crisis y su mayoría absoluta.

Frente a ello, los sindicatos han decidido emplear el instrumento "más potente" que tienen para combatirlo, que es la huelga general, que, en opinión de Valenciano, es "justa y legítima", pero evitable, siempre que el Gobierno se siente a negociar con las centrales sindicales.