Enlaces accesibilidad

'La red social', crónica de una generación

  • La película de David Fincher/Aaron Sorkin copa la taquilla de EE.UU.
  • Es una obra maestra que retrata la historia de la creación de Facebook

Por
Días de cine - 'La red social', de David Fincher

La red social (2010)

  • Dirección: David Fincher
  • Guión: Aaron Sorkin
  • Reparto: Jesse Eisenberg, Andrew Garfield, Justin Timberlake, Max Minghella, Armie Hammer, Rooney Mara.
  • Música: Trent Reznor
  • Productor ejecutivo: Kevin Spacey
  • Distribuidora: Sony Pictures
  • Presupuesto: 50 millones de dólares (36,5 millones de euros)

Un nerd aprieta cada diez segundos la tecla de F5 a la espera de ser aceptado como "amigo" en Facebook por una antigua novia mientras la cámara cierra plano con un zoom muy lento.

Poderosa imagen cinematográfica que podría retratar a toda una generación en marcha y que es sólo una de las muchas que La red social, la película de David Fincher (Seven, El club de la lucha, El curioso caso de Benjamin Button) sobre el nacimiento de Facebook, despliega.

Basado en la documentación del libro Multimillonarios por accidente, de Ben Mezrich, con guión de Aaron Sorkin (el creador de El ala oeste de la Casa Blanca), esta cinta, que ha copado la taquilla estadounidense en su primer fin de semana de proyección y que se estrena en España el 15 de octubre, está llamada a ser la película del año... y de muchos años.

No sólo porque es crónica del nacimiento de Facebook, una de las herramientas virtuales que está configurando una nueva era, comunidad virtual de la que forman parte una de cada 14 personas en el mundo (más de 500 millones de personas). No sólo porque retrata al multimillonario más joven del mundo, 26 años, considerado el "césar del Nuevo Establishment" por Vanity Fair y en el top 400 de Forbes.

No sólo porque es todo un análisis sociológico de una juventud que vive y protagoniza (y narra minuto a minuto) una revolución de consecuencias que todavía no se pueden calibrar porque están teniendo lugar.

Sobre todo, porque es una excelente película, una obra maestra que ha concitado una extraña unanimidad (97% en Metacritics, 97% en Rotten Tomatoes).

La red social sigue el camino de los clásicos

"Tan contemporánea como lo es la invención en el centro de la historia que cuenta, Facebook, -aseguraba Aaron Sorkin este mes de julio en la primera presentación del filme ante la prensa especializada- y con unos temas tan viejos como la misma narración de historias: lealtad, amistad, poder, dinero, envidia, estatus social, celos". Como los clásicos.

Si Esquilo o Shakespeare viviesen, habrían escrito esta historia

"Si Esquilo estuviera vivo hoy, habría escrito esta historia; Shakespeare la hubiera escrito; Paddy Chayefsky la hubiera escrito. Afortunadamente para mí, ninguno de ellos estaban disponibles, así que me tocó a mí escribirla". Palabras de Sorkin que pueden parecer arrogantes pero que tras ver la película suenan ajustadas.

La red social comienza en octubre de 2003. En una larga secuencia que avanza lo que va a ser el resto del filme (ritmo frenético, diálogos afilados, personajes llenos de matices, buena música, unas interpretaciones brutales, una realización clásica con un montaje vibrante), conocemos a Mark Zuckerberg, el personaje, sus ambiciones y su entorno.

Acaba de romper con su novia, está medio borracho y decide infiltarse en los ordenadores de la universidad de Harvard, de la que es estudiante, para crear una base de datos con todas las chicas del campus, en la que se pueda votar cuál es la que "está más buena". Facemash, que era su nombre, colapsó la red de la universidad en dos horas y desató la polémica por su presunto carácter misógino.

Aquél sería el germen de Facebook, o TheFacebook, como al principio se llamaba. Apropiándose la idea de tres estudiantes de Harvard, utilizando la inversión del amigo al que luego dejó en la estacada, y con el impulso del joven creador de Napster, el proyecto nacido en un cubículo en Harvard acabó convirtiéndose en una de las empresas más exitosas del mundo en apenas cuatro años.

Por el camino hubo celos, satisfacciones, traiciones, odios... y dos demandas multimillonarias, una de los gemelos Wiklevoss -brillantemente interpretados por un solo actor, Armie Hammer- y otra de Eduardo Saverin, el que era mejor amigo de Zuckerberg y puso el dinero para comenzar el proyecto.

Ciudadano Zuckerberg

La red social ha sido comparada con Ciudadano Kane, por el retrato de tono oscuro que hace de un personaje complicado y poderoso, un ser humano genial pero ser humano al fin y al cabo, con sus miserias y su propio Rosebud, el deseo de ser aceptado en las más exclusivas hermandades universitarias. El deseo de empatizar, en definitiva.

Con la película de Orson Welles comparte el variado repertorio de visiones del protagonista. Una narración poliédrica que trata de exponer todos los Mark Zuckerberg que hay en el único Mark Zuckerberg. Pero tiene mucho de película de abogados. Y de tragedia griega. Y de película de antihéroe posmoderno.

"No sé si la verdad se puede conocer", dice el director, David Fincher, en palabras recogidas por el press-book de la película, "pero lo que sí sé es que hay muchas personas que han hecho el esfuerzo de explicar su versión de la verdad... y que sentía como verdaderas la conducta y las reacciones de las personas en el guión de Sorkin".

"Al principio estaba perdido porque pensé: 'Dios mío, no hay dos personas que cuenten la misma historia', pero luego pensé: 'Espera, esto es genial... no hay dos personas que cuenten la misma historia'", explica Sorkin, que hizo una amplia labor de documentación.

"Ya que habían relatos encontrados, antes que decidir cuál sería el verdadero pensé que sería más emocionante literalmente dramatizarlos todos... y dramatizar el hecho de que son relatos enfrentados", detalla.

La belleza de esta película es que nadie está en el lado malo

"La belleza de esta película es que nadie está en el lado malo", asegura Andrew Garfield, que interpreta a Saverin.

La película que Zuckerberg no verá

El resultado es la biografía no oficial de uno de los seres más poderosos del planeta, la película que Mark Zuckerberg ha asegurado que no irá a ver (a pesar de que El ala oeste de la Casa Blanca es una de sus series favoritas).

El libro en el que se basa es sólo la versión de Saverin, aunque la documentación de Sorkin ha ido mucho más allá. El mismo Zuckerberg tuvo la oportunidad de dar su versión de los hechos, según los responsables de la película, pero no quiso.

Y ahora que se ha estrenado la cinta, y que ha atraído una enorme atención, el dueño de Facebook ha realizado varios movimientos que algunos consideran una campaña de imagen.

Él, que rehuye el contacto con la prensa, ha accedido a ser entrevistado para un reportaje en The New Yorker, ha anunciado en el programa de Oprah Winfrey que donará 100 millones de dólares (73 millones de euros) para las escuelas públicas de Newark... e incluso ha hecho su aparición como personaje en los Simpson.

¿Le gustará a las personas encarnadas en La red social el retrato que de ellos hace Aaron Sorkin? Éste responde: "El personaje de Mark dedica la primera hora y cuarenta y cinco minutos de la película siendo un antihéroe y los últimos cinco minutos siendo un héroe trágico, y creo que cuando acaba la película tienes ganas de darle un abrazo."

"Pero en qué medida a las personas reales les gustará, ninguno de nosotros querría que las peores cosas que hicimos cuando teníamos 19 años se convirtiesen en una película de Hollywood, por lo que... Creo que se sentirán como mínimo incómodos".