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El presidente de Siria llega a España para abordar la situación en Oriente Próximo

  • Ha sido recibido por el Rey y este lunes se entrevista con Zapatero

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Los Reyes junto con los Príncipes de Asturias y el presidente de Siria, Baschar al Asad, y su esposa, Asma al Asad
Los Reyes junto con los Príncipes de Asturias y el presidente de Siria, Baschar al Asad, y su esposa, Asma al Asad

El presidente de Siria, Bachar Al Asad, ha comenzado este domingo una visita de dos días a España, en la que se reunirá con el Rey y con el jefe del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, para afianzar los vínculos entre ambos países y evaluar la situación en Oriente Próximo.

Al Asad, acompañado de su esposa, Asma al Asad, y de una nutrida delegación de ministros, ha cenado en la primera jornada con Don Juan Carlos y Doña Sofía en el Palacio de la Zarzuela y mantendrá un encuentro con Zapatero el lunes en el Palacio de la Moncloa.

España es la última escala de su gira por Cuba, Venezuela, Argentina y Brasil.

El mandatario sirio, que ha sido recibido por el ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, en el aeropuerto de Barajas, se ha desplazado después a Toledo para realizar un recorrido por el casco antiguo de la ciudad, antes del almuerzo.

Tanto con el Rey como con Zapatero, Asad hablará del conflicto en Oriente Próximo, agravado por el asalto del Ejército israelí la  Flotilla de la Libertad el pasado 31 de mayo, en el que murieron nueve activistas turcos.

Siria tiene un papel clave en la región por su apoyo a Palestina, su alianza con Irán y Turquía y su enemistad con Israel.

Zapatero visitó Siria en octubre de 2009

España está colaborando desde hace meses con el presidente estadounidense, Barack Obama, para que las conversaciones indirectas entre palestinos e israelíes que está promoviendo la Casa Blanca puedan fructificar.

Zapatero, quien estuvo en Siria en octubre del pasado año, analizará con Al Asad las opciones de éxito de la cumbre de la Unión por el Mediterráneo, aplazada a noviembre tras no poder celebrarse durante la presidencia española de turno.

El presidente español visitó Siria en el marco de su primera gira por Oriente Medio y se comprometió en Damasco a trabajar por la paz entre israelíes y palestinos.

Se trata de la tercera ocasión en la que Al Asad visita España como presidente, después de que lo hiciera en 2001 y 2004.

El próximo día 11 Asan cumplirá diez años en la jefatura del Estado, a la que accedió tras el fallecimiento de su padre, Hafez el Asad.

Derechos Humanos en Siria

Siria es un actor importante y estratégico en Oriente Medio, aunque no está libre de controversia. En su informe de 2010, Amnistía Internacional ha mostrado su preocupación por la situación de los derechos humanos en el pais árabe, haciendo una especial mención a los "abusos" cometidos contra la oposición política.

Amnistía ha denunciado la condena a tres años de cárcel impuesta al abogado sirio y activista en derechos humanos Muhanad al Hasani, acusado por las autoridades del país de "debilitar la moral de la nación".

En ese sentido, Estados Unidos ha solicitado este lunes que el Gobierno de Siria cese los "arrestos arbitrarios" y ponga en libertad a los abogados Haitham Maleh y Muhanad al-Hasani, sentenciados "por expresar públicamente sus puntos de vista".

El portavoz del del Consejo Nacional de Seguridad (NSC), Mike Hammer, ha dicho que, de cara al décimo aniversario del presidente Bachar Al Asad en el poder, el próximo 20 de julio, "Siria debería demostrar su compromiso con las normas legales internacionales", con la puesta en libertad de Maleh, al-Hasani, Abdulá, y otros ciudadanos encarcelados "únicamente por ejercer de forma pacífica su derecho a la libre expresión y libertad de asociación".

En la actualidad, las relaciones entre Washington y Damasco atraviesan momentos de tirantez ante el presunto acercamiento de Siria con el grupo libanés chií Hizbolá compuesto por militantes anti-israelíes y que el Gobierno de EEUU incluye en su lista de organizaciones terroristas.

Siria, por su parte, ha criticado la política exterior de EEUU en la región porque, a su juicio, demuestra parcialidad a favor de Israel. El Gobierno israelí, a su vez, se muestra renuente a reactivar las negociaciones de paz con Siria.