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El oso polar desciende del oso pardo y sobrevivió al cambio climático

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Aunque sobrevivieron al cambio climático en el pasado, hoy están muy adaptados a vivir en el hielo ártico y es posible que no sobrevivan si el calentamiento globar sigue a este ritmo.
Aunque sobrevivieron al cambio climático en el pasado, hoy están muy adaptados a vivir en el hielo ártico y es posible que no sobrevivan si el calentamiento globar sigue a este ritmo.

En peligro

El oso polar está entre las especies más amenazadas de la fauna mundial y corre un alto riesgo de extinción como consecuencia de la amenaza irreversiblede su entorno natural, según la última lista divulgada por el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF). La pérdida de su hábitat, la caza y el cambio climático suponen un peligro real para la supervivencia de algunos de los animales más emblemáticos de diversos ecosistemas. El oso polar del Ártico podría extinguirse si continúa el cambio climático al ritmo actual. Actualmente existen unos 20.000 osos polares en el Ártico, pero científicos estadounidenses creen que unos dos tercios del total de osos que hay en el mundo podrían desaparecer en los próximos 50 años por el deshielo de los polos.

El estudio de un raro fósil de oso polar hallado en el ártico noruego confirma que esta especie se separó del oso pardo hace 150.000 años y que sobrevivió a un periodo interglaciar más cálido que el nuestro.

El estudio, publicado en la revista Proceedings of The National Sciences, echa luz sobre los orígenes y la evolución de una de las especies más amenazadas hoy por el cambio climático.

Hasta ahora se han hallado muy pocos fósiles de oso polar, por lo que son muy variadas las estimaciones sobre cuándo y cómo evolucionó esta especie, afirma el experto del museo de historia natural de la universidad de Oslo Oystein Wiig.

"Como los osos polares viven sobre el hielo, sus restos mortales se precipitan al fondo del mar o son devorados por carroñeros. No se depositan en sedimentos como otros mamíferos", explicó Wiig.

Compararon sus dientes con los de los osos pardos

Los investigadores de las universidades estadounidenses de Buffalo y Penn State y de la universidad de Oslo compararon el ADN mitocondrial del fósil de un diente canino y una mandíbula de oso polar descubierto en 2004 en el archipiélago noruego de Svalbard, con el de los osos pardos de las islas Admiralty, Baranof y Chichagof en Alaska.

"Nuestros resultados confirman que el oso polar es una especie joven evolutiva que se separó de los osos pardos hace unos 150.000 años y que evolucionó con extremada rapidez durante el Pleistoceno tardío, probablemente al surgir nuevos hábitat y fuentes de alimento en respuesta a los cambios climáticos justo antes del último periodo interglaciar", afirma la principal autora del estudio, Charlotte Lindqvist, de la universidad de Buffalo.

Los científicos llegaron a esa conclusión porque el fósil, que tiene entre 110.000 y 130.000 años de antigüedad, es cercano a la época en la que se produjo la escisión entre ambas especies y su edad coincide con el inicio del último periodo interglaciar.

Este es el genoma mitocondrial de un mamífero más antiguo jamás estudiado, ya que dobla en edad al del mamut, afirman los autores.

"Está claro que el fósil de este antiguo oso polar es un enlace en la transición entre los osos pardos y polares", declaró a Efe Lindqvist.

La científica señaló que aunque la morfología y los hábitos alimentarios de ese oso eran similares a los de su especie, "desde el punto de vista genético es casi tanto un oso polar como uno pardo".

Los estudios isotópicos determinaron que el oso se alimentaba, al igual que sus actuales congéneres, de focas, y los análisis de sedimentos de la zona mostraron que el entorno también era similar entonces al que hoy existe en Svalbard.

Sin embargo, Lindqvist señaló que es posible que Svalbard sirviera entonces como refugio a los osos polares y les brindara un hábitat propicio.

Sobrevivieron a un cambio climático

"Aunque los osos pudieron resistir al cambio climático en el pasado, es posible que estén tan especializados y tan bien adaptados a vivir sobre el hielo ártico que no puedan sobrevivir si el calentamiento global se mantiene al elevado ritmo que vemos hoy", advirtió.

Y explicó que cuando los científicos hablan de una evolución "muy rápida" de una especie se refieren a decenas de miles de años y no a décadas.

"Si el calentamiento global se mantiene al rápido ritmo de hoy y el hábitat helado de los osos desaparece, la especie va a enfrentarse a graves problemas", dijo.