Enlaces accesibilidad

Fidel Castro abandona la presidencia de Cuba por sus problemas de salud

  • El líder cubano asegura que no se encuentra en "condiciones físicas" para el cargo
  • El próximo 24 de febrero el Parlamento de Cuba elegirá al nuevo presidente
  • Bush: "Debe ser el comienzo de la transición democrática en Cuba"
  • España tiende la mano a los cubanos para que puedan "elegir su futuro"

Por
Fidel Castro deja la presidencia de Cuba
Imagen de archivo de Fidel Castro en la Plaza de la Revolución de La Habana en mayo de 2005. El líder cubano ha anunciado que deja la presidencia tras 49 años en el poder.

"Les comunico que no aspiraré ni aceptaré - repito, no aspiraré ni aceptaré - el cargo de Presidente del Consejo de Estado y Comandante en Jefe". Con estas palabras, Fidel Castro ha anunciado que abandona la presidencia de Cuba, tras 49 años en el poder.

En un comunicado publicado por la edición digital de Granma, Castro justifica su decisión por su "estado crítico de salud". Traicionaría mi conciencia ocupar una responsabilidad que requiere movilidad y entrega total que no estoy en condiciones físicas de ofrecer, ha explicado.

Las alarmas sobre el estado de salud de Fidel Castro ya se dispararon en julio de 2006. El dirigente cubano, de 81 años, tuvo que ser intervenido de una enfermedad intestinal y delegó; provisionalmente el poder en su hermano Raúl. Durante estos 19 meses el líder cubano se ha mantenido alejado de la escena política y los rumores sobre su estado se han disparado.

Tras el anuncio de que abandona la presidencia, Cuba se enfrentará a una jornada histórica el próximo 24 de febrero. Ese día el Parlamento del país se reunirá para elegir a los miembros del Consejo de Estado, al nuevo presidente y al vicepresidente. Todo apunta a que el sustituto de Fidel será su hermano Raúl, su mano derecha durante el régimen.

Reacciones en todo el mundo

La noticia de que Castro deja el poder ha dado la vuelta al mundo y las reacciones se han multiplicado. Una de las más esperadas era la del presidente de Estados Unidos. George Bush ha señalado que el abandono de Fidel "debe ser el comienzo de la transición democrática en Cuba y esta transición debería culminar con unas elecciones libres y justas". Más tarde, el número dos del Departamento de Estado, John Negroponte, aseguraba que EEUU no tiene previsto retirar el embargo sobre la isla.

La Comisión Europea ha reafirmado, tras el anuncio de Fidel Castro, su intención de entablar "un diálogo constructivo" con Cuba, con el objetivo de favorecer la transición hacia una democracia.

En España, tanto el Gobierno como los principales partidos también consideran que la renuncia de Castro puede abrir una vía a la democracia. El ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, ha asegurado que España "hará todo lo posible" para ayudar a los cubanos, a quienes corresponde "decidir su futuro".

Mientras, la Habana ha recibido con calma el abandono de Castro. La noticia no ha pillado por sorpresa a los cubanos, tras 19 meses con un presidente interino y los problemas de salud de Fidel.