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La Justicia de Guatemala ordena la detención del ex presidente Alfonso Portillo

  • El ex presidente (2000-2004) es investigado por presunta corrupción
  • EE.UU. ha pedido su extradición

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La Justicia guatemalteca ha ordenado la captura del ex presidente Alfonso Portillo (2000-2004), quien es investigado por supuestos casos de corrupción por la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala (Cicig), confirmaron fuentes judiciales.

La detención de Portillo, quien fue extraditado de México en 2008, fue ordenada por el Juzgado de Primera Instancia Penal y este domingo, agentes de la (Cicig), de la Policía y del Ministerio Público han allanado dos viviendas con ese fin sin, éxito, han agregado las fuentes del Organismo Judicial (OJ).

Una residencia del ex mandatario en el departamento oriental de Zacapa, de donde es originario, fue rodeada el sábado por la noche por agentes que este domingo entraron en el inmueble para tratar de capturar a Portillo, dijeron fuentes del Ministerio de Gobernación (Interior).

También allanaron otra casa del ex mandatario en una zona residencial del sur de la capital guatemalteca, pero el ex gobernante no fue encontrado en ninguna de las dos residencias.

Petición de extradición de EE.UU.

Portillo se encuentra en libertad bajo fianza desde que fue extraditado de México, y es investigado por la Cicig, que dirige el magistrado español Carlos Castresana, por un caso de corrupción de al menos 120 millones de quetzales (14,4 millones de dólares) durante 2001.

Fuentes del tribunal explicaron a periodistas que hace dos semanas el gobierno de Estados Unidos solicitó a Guatemala la extradición de Portillo por un delito de lavado de dinero, pero esta petición se ha divulgado este domingo.

También la cartera del Interior confirmó que la búsqueda de Portillo para capturarlo es con fines de extradición a Estados Unidos.

La Fiscalía Federal de Miami, según publica el diario local Prensa Libre, ha presentado cargos formales contra Portillo al considerar que utilizó la banca de ese país para trasladar dinero del erario público hacia cuentas de Europa y las Islas Bermudas.