'Documentos TV' estrena esta semana 'Fronteras de alto coste'
- Martes 17 de enero, a las 23:30 horas en La 2
Alambradas, perros guardianes, cámaras de vigilancia y la más sofisticada tecnología para disuadir a los inmigrantes. ¿Son eficaces esos dispositivos? ¿Cuánto cuesta la protección de la fronteras? ¿Se puede detener la inmigración? El documental trata de responder a estas preguntas mediantes las investigaciones realizadas durante un año en cuatro continentes. La conclusión a la que llegan es clara: las fronteras se han convertido en un nuevo y gigantesco negocio para la industria del armamento, que incluso se expone en salones para captar nuevos clientes. "En Estados Unidos, el ejército compra menos, así que buscamos nuevas salidas a nuestros productos", explica un industrial americano.
La estrella del mayor salón dedicado a la seguridad de las fronteras, que se celebra en Fénix, Arizona, es el dron Quadcóptero, totalmente autónomo. "En realidad se trata de tecnología militar aplicada a la seguridad nacional", explica uno de los vendedores. El coste de cada dron es de 17 millones de dólares.
Europa vive la crisis migratoria más grave desde el final de la segunda guerra mundial. Hombres, mujeres y niños luchan y se dejan la vida mientras Europa cierra sus fronteras. Una de las primeras barreras europeas que se construyó fue la de Melilla. Desde 2005 una valla de acero separa España de Marruecos con 650 guardias civiles vigilando los 11 kilómetros de muro, cuya remodelación costó 33 millones de euros.
Uno de los principales puntos de paso hacia el espacio Schengen a través de la isla de Lesbos es el puerto de Izmir, en Turquía. En el Khave Café se dan cita traficantes e inmigrantes que llegan hasta aquí después de un periplo de meses con sus pertenencias a cuestas. "Los refugiados son como un gran pastel. Los barqueros ganan mil dólares por cada inmigrante que llevan a Europa. Un barco son 5.000 dólares de beneficio en un solo día de trabajo", explica un captador de inmigrantes para los traficantes que cobra de media 100 dólares por cada uno.
Según 'The Migrant Files', una investigación publicada en 2015 por periodistas europeos, la entrada de inmigrantes clandestinos a Europa habría generado en 15 años, un negocio de al menos 16.000 millones de euros.