Trump accede a que Orbán siga comprando petróleo ruso pese a las sanciones
- Hungría ha recibido excepciones "generales" y "sin límite temporal" a las sanciones, ha anunciado Orbán
- Es el sexto encuentro entre ambos mandatarios desde 2019
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha asegurado este viernes, en un encuentro junto al primer ministro de Hungría, Víktor Orbán, que está "analizando" eximir a ese país europeo de las sanciones impuestas a las petroleras rusas.
"Es muy difícil para él (Orbán) tener el petróleo y gas de otras zonas, puesto que no tienen la ventaja de tener costa. Es un país estupendo, sin costa y sin puertos. Y por tanto, tienen un problema de acceso", ha señalado el mandatario norteamericano tras ser consultado en una conferencia de prensa junto a su aliado.
Trump ha criticado que haya otros países europeos que están comprando energía a Rusia. "Llevan años haciéndolo y me encantaría que me explicaran por qué", ha remarcado.
Negociar al respecto
A su turno, Orbán se ha preguntado qué supondría para su país no comprar gas y petróleo ruso. "Porque tenemos los oleoductos, es una realidad física. Tenemos esta conexión con Rusia, tenemos que explicarlo y vamos a negociar al respecto, es una negociación vital para nosotros", ha dicho.
Hungría, cuyo Gobierno mantiene buenas relaciones también con Moscú, depende mucho de las importaciones de gas y crudo de Rusia, ya que adquiere allí el 85% y el 65%, respectivamente, de lo que consume. "Queremos explicar las consecuencias que tendría para el pueblo y la economía húngara" dejar de adquirir energía de Rusia, pues, ha añadido, su país "depende de los gasoductos".
Trump ha recibido a Orbán en la Casa Blanca en un encuentro previsto para abordar la relación bilateral y en el que se preveía que Orbán intentara lograr excepciones a las sanciones de Estados Unidos contra las petroleras rusas con las que Vladímir Putin financia la guerra de Ucrania.
Según adelantó la semana pasada el ultranacionalista húngaro, esas medidas de Washington podrían provocar un aumento en los precios de la energía en Hungría, ya que ese país depende en gran medida de las importaciones de gas y petróleo de Rusia.
Hungría recibe exenciones "sin límite temporal" a las sanciones
Finalmente, Hungría ha recibido exenciones "generales" y "sin límite temporal" a las sanciones impuestas contra Rosneft y Lukoil, ha asegurado Orbán tras reunirse con Trump. "Hungría seguirá teniendo los precios de energía más bajos. Hemos recibido una excepción para los oleoductos Turco y Druzhba (Amistad)", ha dicho en declaraciones a la prensa húngara desde la capital estadounidense por la emisora pública M1.
"Se trata de un acuerdo general y sin límite temporal", ha precisado el primer ministro húngaro. Posteriormente, un funcionario de la Casa Blanca ha puntualizado que Hungría ha recibido una exención de las sanciones de un año.
Buena sintonía con Trump y Putin
Orbán es el único líder comunitario que apoyó al estadounidense ya en la campaña electoral de 2016, y Trump ya ha afirmado que apoya la reelección de su socio húngaro en los comicios legislativos previstos para abril próximo.
Además de la buena sintonía con Trump, el líder húngaro también es aliado del presidente ruso, Vladímir Putin, y las buenas relaciones entre Budapest y Moscú también se esperaba que pudieran ser un tema del encuentro de la reunión de este viernes.
La guerra en Ucrania sobre la mesa
"Nos dirigimos a Washington para abrir un nuevo capítulo en las relaciones húngaro-estadounidenses con el presidente Trump. Nuestro objetivo es establecer una asociación estratégica que incluya cooperación energética, inversiones, colaboración en defensa y discusiones sobre el panorama posterior a la guerra tras el conflicto Rusia-Ucrania", expresó Orbán este jueves en un mensaje en la red social X.
A mediados de octubre, Trump había anunciado que "muy pronto" tendría lugar una reunión en Budapest con Putin para hablar de la paz en Ucrania. Sin embargo, días más tarde la Casa Blanca aseguró que ese cónclave no tendría lugar en un "futuro inmediato". El rechazo de Moscú a un alto el fuego inmediato en Ucrania han ensombrecido los intentos de negociación.
En el encuentro de este viernes, Trump ha indicado que iban a hablar de "las reuniones con Putin". "Él le conoce muy bien, le comprende muy bien. Creo que Viktor nos va a ayudar a que esta guerra acabe en un futuro no muy lejano. ¿A que sí?”, ha dicho Trump, tras lo que el ultranacionalista ha sido tajante: “Si, yo estoy convencido de que va a ser el caso”.
“Ahora la cuestión es si los de occidente están de acuerdo o no. El presidente (Trump) tiene mucha fuerza, es algo espléndido y positivo para todos los pueblos europeos, pero al mismo tiempo no somos un pueblo unificado porque los europeos y Bruselas tienen otro punto de vista sobre la guerra”, ha remarcado Orbán.
Según el primer ministro húngaro, “el único gobierno en favor de la paz es EE.UU.” y el suyo, ya que a su juicio “el resto prefiere que continúe la guerra porque piensan que Ucrania va a ganar”, lo que “es no entender para nada la situación”.
“¿Así que tú dirías que Ucrania no puede ganar la guerra?”, le ha preguntado Trump, lo que ha despertado las risas del líder ultranacionalista mientras le ha respondido: “A ver, puede pasar un milagro”.
La cuestión migratoria
Sobre la cuestión migratoria, el presidente Trump ha considerado que "Orbán es un gran líder y otros líderes se han equivocado, sobre todo cuando hablan de inmigración". "Fijaros en Europa. Han cometido terribles errores con la emigración que ahora le están haciendo mucho daño, mientras que Hungría no lo ha hecho. Todo el mundo le respeta y solo algunos le aprecian. Yo le aprecio y le respeto", ha sentenciado.
"Todos los líderes de Europa son mis amigos, nos llevamos muy bien todos y han hecho todo lo que les he pedido, con la OTAN. Lo único es que siguen comprando petróleo a Rusia, que no está bien. Pero les he dicho: respetad a este hombre, y aprended de Víktor. Tiene una postura muy firme, sobre todo sobre en inmigración, en concreto los inmigrantes ilegales. No entra nadie ilegalmente al país", ha agregado, convencido de que "la gente inunda Europa, nadie les para, nadie hace nada, nadie les devuelve a sus países de origen".
Al respecto, el primer ministro húngaro ha sacado pecho: "En Hungría el número de migrantes ilegales es cero, cero. Tenemos un sistema clarísimo. Si alguien quiere venir a Hungría, lo que tiene que hacer es pedirlo legalmente, y cuando se le da ese permiso puede entrar en el país, nadie puede poner un pie en territorio húngaro sin el permiso correspondiente".
"Ahora mismo sufrimos sanciones por parte de la Unión Europea porque no permitimos que los inmigrantes ilegales entren en Hungría ni tampoco accedan a la UE a través de nosotros", ha recordado.
