La Audiencia Nacional abre diligencias por las protestas en la Vuelta por un posible delito de odio contra el equipo Israel
- El Gobierno defiende la legitimidad de las protestas propalestinas en la Vuelta y el PP le exige "máxima seguridad"
- Interior blindará Madrid con un dispositivo especial para velar por la seguridad ante las previsibles protestas
El juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz ha acordado abrir diligencias a raíz de la denuncia presentada por la asociación Acción y Comunicación sobre Oriente Medio por presuntos delitos de odio, contra la seguridad vial, lesiones y desórdenes públicos contra los promotores del boicot al equipo ciclista Israel-Premier Tech en la Vuelta a España, según han confirmado fuentes jurídicas a RTVE.
El magistrado le ha dado traslado a la Fiscalía para que se pronuncie sobre la competencia de este órgano judicial para investigar la denuncia y sobre si procede admitirla a trámite, un paso habitual en estos casos.
La denuncia se dirige "contra los autores materiales contra los instigadores y amparadores institucionales", entre los que la asociación cita a la red RESCOP/BDS y a dirigentes y formaciones como EH Bildu, Podemos, Izquierda Unida y Sumar, así como contra el director técnico de la carrera, Kiko García.
Igualmente ha anunciado que seguirán otras acciones legales contra otros políticos como el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, o la ministra de Juventud e Infancia, Sira Rego.
La asociación, que ha llegado a solicitar la cancelación de la Vuelta Ciclista, ha justificado en un comunicado la presentación de su denuncia al considerar que ha habido "acciones organizadas de coacción, bloqueos intencionados de la calzada y comportamientos temerarios que pusieron en serio riesgo la integridad física de deportistas, miembros de la organización, espectadores y fuerzas de seguridad".
Interior despliega un dispositivo de seguridad
Las protestas propalestinas están acompañando a la Vuelta Ciclista en cada etapa y, a tres días de su llegada a Madrid, la Comunidad ha pedido al Gobierno que garantice la seguridad y dé una respuesta "contundente" ante posibles incidentes. El Ministerio del Interior ya ha anunciado un dispositivo especial para blindar la ciudad y ha pedido no poner en riesgo a los deportistas, pero ha remarcado que las manifestaciones son "necesarias".
A su paso por Galicia, las cámaras que retransmiten la Vuelta han captado una vez más a manifestantes con banderas palestinas, mientras El Bierzo (León) ha amanecido con una enorme pintada en la carretera a la altura del kilómetro 75 del recorrido.
En la Comunidad de Madrid, su presidenta, Isabel Díaz Ayuso (PP), ha pedido por carta al Gobierno central la "máxima seguridad". Además, en una entrevista en Antena 3, ha censurado la imagen "horrorosa" que proyecta España de "antisemitismo". "Eso es lo que se está viendo, un país que agrede a deportistas", ha aseverado.
"Quien quiera protestar de forma violenta y reventar tiene que tener una respuesta firme y contundente", ha manifestado por su parte el alcalde de la capital, José Luis Martínez Almeida, que exige al Gobierno todos los medios. "No queremos titubeos", ha subrayado.
El departamento que dirige Fernando Grande-Marlaska ha informado de que va a desplegar 1.500 agentes de la Policía y la Guardia Civil para velar por la seguridad. El objetivo, según la Delegación del Gobierno, es compatibilizar el "legítimo derecho de manifestación" con el desarrollo de la prueba en las etapas que se desarrollarán este sábado y domingo.
El ministro del Interior ha pedido, además, que "no se ponga en riesgo" la seguridad de los ciclistas durante las protestas "legítimas". "Estoy convencido de que va a ser posible", ha asegurado Marlaska a preguntas de los periodistas en los pasillos del Congreso.
El PSOE defiende que por encima de todo "están los derechos humanos"
Pero el PP muestra su desconfianza. "No sé qué es más preocupante, si que España como país no sea capaz de garantizar la seguridad ante un evento deportivo internacional o que el propio Gobierno promueva que no pueda ser seguro un evento internacional deportivo", ha declarado la portavoz del PP en el Congreso, Ester Muñoz.
Por su parte, el portavoz del PSOE en el Congreso, Patxi López, ha defendido que las protestas ciudadanas propalestinas son "legítimas" y que por encima del deporte "también están los derechos humanos en el mundo". A su juicio, las manifestaciones reflejan "lo que está pensando la inmensa mayoría de la ciudadanía española".
"Otra cuestión es que esto se puede ejercer con algún atisbo de violencia, cosa que no digo que haya sucedido. Que eso no lo compartimos de ninguna de las maneras. Pero los responsables de la Vuelta Ciclista a España deberán entender también que hay un clamor popular", ha argumentado el portavoz.
Mientras tanto, el delegado del Gobierno en Madrid, Francisco Martín, ha pedido este miércoles "responsabilidad" a los dirigentes políticos para "no calentar el ambiente" de cara a garantizar la seguridad. En declaraciones remitidas a los periodistas, Martín ha asegurado que con el dispositivo que se despliegue en Madrid tratarán de "compatibilizar el desarrollo de la prueba deportiva con el legítimo derecho de manifestación de los ciudadanos".
Además de Madrid, se están desplegando dispositivos policiales en otros puntos de la competición, como en Ourense y Valladolid. El martes, la organización se vio obligada a acortar en ocho kilómetros la etapa en Galicia (norte) por una concentración que impidió el paso de los ciclistas y el pasado domingo la policía detuvo a diez personas en otra protesta similar.
