El Festival de Venecia arranca con la indefinición de la Mostra ante la demanda para que reconozca el genocidio en Palestina
- La organización responde con un escueta “apertura al diálogo” a una carta firmada por 1.500 profesionales
- Sorrentino, Del Toro o Lanthimos compiten por el León de Oro; Estrany riu, participada por RTVE, lidera la presencia española
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¿Condenar o no condenar a países responsables de conflictos bélicos? Las organizaciones de los grandes festivales de cine optaron por la firmeza respecto a la invasión rusa de Ucrania con sanciones directas (Cannes, Venecia y Berlín prohíben delegaciones de películas que tengan relación con estado ruso), pero se han puesto un poco de perfil con Israel, alineándose más con los gobiernos de sus países que con la clara postura de la ONU y su denuncia de genocidio en Gaza.
Lo que sí empieza a escucharse alto es la posición de los directores e intérpretes. Si en el pasado Festival de Berlín, al recoger el Oso de Oro honorífico, Tilda Swinton denunció “el asesinato en masa perpetrado por un estado y permitido internacionalmente”, pero sin mencionar las palabras Israel o Gaza, el Festival de cine Venecia comienza este miércoles bajo el revuelo de la carta abierta de cientos de profesionales que denuncian un “genocidio del estado de Israel en Palestina” y solicitan a la Bienal “una postura clara e inequívoca”.
La misiva, que forma parte del movimiento Venice4Palestine está firmada por 1.500 miembros de la industria audiovisual italiana como Marco Bellocchio, Alice Rohrwacher, Mateo Garrone o Toni Servillo, y alguna internacional como Ken Loach, Abel Ferrada o Audrey Diwan. El certamen contestó tibiamente que estaba “abierto al diálogo”.
Hand of Dante, dirigida por Julian Schnabel, se ha convertido en la película de la discordia. Venice4Palestine solicitó el boicot para sus intérpretes: el escoces Gerald Butler, que ha apoyado con su presencia galas recaudatorias de la organización Friends of de IDF (Amigos de las fuerzas de Defensa de Israel), la mima fuerza militar que Javier Bardem calificó de “nazi” hace una semana; y también para la actriz israelí Gal Gadot, que, aunque fue instructora de combate, no ha llegado tan lejos como Butler, pero sí ha denunciado en el pasado "presiones" para que critique al al gobierno de su país.
La actriz israelí Gal Gadot
Representantes de Hand of Dante anunciaron este martes que ni Gadot no Butler acudirán a Venecia, aunque especificaron que tampoco habían llegado a confirmar nunca su presencia, desvinculándolos directamente de la polémica. Venice4Palestine sí celebró la inclusión en la competición de La voz de Hind, de la directora tunecina Kaouther Ben Hania, que recoge el asesinato de una niña palestina de cinco años en 2024 y que utiliza las llamadas telefónicas reales de la niña y su madre.
En la rueda de prensa que ha dado el pistoletazo de salida este miércoles, el director artístico del certamen, Alberto Barbera, ha rechazado plenamente la petición sobre Gadot y Butler porque "la Bienal es la principal institución cultural italiana y no ejerce censura alguna sobre nadie", al mismo tiempo que ha sido más específico en mostrar "un enorme pesar por lo que está sucediendo en Gaza y Palestina y por la muerte de civiles y sobre todo niños, víctimas a menudo definidas con el término horrendo de 'daños colaterales' de guerras a las que nadie ha conseguido aún poner fin".
El presidente del jurado encargado de otorgar los premios de la sección oficial, el cineasta estadounidense Alexander Payne, ha soslayado completamente su postura declarando "no estar preparado" para opinar y dejar claro que su presencia se limita a "valorar películas". Barbera ha avanzado que espera protestas en el Lido anunciadas para sábado el 30 de agosto.
Sorrentino, Guillermo del Toro o Lanthimos , en la lucha por el León de Oro
Respecto a la competición, Venecia continúa con su posición de la última década: un poco a la estela de Cannes en las mejores películas de autor, pero con un puñado de grandes películas de directores de primera línea que buscan un aldabonazo en Venecia para inciar la temporada de premios.
La película inaugural es La grazia, de Paolo Sorrentino, que vuelve a contar con su actor fetiche Toni Servillo. Tal vez la película más esperada para el gran público sea la versión de Frankenstein de Guillermo del Toro, con Christoph Waltz, Jacob Elordi, Oscar Isaac o Mia Goth en el reparto.
Otra cita relevante es la nueva película de Yorgos Lanthimos, ganador del León de Oro hace dos años con Pobres criaturas, que regresa con Begonia. El cine estadounidense, habitual de la Mostra, suma Jay Kelly, de Noah Baumbach, con George Clooney y Adam Sandler; The Smashing Machine de Benny Safdie, protagonizada por Dwayne Johnson; o A House of Dynamite, nuevo thriller político de la ganadora del oscar Kathryn Bigelow
Estrany riu lidera la presencia española
Tras el histórico León de Oro para La habitación de al lado, de Pedro Almodóvar, en 2024, el cine español rebaja su presencia en la Mostra. Estrany riu, del joven debutante Jaume Claret Muxart, anunciada como una particular y poética mirada a la adolescencia y la familia, estará presente en la sección Orizzonti, segunda en importancia en el festival.
Imagen de 'Estrany riu'. Elástica films
Y, en secciones paralelas, podrá verse Anoche conquisté Tebas, de Gabriel Azorín, y Calle Málaga, de la cineasta marroquí Maryam Touzani, que cuenta con producción española y la presencia en el reparto de Carmen Maura y Marta Etura.
