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Kenneth Roth estrena su nuevo libro: "Trump será visto como un fracasado si cede ante Putin"

  • Righting Wrongs expone la historia de algunas guerras y los gobiernos abusivos detrás de ellas
  • "Trump ya ha demostrado que sabe presionar a Netanyahu", indica el ex director general de HRW
Kenneth Roth, ex director general de HRW: "Es obvio que estamos peor tras el regreso de Trump al poder"
Diego Arizpeleta (Corresponsal de TVE en Londres)

Kenneth Roth es un hombre espigado, delgado y extrañamente atlético a sus 69 años. Cuando te habla, te mira directo a los ojos desde su 1,90 de altura, coronado con un peinado clásico, con la raya a un lado. Y desde ese pedestal te transmite sus convicciones sin titubeos, con firmeza y con argumentos.

Hijo de una familia judía, su padre huyó de la Alemania nazi justo antes del comienzo de la guerra. Una experiencia que probablemente está en el origen de su compromiso con los derechos humanos.

Durante los años 80 ejerció como fiscal federal en Nueva York y formó parte de la investigación del caso Irán-Contra en Washington. Pero si se le conoce internacionalmente es por su labor durante casi tres décadas al frente de Human Rights Watch, la organización no gubernamental que investiga, documenta y denuncia las violaciones de los derechos humanos por todo el planeta. Como director ejecutivo de HRW ha tenido que mirar directamente a los ojos a algunos de los mayores villanos de las últimas décadas.

Presenta su último libro, de título Righting Wrongs, que se podría traducir como Corregir errores, y que juega con el equívoco de que, al pronunciarlo en inglés, suena igual que Escribiendo errores. “Llegó a Ruanda poco después del genocidio; examinó el impacto de la invasión de Kuwait por Saddam; investigó y condenó el maltrato de Israel a los palestinos. Dirigió esfuerzos para reducir la persecución del gobierno chino contra los musulmanes uigures…” reza la mancheta.

Pregunta: Señor Roth, ¿la situación de los derechos humanos es mejor o peor después de la vuelta de Donald Trump a la presidencia de Estados Unidos?

Respuesta: Obviamente, estamos en una posición peor. Porque a Trump le importan un bledo los derechos humanos. No le importa violarlos él mismo, y tampoco le interesa promoverlos en el extranjero. Nuestro reto es obligar a Trump a hacer lo correcto, aunque sea por las razones equivocadas. A Trump solo le importa él mismo, quiere ser percibido como un gran negociador. Pero si comprende que será visto como un fracaso si cede ante Putin en Ucrania, o si favorece a Xi Jinping en Taiwán, podremos presionarlo para que defienda los derechos humanos". Con respecto a Gaza, tampoco le pueden importar menos los derechos del pueblo palestino.

Portada de libro con título

Portada del libro 'Righting Wrongs' de Kenneth Roth. Penguin Libros

P: ¿Qué piensa sobre los planes de Trump para Gaza, que vimos plasmados en un vídeo de inteligencia artificial?

R: Lo que Trump ha propuesto, reconstruir Gaza sin los palestinos y no permitirles que regresen, es un crimen de guerra masivo, de deportación forzosa, de lesa humanidad. La buena noticia es que los estados árabes lo rechazaron de forma unánime. No quieren ser cómplices de este enorme crimen. La mala, que Trump ha legitimado el sueño de la extrema derecha israelí, algo que nadie había hecho antes.

La clave es lograr que Trump admita que la única manera de conseguir una normalización de las relaciones saudíes con Israel es presionar a Netanyahu para que acepte una salida para el Estado palestino. Esa es la única opción realista para el futuro. Trump ya ha demostrado que sabe presionar a Netanyahu. Así consiguió el alto el fuego temporal. Ahora tenemos que tomar la iniciativa y conseguirlo de nuevo sobre la cuestión mayor, que es la creación de un Estado Palestino.

Trump califica de

El presidente de EE.UU., Donald Trump Alex Wong/Getty Images

P: ¿Y cómo se le puede hacer cambiar de opinión con respecto a Putin?

R: La clave en Ucrania es hacer que Trump entienda que un alto el fuego sin garantías de seguridad es exactamente lo que Putin quiere. Porque le permitirá rearmar a su ejército, continuar con la invasión y acabar con la democracia ucraniana. Eso es un mal acuerdo, y Trump no quiere que lo conozcan como alguien que hace malos tratos. Él cree que es maestro negociador, y no el Neville Chamberlain del siglo XXI. Para que Trump haga lo correcto, tiene que entender que su legado quedará empañado si sigue por el camino actual. Porque lo que a él le importa es su reputación.

Fotografía de Donald Trump y Vladimir Putin, ambos hablando por teléfono; él, con traje oscuro y corbata azul; él, con camisa azul y corbata oscura.

P: ¿Qué señales está lanzando al mundo diciendo que se quiere quedar Groenlandia o el canal de Panamá?

R: Si Trump sigue adelante con esa idea ridícula de invadir Groenlandia, básicamente le está dando luz verde a Putin para continuar con la invasión de Ucrania, y autorizando a Xi Jinping a tomar Taiwán por la fuerza. Sus ideas tienen repercusiones reales. Esta vez Trump se ha rodeado de aduladores. Ya no hay adultos en la sala, al contrario de lo que ocurrió en su primer mandato. Aun así, creo que lo que intenta es atraer a la gente de Groenlandia para que decida unirse de forma voluntaria a Estados Unidos. En Dinamarca temen que pueda funcionar, pero creo que la probabilidad de que invada Groenlandia es remota dadas las terribles consecuencias que eso tendría".

P: El expresidente filipino Rodrigo Duterte ha sido detenido y trasladado ante la Corte Penal Internacional, acusado de violaciones de crímenes contra la humanidad. Parece que este tipo de acciones funcionan con el pez pequeño, pero no con otros peces más grandes como Putin o Netanyahu.

R: Bueno, no subestimemos la detención de Duterte. Se trata de un hombre acusado de supervisar la ejecución sumaria de 30.000 personas en su supuesta guerra contra las drogas. Y se convertirá en el primer jefe de Estado en ser juzgado. Esto es muy importante. Ahora bien, ¿comparecerán Putin o Netanyahu en La Haya? Podría ocurrir. Milosevic creyó que nunca lo haría, pero luego perdió el poder y el nuevo gobierno serbio lo entregó para que se levantaran las sanciones. Algo así podría pasar también en Moscú.

Pero incluso aunque no suceda, Putin y Netanyahu ya tienen que hacer frente a muchas limitaciones. Por ejemplo, la reprimenda implícita que significa la orden de busca y captura del Tribunal Penal Internacional es enorme. Además, los 125 estados miembro de la TPI están obligados a detenerlos. Así que sus movimientos por el mundo están muy limitados. Esa es la razón por la que Putin no pudo asistir a la Cumbre de los BRICS en Sudáfrica. Y por eso Netanyahu ya no es bienvenido en Europa. No es lo mismo que una condena a prisión, pero sí es una limitación y un paso adelante.

Trump y Netanyahu reunidos en la Casa Blanca para abordar la guerra en Gaza

El presidente de EE.UU., Donald Trump, y el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, se reúnen en la Casa Blanca para abordar la guerra en Gaza, el lunes 4 de febrero. Europa Press