Excarcelado el primer preso de ETA al que se le aplica la nueva ley de cómputo de penas
- La Audiencia Nacional descuenta a Balbino Sáenz Olarra la condena cumplida en Francia, donde fue detenido en 2002
- La trasposición de la directiva europea se aprobó en octubre por unanimidad en el Congreso, pero con críticas del PP
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El preso de ETA Balbino Sáenz Olarra ha quedado este viernes en libertad después de que la Audiencia Nacional haya aplicado la ley que acaba con el doble cómputo de condenas cumplidas en el extranjero y que se aprobó en octubre —por unanimidad, aunque con polémica política— como trasposición de una directiva europea.
La Audiencia Nacional ha estimado el recurso del condenado, conocido también por alias de Ermilo, atendiendo a dicha ley sobre intercambio de antecedentes penales. Al restarle la pena de prisión que cumplió en Francia tras su detención en 2002, se considera que ya ha cumplido su condena, que habría terminado en 2029 con la norma anterior, según han informado los colectivos de apoyo a los reclusos de ETA Sare y Etxerat.
Sáenz Olarra se encontraba en la prisión donostiarra de Martutene, donde se le había concedido el tercer grado penitenciario, que permite una mayor libertad a los reclusos.
El PP votó a favor, pero criticó que se incluyera a los miembros de ETA
La trasposición de la directiva europea, que se aprobó con los votos de todos los partidos, incluía una enmienda introducida por Sumar que eliminaba la excepción de los miembros de ETA condenados. Después del visto bueno del Congreso por unanimidad, el PP aseguró que no había reparado en esa disposición, mientras el Gobierno sostuvo que sí sabían lo que votaban y les acusó de usar a ETA de forma partidista.
Los 'populares' trataron de retrasar su aplicación con su mayoría en el Senado, pero la norma se publicó en el Boletín Oficial del Estado (BOE) en octubre y entró en vigor. Por este motivo, la Cámara Alta anunció que presentaría un conflicto de competencias ante el Tribunal Constitucional. A su entender, el rechazo en el Senado debería entenderse como un "veto" y el Congreso tendría que haber votado de nuevo la iniciativa.
Condenado a 108 años
Balbino Sáenz Olarra, Ermilo, fue miembro del comando Madrid y, tras ser detenido en Francia en diciembre de 2002, fue condenado a 10 años de cárcel en el país galo. Una vez cumplida su pena allí, la justicia francesa lo entregó a España para que pudiera ser juzgado por terrorismo.
La justicia española lo condenó a 108 años por el intento de asesinato de los exministros socialistas José Barrionuevo y Matilde Fernández y el atentado fallido contra dos furgones policiales que prestaban su servicio durante los partidos que se disputaban en el estadio de Vallecas, en 2002.
Posteriormente, fue absuelto por falta de pruebas del atentado con coche bomba junto a la sede de Repsol en Madrid en 2002, que solo causó daños materiales.
Fue uno de los 19 presos de ETA que recurrió al Tribunal Europeo de Derechos Humanos de Estrasburgo (TEDH) para que se le descontasen las penas cumplidas en Francia, pretensión que desestimó esta instancia en 2019.
"Lentitud intencionada" de la justicia, según el entorno de los presos
La red de apoyo a presos de ETA Sare ha celebrado la resolución de la Audiencia Nacional, pero ha lamentado la "lentitud", que consideran "intencionada", con la que se está aplicando la ley aprobada en octubre.
"Supone una vulneración de derechos al obligar a un número importante de presos a cumplir más tiempo de privación de libertad que la pena impuesta por los tribunales", ha opinado Sare y ha recordado que hay 52 presos de ETA pendientes de que se les acorten las condenas en aplicación de esta normativa.
