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La Justicia argentina declara "crimen de lesa humanidad" el atentado contra la AMIA y responsabiliza a Irán y a Hizbulá

  • También hay penas para los principales investigadores del caso, un juez y un fiscal, por haber inundado la causa de pistas falsas
  • El atentado dejó 85 muertos y 300 heridos en la Asociación Mutual Israelita Argentina en 1994

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Un hombre camina sobre los escombros tras la explosión de una bomba en la AMIA, en Buenos Aires.
Un hombre camina sobre los escombros tras la explosión de una bomba en la AMIA, en Buenos Aires. Ali BURAFI / AFP

La Justicia argentina ha declarado este jueves "crimen de lesa humanidad" el atentado cometido en 1994 contra la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA), y ha responsabilizado a Irán y a la organización Hizbulá del crimen, que dejó 85 muertos y 300 heridos han informado fuentes judiciales.

Según uno de los dos fallos emitidos este jueves por la Sala II de la Cámara Federal de Casación Penal, que ha revisado varias causas vinculadas con este atentado, la organización chiita libanesa Hizbulá ("Partido de Dios") actuó bajo directivas y financiamiento del Gobierno de Irán y fue la responsable del ataque.

En el dictamen judicial se señala que la acción terrorista fue planificada durante una reunión en la ciudad de Mashhad (noreste del país, la segunda ciudad más poblada, después de Teherán), con altos funcionarios iraníes y miembros de la legación diplomática iraní en Buenos Aires, quienes ordenaron la comisión de un ataque por intermedio de Hizbulá.

Irán, considerado como un "Estado terrorista" 

El fallo cita a varios ciudadanos iraníes entre los acusados, algunos de los cuales ocupaban posiciones de alto nivel en Irán -al que califica de "Estado terrorista".

Entre quienes desempeñaron roles específicos figuran Mohsen Rabbani, por aquel entonces agregado cultural de Irán en Buenos Aires y a quien se le considera uno de los principales organizadores del atentado, y Ahmad Reza Asghari, otro funcionario iraní en Buenos Aires, también vinculado a la logística del atentado.

El fallo judicial menciona específicamente que la organización Hizbulá, que está catalogada por el Gobierno argentino dentro del Registro Público de Personas y Entidades Vinculadas a Actos de Terrorismo y su Financiamiento, habría actuado bajo las directivas y con financiamiento de quienes por entonces integraban el Gobierno de la República Islámica de Irán.

La decisión para ejecutar el ataque se tomó en el Comité para Operaciones Especiales (Omure Vijeh), que entonces estaba compuesto por las más altas autoridades religiosas y políticas del régimen iraní, bajo la instigación de la Oficina de Seguridad e Inteligencia iraní.

El ataque fue planificado específicamente para llevarse a cabo en la sede de la Asociación Mutual Israelita Argentina-Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas (AMIA-DAIA) en la calle Pasteur número 633, de la capital argentina.

La Cámara Federal de Casación Penal también menciona las órdenes de captura y las solicitudes de cooperación internacional emitidas para detener a los acusados iraníes. Estas peticiones incluyen alertas rojas de Interpol, aunque la extradición ha sido sistemáticamente negada por Irán.

Condenas por falsear pistas

En el segundo fallo judicial, la Sala II de la Cámara Federal de Casación Pena ha confirmado las penas para los principales investigadores del caso, entre ellos el juez Juan José Galeano y los fiscales Eamon Mullen y José Barbaccia, por haber inundado la causa de pistas falsas.

Concretamente, Juan José Galeano ha sido condenado como partícipe necesario del delito de peculado y por prevaricato, con una pena de seis años de prisión, inhabilitación absoluta perpetua, y costas del proceso, mientras que Hugo Alfredo Anzorreguy ha sido condenado a cuatro años y seis meses de prisión por peculado y encubrimiento, con inhabilitación absoluta perpetua y costas.

Además, Carlos Alberto Telleldín ha recibido una condena de tres años y seis meses de prisión por peculado, con inhabilitación absoluta perpetua y costas, al tiempo que se dispuso el decomiso del dinero involucrado en el delito de peculado, 400.000 dólares estadounidenses.

Otros acusados como Eamon Gabriel Müllen, José Carlos Barbaccia, y Ana María Boragni han recibido penas menores y condenas de ejecución condicional.

Por último, el expresidente Carlos Saúl Menem ha sido absuelto de todos los cargos y sin costas, debido a la extinción de la acción penal por muerte sobreviniente (el exmandatario murió el 14 de febrero de 2021).

El peor atentado de la historia en Argentina

El 18 de julio de 1994, a las 9:53 horas locales, un carro bomba explotó frente a la sede de la mutua judía AMIA, causando 85 muertos y centenares de heridos, el peor atentado cometido en suelo argentino. A lo largo de los años, el proceso judicial ha sido complicado por acusaciones de encubrimiento y falta de cooperación de varios Gobiernos, incluido el iraní.

El fiscal encargado de la investigación durante 10 años, Alberto Nisman, fue encontrado muerto en su domicilio de Buenos Aires en la noche del domingo 18 de enero de 2015, en extrañas circunstancias; el caso, caratulado como homicidio desde 2018, sigue sin esclarecerse.

Este suceso ocurrió horas antes de que Nisman se presentara en el Congreso argentino para denunciar a la entonces presidenta Cristina Fernández, por supuesto encubrimiento a iraníes sospechosos del ataque.

Según el fiscal, Fernández habría firmado un acuerdo con Irán para acercar relaciones comerciales a cambio, supuestamente, de disminuir la carga judicial contra los principales sospechosos, que ocupaban altos cargos en Irán y en la organización terrorista chií libanesa Hizbulá.

Las relaciones entre Argentina e Irán han estado marcadas por la tensión debido a las acusaciones contra ciudadanos iraníes y la falta de colaboración de Irán en las investigaciones. El caso AMIA ha sido un punto de fricción constante en las relaciones internacionales de Argentina y ha influido las políticas hacia el terrorismo y la seguridad global.