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Alemania

Una exsecretaria de un campo de concentración, condenada por crímenes de guerra nazis a los 97 años

  • Era la mecanógrafa y taquígrafa de un comandante de las SS en el campo de concentración de Stutthof
  • Ha sido condenada a dos años en libertad condicional por complicidad en el asesinato de cerca de 11.000 personas

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Alemania condena a la secretaria de un campo de concentración nazi por complicidad en casi 11.000 asesinatos

Una mujer de 97 años que trabajó como secretaria en un campo de concentración nazi ha sido condenada este martes a dos años de libertad condicional por su participación en el asesinato de miles de personas, en el que podría ser uno de los últimos juicios de Alemania por crímenes de la Segunda Guerra Mundial.

Irmgard Furchner, que intentó fugarse el año pasado para no ser juzgada, era la mecanógrafa y taquígrafa de un comandante de las SS en el campo de concentración de Stutthof, en la actual Polonia.

La exsecretaria siempre había defendido que desconocía que en el campo se cometieran asesinatos, pero el tribunal de distrito de la ciudad septentrional de Itzehoe no la ha creído. Furchner ha sido condenada a dos años en libertad condicional por complicidad en el asesinato de 10.505 personas y el intento de asesinato de cinco personas.

Tenía 18 años cuando ocurrieron los hechos

A sus 97 años, la exsecretaria nazi ha sido juzgada por un tribunal para menores de 21, ya que cuando ocurrieron los hechos tenía unos 18 o 19. El tribunal ha dictaminado que formaba parte del aparato nazi que mantenía en funcionamiento ese campo de concentración.

Varios supervivientes del campo declararon en su contra en el juicio, que es el primer proceso de este tipo contra un empleado civil.

En un comunicado del tribunal se afirma que los prisioneros fueron "cruelmente asesinados mediante gaseamientos, por las condiciones hostiles del campo, por los transportes al campo de exterminio de Auschwitz-Birkenau y por ser enviados a las llamadas marchas de la muerte".

Furchner había dicho que lamentaba lo ocurrido y que se arrepentía de haber estado allí, pero las víctimas han aclarado que no se trata de meter en la carcel a una mujer de casi 100 años, si no de poner a cara a todos los que colaboraron con ellos y demostrar que había personal civil en los campos nazis que también fue culpable del horror vivido en ellos.